El resto del día lo disfruté, seguimos comiendo las sobras y jugamos a distintos juegos de cartas, por la tarde fuimos a la playa, cuando volví a la casa estaba sintiéndome mal.
-Me quemé para el culo-le mostré a Úrsula que estaba roja como un tomate- me duele la cabeza, creo que me agarró un golpe de calor
-¿Un consejito? Tomar agua, mucha agua, hidratarte, parece todo que le diga solo esto, pero ayuda mucho a sentirse mejor-asintió con la cabeza.
Me di una ducha y sí, me ardía hasta el alma, cuando salí del baño por suerte lo hice vestida, Benjamín se quedó mirándome.
-¿Podemos hablar? Siento que no terminamos nuestra charla de ayer..
Suspiré, asentí con la cabeza, entramos a la habitación y él se quedó pensativo.
-Ahora se fue Peter... Sabes que no va a volver, ¿no? Yo lo conozco... Más que vos, a mi si me dijo que se iba a ir aquella vez
No entendía a que iba todo esto.
-Que Peter no esté no quiere decir que vaya a intentar algo con vos-me sentí algo molesta- soltá Benja, soltá
Iba a irme pero él me agarró del brazo y me besó, me separé rápidamente, lo miré mal.
-Siempre quise...-él me miró, yo di media vuelta y abandoné el lugar donde estaba.
Bajé rápidamente las escaleras, Candela me leyó la cara.
-¿Pasó algo La?
-Benjamín.. Él no deja de intentar que pase algo entre nosotros-solté un suspiro- yo no quiero nada más que estar con Peter.. ¡Tarde años en aceptarlo! Ahora solo quiero pasar mi tiempo acompañándolo, estando juntitos..-asentí con la cabeza y le sonreí, ella también me sonrió.
-Solo faltan unos días y vas a España-ella elevó sus cejas- vas a escapar de este calor pesado al invierno
-Si bien amo el verano tengo ilusión que caiga nieve, no conozco la nieve..
-Es linda, espero que caiga cuando vayas
Ella me abrazó cálidamente.26 de Diciembre
Volví en el auto de Eugenia, ellas cantaban cada canción de la playlist que sonaba, yo estaba medio ida, no podía dejar de pensar en algo, ¿Peter realmente iba a dejar su vida en España para vivir en Argentina?
No me di cuenta, pero me quedé dormida en el asiento de atrás.
-¡Llegamos bella durmiente!-Candela me despertó- nos vemos en la semana, ¿dale?
-¡Dale! Gracias-las saludé a las dos, bajé mi valija y mi bolso, subí a mi pequeño departamento, me desplomé en el medio de la cama.
Recibí un me mensajito de Peter, inevitablemente sonreí, me mandó una foto en la que se estaba tomando un café frente a un arbolito de navidad con luces, sería soñado vivir toda la magia de estas épocas en otro lado, uno mucho más festivo.
Pedí delivery, encendí la tele y estaban pasando un clásico, el Grinch, amaba esa película, así que me quedé satisfecha.29 de Diciembre
Candela terminó de poner la última cosa en mi valija, Eugenia se sentó para hacer peso, durante todo el día había sido una persona inútil porque no había estado sintiéndome bien.
-Boluda mil veces te lo dije-Eugenia suspiró cansada- tomá la cajita, tal vez en este mes sí hicieron los deberes con Peter-elevó mis cejas mirándome.
-Estas jodiéndome, ¿no?-me reí.
Candela negó con la cabeza.
-Esto.. Si llega a ser cierto no tiene nada de malo, vos lo queres, él te quiere...
-Para empezar no somos novios-solté un suspiro.
-¡No hace falta! ¡Relaciones modernas!-Eugenia se rió y me robó el celular- ahí está, si tanto te jode no tener un título
Vi el chat y quería matarla, cuando quise borrar el mensaje ya era tarde, Peter me mandó un audio.
-Hola La.. ¿Si quiero ser tu novio? Mañana ya estás acá y te lo respondo, ¡cuidate chiquita
-Voy a matarte-fulminé con la mirada a Eugenia que se cubrió con un brazo y con la otra me dio un test.
Muy de mala gana les hice caso, entré al baño y esperé.
-Bueno... Se viene un Lanzanito-solté la bomba como si nada, como si estuviese diciendo que clima hace, mis amigas se quedaron sorprendidas- ustedes me dijeron que era algo obvio..
-Una cosa es creer, fantasear y otra cosa es tener la certeza..-Candela se acercó y me acarició la panza, ese me pareció un gesto demasiado fuerte, no lo esperaba.
-Bueno, tenes una sorpresa para Peter cuando pises Madrid-Eugenia me sonrió alegre.
Ellas se encargaron de que coma algo sano, se quedaron conmigo hasta que llegó el momento de ir a la terminar de aviones, iba a dejar mi país para poder conocer otro de la mano de una persona que quiero.30 de Diciembre
El avión aterrizó, el vuelo para mi fue un infierno, lo pasé mal, tuve nauseas, mareos, casi no pude mirar ninguna película.
Seguro tenía unas ojeras horribles.
Peter me sonrió al verme, arrastré mi valija y lo abracé fuertemente, igualmente todo había valido la pena, él besó reiteradas veces mi frente, yo también le sonreí.
-Bienvenida a España-elevó sus cejas, estaba muy feliz, cargó mi valija a un taxi, juntos fuimos hasta la puerta de su departamento, se veía lindo, era un lugar luminoso, espacioso, Peter realmente no vivía mal, si tan solo viera mi departamento se estaría matando.
La inseguridad se empezó a apoderar de mi, tenía mil cosas mejores en España que en Argentina, ¿porqué querría volver?
-¿Queres ir a comer algo?-me miró y me hizo una caricia en la cara-¡que linda que estas!
Le sonreí embobada, le robé un besito y asentí con la cabeza.
-Me encantan las luces y todo esto...-me quedé admirando las calles, estaba todo lleno de gente, por todos lados.
Al entrar a un restaurante nos sentamos en una mesa, Peter pidió la famosa tortilla de papa española, y una picada, iba a pedir vino y no supe con que cara mirarlo.
-¿Brindamos?-elevó sus cejas y asentí con la cabeza, chocamos nuestras copas- estoy feliz de tenerte conmigo
-Yo también estoy feliz de estar acá-remojé solo mis labios en vino, intentando ser la persona más disimulada del mundo, suspiré aliviada cuando nos trajeron la picada, sentía bastante hambre.
-¿Ya retomaste tu laburo?-me miró con curiosidad, asentí con la cabeza, yo trabajaba para una editorial de libros, me la pasaba corrigiendo cosas que pronto iban a ser publicadas.
-¿Y vos que onda? ¿Qué estuviste haciendo por acá?
Él hizo una pausa.
-Me ofrecieron un puesto más alto en la empresa para la que trabajo...-me miró y quise morirme, el mundo estaba conspirando en nuestra contra.
-¿Y vas a decir que sí?
Traté de disimular, de hacer como si la nueva noticia no me hubiese afectado.
-Es jodido.. Todo es complicado.. Tengo ganas de volver a mi país, ahí están mis papás, mis amigos... Estás vos.. Y sé muy bien que no puedo pedirte que dejes de hacer tus cosas, tu laburo y tu vida ahí te hace feliz, ¡lo sé!-soltó un suspiro.
-Vos... No decidas por mi antes de tiempo-le hice una caricia en la cara- yo no sé que nos puede deparar el futuro, pero en este momento estamos solitos, lejos de todos... Esperando a empezar otro año, uno que espero que sea mejor..
Peter esbozó una pequeña sonrisa y sostuvo su mano con la mía.
-Eso quiero-me dejó un besito ahí.
Al volver al departamento llegó el tan deseado rencuentro, me entregué a la pasión, a la suavidad y el amor de Peter, no quería que esto se cortara, se terminara nuevamente.
Él me besó en los labios, después fue bajando, dejando besos por todo mi cuerpo hasta llegar a mi abdomen, cuando lo besó me sensibilicé, Peter se dio cuenta, se rió.
-¿Qué te pasa boba?-me abrazó.
-No quiero... No quiero perderte nunca más-le dije una verdad, pero oculté otra, el verdadero motivo de mi repentina emoción, me quedé acurrucada aferrándome a su cuerpo, al rato Peter se quedó dormido.
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Mi única chance
FanfictionLali Espósito cuando era chica era fan de la navidad, toda la vida junto a su familia pasó los días previos hasta la noche buena con la familia de su mejor amigo en la casa de Cariló, desde que Peter Lanzani se fue a vivir a otro país las fiestas no...