"¿Besa bien?"
"No me pregunten eso." Lily rodó los ojos sonrojada.
"Sólo queremos saber." Liam alzo los hombros. "La última vez que besaste a alguien fue a Zayn." Río a carcajadas, recordando. Tanto Lily como Zayn se miraron riendo y negando con la cabeza, avergonzados.
"Estaba borracha." Lily se excusó. "Pensé que lo habíamos olvidado." Se cruzó de brazos.
"Sí amor y aún así lo disfrutaste, ¿no?" Zayn le hizo burla, haciendo que Lily rodara los ojos. "Es broma."
"Ugh, ya." Tomó de su café, viendo a su lado. Estaban en un café que la amiga de Liam les había recomendado, así que se habían puesto de acuerdo para salir.
Después de una semana de que Harry le había dejado flores en su puerta, sólo eran pocas las veces que coincidían.
Harry le había dicho que estaba trabajando en un caso importante y que ahora sus días en su oficina eran largas.
Hasta le había dejado su número para poder escribirse, prometiéndole que le respondería tan rápido como pudiese.
"Esperen, iré al baño." Lily dejó su café, levantándose de su silla, sus amigos asintieron a ella y se fue al baño con su teléfono en mano.
Entró al baño viendo su teléfono intentando no pensar en su vecino.
Sentía emoción como hace tiempo había dejado de sentir. Estaba evitando no hacerse ilusiones, pero era imposible con alguien tan apuesto como lo era Harry.
Tal parece que pensar en el lo atrajo pues en su pantalla la ventana de llamada apareció haciéndola abrir los ojos.
"¿Hola?" Habló.
"Hola, Lily." Su voz era ronca y podía jurar que cansada.
"Hola." Susurró.
"¿Dónde estás? Escucho eco."
"Oh yo estoy en el baño de una cafetería, vine como Zayn y Liam."
"Mmh." Lo escuchó. "Estoy en mi departamento, llegó el cartero a dejarte un sobre pero no estabas y tocó mi puerta." Dijo. "La recibí, parece ser importante."
"Muchas gracias Harry." Dijo a pesar de tener su ceño fruncido al sobre, no sabía que podía ser.
"No hay de que, cielo." A pesar de sonar tan serio como siempre, el apodo salía tan suave de él. "¿Tienes cómo llegar a casa?"
Quiso decir que sí, pero conociendo a sus amigos, era dudoso y era evidente que taxi no tomaría.
"Eh... sí, creo que sí pero-"
"Necesito un sí o no, Lily." Su voz la cortó, no era grosero, su tono era suave pero siempre hablaba de esa manera.
"No." Susurró. "Creo que no." Dijo, y era verdad, había llegado el taxi, pues el carro de ambos chicos estaban siendo arreglados y Liam pasó por ella en un taxi.
"De acuerdo. Mándame tu dirección y voy por ti cuando me digas."
Lily evitó sonreír y sentir cosquillas en su estómago. "Gracias, sí, Harry."
"De acuerdo, lo espero."
Ni Liam ni Zayn habían querido dejarla sola para esperar a Harry. Y más que hacerlo por cuidar a su amiga, era porque lo querían conocer.
La relación que los tres tenían era muy grande. Se habían conocido en el preparatoria y aunque habían estudiado en diferentes facultades, su amistad continúo hasta la fecha.
