Capítulo 6

346 32 1
                                    


Hola gente, felices día de reyes, espero que algunos aun disfruten de sus vacaciones, y para los que ya entraron *se encoge de hombros* que se le puede hacer.

Disfruten del capítulo :D

==============================================

Gran avance y una... ¿cofesión?

==============================================


Desde el momento en que Lincoln logró captar esa energía (Chakra), se sentía como si se alimentara, ciertamente era una sensación extraña, pero era mejor que nada para encontrar su 'punto'.


Así estuvo durante dos semanas meditando en su pasaje mental, aún teniendo esa sensación de estar comiendo, pero ya se había acostumbrado a ello, así que le restó importancia.


Y luego llegó el momento.


Era viernes por la tarde y Lincoln se encontraba haciendo su tarea de matemáticas y de lenguaje hasta que fue interrumpido.


Bien, Lincoln, creo que ya es momento de hacer la prueba real sobre los clones. —Habló César.


¿Hablas en serio? ¿Cuándo comenzamos? —Preguntó con emoción el albino, que rápidamente dejó de lado sus deberes escolares.


Tranquilo, cachorro, será en la noche, en tu hora de dormir, y te aconsejo que termines con tu tarea para tener todo el fin de semana libre para enfocarnos en eso; si no, olvídate de todo lo que dije. —Finalizó de manera solemne como amenaza.


En el momento de escuchar esas palabras, Lincoln retomó de inmediato su tarea; menos mal que ya le quedaba casi nada.


Durante las veces que ha estado entrenando seriamente, fue solamente entre sus horas de sueño, cosa que le extrañaba al chico de cabellos blancos, dado que las veces que comenzó su "entrenamiento" desde aprender sobre los sellos, no ha tenido ni un problema con dormir. En su momento, su curiosidad infantil le picó en una de sus sesiones de entrenamiento en la escritura de sellos, así que se lo preguntó directamente a Alejandro.


¿Por qué no te sientes con sueño después de las prácticas? —Le pregunto al guardián menor, recordando lo que le dijo César.


"Cierto... como odio esos tipos de explicaciones", con esos pensamientos, se encogió de hombros Alex ante el niño, dándole más preguntas que respuestas. Así que simplemente el albino lo dejó como algo 'misterioso' asociado a sus poderes.


Cayó la noche, y con ello llegó el momento que esperaba el varón de los hermanos Loud. Justo cuando se iba a acostar, César le habló de nuevo.


Sabes, cachorro, para asegurar, ¿por qué no pones esos sellos de silencio en las cuatro paredes y en el piso? —Preguntó en forma de sugerencia el guardián mayor.

Un inicio diferenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora