💋Capítulo 27💋

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Se acercaba el final de clases, y por lo tanto, la graduación.

Como todos los años, el Instituto hacía en el último mes de clases una serie de competencias cada semana, podía participar cualquier estudiante que quisiera en las amplias opciones que habían.

Se realizaban tres competencias por semana, y siempre iban de la siguiente manera:

Básquetbol, baile y teatro.

Tenis, natación y arte.

Taekwondo, ajedrez y cocina.

Y por último, era béisbol, fútbol y un concurso de belleza.

YunHo participó en las actividades de básquetbol como siempre, ganando igualmente como jugador más valioso.

JongHo no le gustaba mucho el tema de los clubs, sino más la organización, por lo que estuvo en el grupo que llevaba toda la organización de los eventos.

Y luego estaban MinGi y San, quienes todavía no estaban seguros de querer participar.

Nunca antes lo habían hecho, pero JongHo no paraba de insistir.

—¡Lo harán estupendo! Si son los mejores que he visto en lo que hacen.

—No creo que sea buena idea — San jugó con sus dedos.

—No quiero hacerlo — Resumió el más alto.

—¡Será genial, se los prometo! Por favor~.

Luego de mucha insistencia de parte de JongHo - y un poquito de YunHo -, lograron convencer a San y MinGi de participar.

La tercera semana llegó, dando inicio el día lunes con la primera ronda de cada categoría.

San estaba nervioso, tendría su primer combate en la institución, de paso que nadie de ahí sabía que él practicaba taekwondo, lo que le daba aún más vergüenza.

Jugaba con las tiras de su cinturón negro cuando MinGi llegó a su lado, venía bebiendo una lata de jugo de limón, de la cual le ofreció pero San se negó.

—Tienes que beber algo, el jugo de limón es bueno.

—Tengo la garganta apretada — Miró a su alrededor y bajó la cabeza —, todos me observan, Min, me están juzgando con la mirada y se ríen.

—Que te importe un carajo eso — Rodó los ojos —, no comes de sus opiniones. Tú eres increíble en lo que haces y no necesitas la aprobación de nadie aparte de ti mismo.

—Estoy nervioso.

—No dudes de lo que sabes, nosotros creemos en ti y en tu potencial, no te dejes intimidar por alfas idiotas.

Porque sí, San era el único omega que se había apuntado al Campeonato de Taekwondo.

San había combatido docenas y docenas de veces con alfas, pero la diferencia era que ahora lo haría en el Instituto, cosa que le ponía nervioso.

—Toma.

—No quier-

—Que bebas, San.

Ante la mirada severa de MinGi, San rodó los ojos pero acató lo que le decía el alfa, tomando la lata para darle un buen sorbo. Para su sorpresa, el líquido sí bajó por el nudo de la garganta, lo que le hizo sentirse mejor del estómago.

—Tómala toda si quieres, luego compro otra.

—No puedo beberla toda, podría vomitarla en pleno combate.

—Desayunaste lo justo esta mañana, así que si no te bebes al menos la mitad de esa lata, seré yo el que te patee.

San rodó de nuevo los ojos y bebió lo que quedaba entre sorbos, sintiéndose más tranquilo, tanto así que se permitió sentarse en el banquillo frente al escenario donde subiría a pelear en unos minutos.

—Lo harás bien, Sanshine.

A San de inmediato le brillaron los ojos ante tal apodo y miró al más alto, quien le sonreía con gentileza.

—Song, no puedes estar aquí, vamos a dar inicio en unos minutos — Apareció un estudiante de los que estaban encargados del evento.

—Sí, sí, ya me iba — Se dio media vuelta —, y, San — Giró el rostro —, patealo tan fuerte que se acuerde de cuando nació — Sonrió juguetonamente.

San rió y asintió, viendo la espalda de su mejor amigo mientras se iba en dirección a las gradas, donde YunHo estaba sentado en el segundo nivel de estas usando el teléfono.

Con mayor confianza que antes, San subió al escenario cuando se le fue llamado.

Pelearía contra otro de último año, el tipo era de la altura de YunHo y corpulento, la diversión se veía en su mirada, seguramente creyendo que como San era un omega y era más pequeño y flaco que él sería una victoria segura.

¡Ja! Pues eso estaba por verse.

San no se dejaría ganar.

Y tal y como MinGi le dijo, confió en sí mismo y sus capacidades, siendo el resultado satisfactorio para él, pues ganó.

Así fue pasando toda la semana, MinGi le daba ánimos antes de subir a pelear, lo que hacía que San se motivara mucho más para ganar las peleas.

Todo iba bien, San quedó para la final junto con otro tipo que también era del último año, un alfa que apenas le sacaba unos dos dedos de altura y tenían una estructura física ligeramente similar.

Pero había algo mal ese día.

MinGi no aparecía.

No tenía su teléfono consigo porque cuando usaba su traje claramente era porque entrenaría o pelearía, por lo que dejaba el teléfono en otro lugar seguro para que no le pasara nada.

Tampoco podía moverse de donde estaba ya que la final comenzaría en unos minutos, así que no podía ir a buscar a MinGi, y YunHo estaba distraído con el teléfono, seguramente hablando con JongHo.

Comenzaba a sentirse inquieto, incluso triste, ¿MinGi no vendría a darle ánimos para la final? ¿Qué estaba pasando que el alfa no aparecía?

MinGi no le haría esto, algo tenía que estar pasando.

Decidido en dejar atrás la estúpida competencia para ir en busca de su mejor amigo, se levantó del banquillo con una expresión de seriedad.

—¡Wow, Choi San! ¿A dónde vas? — Escuchó detrás suyo.

¿Cómo? ¿Esa voz no era de... WooYoung?

Kiss Kiss~ Extended Version (MinSan) ATEEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora