𝕻𝖊𝖑𝖎𝖌𝖗𝖔 (lunay-Jefnier Osorio )

Cap 2

Me ha tomado desprevenida. Me quedo sonriendo como una boba mientras le veo desaparecer en la esquina de la calle. No sé muy bien qué pensar. No me gusta mucho ese aspecto seductor-depredador. Y ese lado machista incapaz de imaginar que a mí me puedan gustar los coches sin que sea la pasión de mi chico.

¡tendría que haberle cerrado el pico una vez más! ¡cuando le cuente esto a Jason no me va a creer!

Me pongo en marcha hacia el trabajo sin perder más tiempo. Ya voy tarde y mi manager odia eso. Trabajo en tanner corporation. Es una empresa joven y dinámica, fundada por un misterioso y joven heredero del mismo nombre. Le vi una vez en una fiesta organizada por la empresa, y su carisma me había trastornado totalmente. Como a más o menos todas las tipas que estaban allí aquella noche.

Tengo suerte, trabajo en un edificio inmenso en pleno centro y en el departamento que mejor me corresponde: el de comunicación.
Gabriel simons, mi manager, es competente y exigente. Yo respeto eso, a pesar de qué me impongo mucha presión.
Rubio con una mirada azul penetrante. Cuando me mira siempre me pregunto con que me va a salir. No me impresiona ese tipo de tipos. Yo crecí rodeada de hombres, nunca me he dejado pisar por la testosterona. Pero, afortunadamente, tengo a jeimax.

Es mi colega en el servicio de comunicación. Un chico moreno y muy simpático, con un sentido del humor fuera de serie. Me encanta trabajar a su lado. ¡menos mal que está ahí!
Los días se me hacen menos pesados gracias a él. Aunque, por lo general son más bien agradables y están llenos de buen humor. Mientras estoy pensando en el cómico de mi colega, se pone a sonar mi celular. Pego un suspiro y me paro de nuevo para intentar encontrarlo en medio del caos que hay en mi bolso.

¡es un milagro que lo encuentre en la primera! Me doy prisa en descolgar antes de que deje de sonar.
¡un día voy a vaciar este bolso! ¡ya no aguanto más!

—Jessica: "¿diga?"

—¿¿¿???: "¿señorita travejo?

—Jessica: "¡yo misma!"

No sé por qué, pero tengo como un mal presentimiento. No me gusta cuando me llama un número desconocido y me piden que confirme cómo me llamo.

—¿¿¿???: "Señorita travejo, hospital Bellevue. Le llamo desde el servicio de urgencias."

Mi corazón se pone a dar golpes en mi pecho. La primera persona en la que pienso es Jason.

—Jessica: "¡oh, Dios mío! ¡¿Que pasa?!"

—¿¿¿???: "¿El señor Jason travejo es su hermano?"

Una fuerte descarga me recorre el espinazo. Jason...¡¿qué ha hecho esta vez?!

—Jessica: "¡es mi hermano! ¡Por Dios, dígame que está bien!"

—¿¿¿???: "acabamos de ingresarle, presenta múltiples heridas y está inconsciente. Hemos encontrado su número en su teléfono.

—Jessica: "¡¿Cómo que inconsciente?!"

(¡oh no! Otra vez no... ¿Qué le ha pasado esta vez?)

—¿¿¿???: "¿usted podría venir? Tiene que rellenar algunos documentos y a los médicos le gustaría hacerle unas preguntas."

Le echo un vistazo rápidamente al reloj. Bueno... Ya no hay remedio, ¡voy a llegar tarde! y llegaré más tarde aun si me paso por el hospital.
¡Que se le va a hacer! Gabriel lo entenderá. ¡Hay prioridades, y mi hermanito es una de ellas!

En fin... Espero que lo entienda. ¡Y si no lo entiende, da lo mismo!

—Jessica: "llegó enseguida!"