Alice es una chica inteligente quién siempre ha mantenido un bajo perfil en su vida social. Se cambia de escuela obligada por su hermano mayor tras el acoso que sufría ahí. Tan acostumbrada a estos tratos por parte de los estudiantes, no le sorprend...
Los meses pasaron con diligencia y el viaje que tenía programado junto a Jake estaba cada día más cerca. Finalmente íbamos a ir a las Bahamas. Un destino con un clima tropical el cuál al parecer, Jake ya había estado deseando ir desde hace ya un tiempo.
No podía quejarme en lo absoluto. Era un paraíso turístico y lo mejor de todo es que iríamos solamente nosotros dos, algo que también me causaba unos nervios indescriptibles.
¿Cómo podría explicar lo caótico que fue para mi esperar ese viaje?
No paraba de ir y venir por el pasillo del segundo piso de mi casa. Me probé toda la ropa que tenía, mezclándola con posibles conjuntos sin descanso alguno. Cada cinco minutos me aparecía en la habitación de Heeseung para pedir su opinión: "¿Cómo me queda este traje de baño?", "¿Qué dirías si ves a una chica con esto?", " ¿Me veo bien? Tienes que ser sincero".
El pelinegro solo respondía con un maldito : "Te ves bien". Y eso, no podía irritarme más.
— ¡Se honesto! ¡Esto es importante!
— Alice ¡Lo estoy siendo! ¿Qué más quieres que te diga? —contestó cansado, sin entender el porqué estaba haciendo tanto alboroto. Solo pude gruñir, yéndome a mi habitación a pasos fuertes.
Deje caer mi cuerpo sobre la gran montaña de ropa que estaba sobre mi cama y suspiré con pesar. Se que no debía estresarme por algo tan simple, pero no solo se trataba de un simple viaje para mí. Era un viaje en el exterior, lejos, a solas junto a el chico que me gustaba tanto que hacía flaquear mis piernas cada vez que me hablaba. Quería verme bien, bonita, ¡Por supuesto que deseaba verme atractiva a su lado! Heeseung nunca podría entender eso... Sin tan solo tuviera una amiga o alguna figura materna que me ayudara en esta situación. Sé que mi hermano trataba de hacer su mayor esfuerzo para entenderme, pero apenas sabe diferenciar de el lila con el morado.
Me quede acostada, mirando fijamente el techo cuando el rostro de Jake se coló entre mis pensamientos y no pude evitar formar una sonrisa atontada.
Me revolví en la cama como una lombriz ante el pensamiento intrusivo y me incorporé de esta sintiéndome de mejor ánimo para seguir arreglando las mudas de ropa que llevaría. Pensar y estar con Jake, era como una especie de sedante para mí y lo mejor en ese momento era tratar de no estresarme tanto.
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El gran esperado día del viaje, llego.
Los chicos nos fueron a despedir al aeropuerto y claro, Heeseung no perdió la oportunidad para darle un "amable" recordatorio a Jake para que no se olvidara de cuidar de mí, mientras yo me despedía de los demás.
— Pásalo bien, Alice. No olvides traerme arena en una botella. —Ni-ki me abrazó con fuerza, haciéndome reír.
— ¡Buen viaje, amiga! —Jungwon me atrapó entre sus brazos y me apretó contra él, sin tener la intención de soltarme hasta que Jay llegó a nuestro lado, dándole un puntapié al moreno para que se corriera de una vez ya qué era su turno de despedirse.
