𝕻𝖊𝖑𝖎𝖌𝖗𝖔 (lunay-Jefnier Osorio )

Cap 10

Me pase por casa por aquello de pegarme una ducha antes de ir a dónde Jefnier.
Cuando salgo del taxi, me paro en seco al pensar en algo. Jefnier me había dicho que hacía una fiesta en su casa esta noche, y que yo estaba invitada.

(¡Estupendo! ¡no hay nada como tener testigos si quiero robar un coche!)

Inspeccionó una vez más mi atuendo mientras el taxi se aleja. Espero un poco, luego, me dirijo hacia la entrada. Una vez delante, me doy cuenta de que Jeimax no está aquí. Echo un vistazo al reloj para ver qué hora es.

Decido llamar a Jeimax, porque está claro que no me atrevo a entrar sola.

Cuando estoy marcando a su número, creo percibir un movimiento al otro lado del portón. ¿Jeimax?
Curiosa, me asomo y me apoyo en el. Cuándo empieza a abrirse por culpa de mi peso, me echo atrás de inmediato.

(¡Está abierto!)

Asomó la cabeza y entreveo por el resquicio que se ha abierto, un ancho sendero y el comienzo de algo que parece ser una mansión.
Echo un vistazo rápido alrededor. Sigue sin haber nadie... Está claro que Jeimax no es muy puntual!

Doy un paso adelante y abro un poco más el portón. Después de todo, ¡estoy invitada!

En principio, no debería de haber ningún problema porque entre así, sin tocar el timbre. Supuestamente es una fiesta, pero no veo a nadie por aquí

Empujo totalmente el portón y camino tranquilamente a lo largo del sendero. Mis ojos pasan de la gran piscina a la inmensa mansión que hay justo detrás.

(¡Sabía que era una mansión! ¡Que ojo tienes, Jessica!)

En estos momentos, me pregunto si no me habré equivocado de dirección. ¡Si es el caso, lo sabré enseguida!
Mientras sigo caminando, mi mirada se detiene a un lado del sendero en donde hay un magnífico carro.
Sin pensármelo dos veces, me acerco a él, admirativa. No hay nadie por aquí, así que aprovecho.

—¿¿¿???: "¿Puedo ayudarte?"

La voz grave y tranquila me asusta un poco. Me giro de golpe para saber de quién se trata.
¿qué le voy a contar a este tipo que me ha visto ir hacia el carro?
Ya me estoy imaginando liándole la cabeza con todas las tonterías que voy a soltarle.

Cuándo estoy frente al desconocido, me quedo atrapada en la trampa de dos ojos color gris azulado absolutamente magníficos.

—¿¿¿???: "¿Puedo ayudarte?"

Pestañeo, pasmada. Imaginaba que algo así debía existir, pero nunca había visto tal mestizaje. Estoy claramente bajo el encanto de esa mirada, y me cuesta un mundo apartar la vista.

—Jessica: "Yo... Sí. Esto, ¡no!"

El desconocido de mirada azul plata me mira de arriba abajo antes de sonreír. Yo doy un paso atrás mientras le observo.

¡Tengo ante mi un tipo buenísimo! De esos que uno solo ve en los clips de rap y ya está.
¡Alto, moreno, de tipo afroamericano y musculoso que no veas! Su cara presenta una ligera perilla cuidada que rodea una boca muy sensual.

Le echo el ojo y sigo mirándole sin miramientos. Lleva puesta una chaqueta de chandal con dibujos que insinúa su perfecta musculatura. Su cuello está decorado con cadenas de oro incrustados de diamantes. Pero, claramente, ¡lo que más me gusta son sus ojos y sus labios!

—¿¿¿???: "parece que te ha comido la lengua el gato."

¿Qué? ¿Ya empezamos? Muy bien. Pensaba ser amable y educada. Pero yo me adapto.

—Jessica; "¡Mientras no me coma el tarro, todo bien!"

Mi respuesta le hace sonreír. Entreveo unos dientes más bien... ¡resplandecientes! ¿¡No me digas que se ha puesto un diente de oro!?

(¡¡Lil Jon ha salido esta noche!!)

—¿¿¿??: "Bueno, y ya hablando en serio... ¿quien eres y que coño estás haciendo aquí?"

La expresión de su rostro se ha vuelto más seria y me fijo enseguida en una cicatriz en su ceja.

—Jessica: "Vengo a ver a Jefnier. ¿Está aquí?"

Se me queda mirando un momento de pies a cabeza antes de ponerse a jugar con las cadenas que lleva colgadas al cuello. Tras unos minutos, su cara bonita se relaja y por fin se digna a abrir la boca.

—¿¿¿???: "¿cuál es tu nombrecito? ¿Miss "Me-he-quedado-sin-lengua"?

Pestañeo y hago una mueca para dejar las cosas claras. No soy de esas chicas a las que uno puede ponerse a ligar de cualquier manera.

—Jessica: "¡Yo no tengo un nombrecito, Mister T! Y además, ¿quien eres tú?"

Levanta una ceja, sorprendido, luego explota de risa dando palmas. Me pregunto si no se estará riendo un poco de mí en mis narices.

—¿¿¿???: "¡Eres una graciosilla, tú! ¡Nunca me habían dicho esto! Yo soy joe, el amigo de Jefnier."

—Jessica: "¡Me alegro de que te haga gracia!"

Me siento un poco más tranquila ahora. Por lo menos no me he equivocado de dirección. Sólo tengo que esperar a qué Jeimax se deje caer.

—Joe: "ahora que ya sabes cómo me llamo y quien soy, me gustaría Sab..."

—Jessica: "¡Jessica! Soy una amiga de Jefnier y de Jeimax."

—Joe: "pues ya está! No era tan difícil... ¿ves? Cuando quieres... ¡venga, sígueme, vente conmigo!

Pienso una décima de segundo. ¿Acaso no debería esperar a que llegara jeimax?
¡Al mismo tiempo, lo cortés no quita lo valiente! sólo tenía que haber llegado antes!

—Jessica: "¡venga! ¡te sigo!"

Joe camina con determinación atravesando la piscina hasta llegar a la mansión. En cuanto a mí, me quedo sorprendida por lo que veo. ¡La mansión debe tener al menos 10 habitaciones, si no son más!
La piscina es magnífica. Es lo suficientemente grande como para albergar a todo un grupo de fiesteros...

(¡Aquí huele a mucho dinero! Finalmente, Jefnier tal vez pueda ayudarme...)

De acuerdo, evidentemente está forrado, ¡no todo el mundo puede llevar este tren de vida! ¿Y que más? No es por eso que voy a dejarme impresionar.

Cuando Joe abre la puerta, oigo una música escapándose de adentro. ¡Ya está! ¡Aquí estoy! Saco pecho y levanto la cabeza, orgullosa como un pavo real.

¡Esta vez, de una u otra manera, estoy totalmente decidida a encontrar una manera de solucionar el problema de Jason! Es ahora o nunca.

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Nuevo personaje;

Joe