Capitulo •13

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Andrea
《Madre》

Días después...

Bajé mi vestido hasta mis muslos, di un último vistazo de mi reflejo en el espejo y me sentí... bien al ver mi imagen.

- No quiero casarme, Annie.- Dijo Vicente, sentado en la cama.

- ¿Y crees que yo si? Aún me duele haberme divorciado de Samuel. Pero sabes que es eso, o cargaremos con la muerte de todos y cada uno de los Salvatorre.

- Juro que si pudiera matarlo...- Lo miré por el espejo y él bajó la cabeza - Estoy casando de seguir sus órdenes.

- Pronto acabará, solo necesito saber cuando actuar.

- ¿Te sigue doliendo el cuello?

- No, ya está mejor.

- Ese tipo es un animal.- Comentó molesto.

- Debo irme.

- ¿Segura que no quieres que te acompañe?

- No, V. Prefiero hacer esto sola, además, él dijo que vaya sola. Para que ellos no sospechen nada.

- Cuídate, pequeña.

- Lo haré.

Volví a mirarlo por el espejo y este me entregó una sonrisa genuina.

Tomé mi bolso y salí de la casa en mi camioneta.

Llegué a la discoteca y vi un anuncio que decía: "Noche de baila con un desconocido"

¿Qué clase de tontería es esa?

- Vamos, entra.- Animó Victoria, luego de darme una nalgada.

La seguí mientras reía, Raphael negaba divertido y Samuel solo entró apagando su cigarro y sacándose la chaqueta, Julie se aferró a su brazo pero Samuel no reaccionó.

****

- ¡Atención!- Gritó el DJ, tomamos nuestros tragos y nos giramos a mirarlo - ¡Ya saben las reglas, pero vamos a repetirlo para los nuevos!

- ¡Las luces se apagarán en ciertos momentos, deben bailar con quien esté frente a ustedes y pareja que nosotros veamos sin bailar, perderán y no tendrán barra libre! - Continuó su ayudante.

- ¡Al igual que las personas que se queden sin pareja!- Le siguió el DJ.

- ¡Todos a la pista de baile!

- ¡Vamos!- Gritó Julie, tirando de Samuel.

Me quedé sentada en un pequeño sofá junto a la barra.

- Todos participan, ¿Si sabes?- Habló el barman.

Lo miré y este mantenía una sonrisa ladina mientras preparaba varios tragos sin despegar su mirada de mi.

- No tengo ganas de bailar.

- ¿Entonces por que viniste? Nadie viene y se queda sentado.

- Vine con amigos - Respondí -, es una especie de "despedida de soltera"

- Así que... te casarás. ¿Puedo saber quien es el afortunado?

- Ni tan afortunado.- Susurré

- ¿Un trago para motivarte?- Preguntó extendiendo un pequeño vaso con un líquido azul hacia mi.

- ¡Venga, Andrea!- Me gritó Raphael.

- ¿Entonces?- Insistió el barman.

- Que sea lo que la noche quiera.

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