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✾Capítulo 9✾

"Para mí este mundo no es nada más que maldad y mi propia maldad resulto surgir de las consecuencias de lo que estaba haciendo"

—Aileen Wuornos.

"Nuevos acontecimientos y amenazas"

Diana

Por si había dudas no pude dormir mucho. Es difícil cuando alguien te está asechando y tú no tienes ni puta idea de quién es. Pero bueno, eso fue ayer, espero que hoy las cosas cambien para bien.

—Recuerden que saldré con Nora después de clases —Kyle estaciono el auto.

—¿Entonces ya son algo? —pregunte algo emocionada.

—Apenas nos estamos conociendo —me hablo algo nervioso.

—Diana no lo presiones —Tara toco mi hombro.

—Bien, entonces pásenla bien y nos vemos después —sonreí para darle mi apoyo.

—Tienen cuidado de regreso —Kyle salió del auto.

Cada uno tomo caminos diferentes y yo solo quería encontrar a Charles. Llegue algo apurada a la clase y él ya estaba sentado. Camine más despacio hacia mi lugar y me senté; pude sentir su mirada y voltee a verlo.

Él acerco su silla a la mía y tomo mi mano.

—Pensé que no llegarías a tiempo.

—Estábamos hablando con Kyle —respondí —Pero ya estoy aquí —me acerque a él y lo bese.

—Me encanta que me beses —susurro en mis labios.

—Y a mí me encanta sentir tus labios contra los míos Charles —me separe un poco de él y con mi pulgar limpie el labial que se había regado por sus labios.

—No me importaría tener ese color rojo por toda la cara, si es por tener nuestros labios unidos todo el día, soportaría la burla de los demás —el color rojo en mis mejillas ya estaba presente y para disimular presione una de sus mejillas con mis dedos.

—Ustedes dos sí que son muy empalagosos —busqué a la persona detrás de mí y me topé con Ulises, sí él estaba en clases con nosotros dos.

—Ya, relájate hermano —le hablo Charles.

—Yo estoy relajado, pero parece que una parte de tu cuerpo no capta ese significado —señalo con su dedo y lo seguí para encontrarme con su entrepierna...

—Mierda —susurro Charles tapándose algo avergonzado.

—Exacto, dile que se relaje —susurro Ulises riendo y nosotros dos queríamos que la tierra nos tragara en ese momento.

—Buen día clase —saludo el catedrático —Para esta semana necesito que realicen un proyecto en grupos de tres, en un momento estaré dando a conocer con que compañeros les ha tocado.

Para ser sincera me gusta trabajar en grupo y se me da bien liderar a los demás. Así podemos obtener un trabajo bien hecho y una calificación excelente.

—Muy bien, aquí tengo sus nombres —señalo un vaso —Sacare de tres en tres para formar los grupos —indico muy animado.

Pasaron algunos minutos y nuestros nombres no salían. Eso era algo bueno, pues nos podría tocar juntos.

—Y el último grupo es... —saco lo últimos papelitos y los extendió en su escritorio —Señor Robert —Charles levanto su mano —Señor Vera —Ulises levanto la mano —Y.... señorita Loryn, ese es el último grupo.