Kiss Kiss~ Extended Version (MinSan) ATEEZ

💋Capítulo 17💋

—¿Qué diablos te pasa? Estoy todo sudado y... ¡Choi San!

MinGi se quejó al tener a su mejor amigo pegado a él, frotando su rostro contra su cuello como si fuera un omega buscando llenarse del aroma de su alfa.

Y eso no estaba bien.

—Tengo miedo — Murmuró.

—¿Sucede algo? ¿Te hicieron algo?

MinGi cambió completamente de actitud al oler que era cierto, San olía a temor y preocupación, cosa que le hacía alertarse.

No era la primera vez que San venía a uno de sus entrenamientos, de hecho todos ahí lo conocían, pero no quitaba el hecho de que la gran mayoría del equipo de béisbol eran alfas, alfas que si bien le tenían aprecio a San, seguían teniendo instintos y podían hacerle algo a un omega sin marca.

—San, ¿quién te hizo algo? Dime en este momento.

—Abrázame... Tengo miedo — Ocultó su rostro en el pecho de MinGi.

Arrulló en sus brazos al omega, acariciando su cabello mientras pasaba su pulgar derecho por la espalda de San varias veces, acabando por bajar hasta los bordes de la colorida camisa del omega, metiendo su mano debajo de esta para dar suaves caricias a uno de los huesos de la cadera de San.

Su madre y padre le habían enseñado cómo arrullar a un omega asustado que necesitaba de un alfa, ya que era algo que todo buen alfa debía saber.

Por ello conocía los diferentes puntos en el cuerpo de un omega que servían para poder calmarlos, entre esos, el cuello y el hueso de la cadera.

Habían más, pero MinGi pensaba que esos ya eran demasiado íntimos.

San fue bajando su olor a pánico poco a poco, ronroneando pacífico contra su pecho.

—Eso es, ¿ya vas a decirme qué pasó?

—YunHo y JongHo se habían ido a comprar los churros allá afuera... me quedé en el estacionamiento porque pensé que no tardarían mucho y... Se acercó un alfa — Apretó sus brazos alrededor de MinGi.

—¿Es alguien de aquí? — San negó.

—No sé quién era, nunca lo había visto, pero apestaba a celo y yo... Estaba tan asustado... No había nadie más cerca...

—¿Te tocó?

—No, lo pateé en el pene y corrí, tengo fuerza como para entrar en combate, pero era un alfa robusto y yo...

—Ya, Sannie, estás bien ahora, no voy a dejar que te hagan daño.

No pensaba soltar a San, pese a que ya no olía a temor, sentía que debía tenerlo cerca, maldiciendo dentro de su mente a ese alfa que se había atrevido a acercarse a San con claras intenciones de cogérselo.

Aún cuando su entrenamiento debía proseguir, MinGi se negaba a soltar a San, no fue hasta que YunHo y JongHo llegaron que lo comenzó a soltar, aún teniendo algo de desconfianza.

—Lo siento — YunHo bajó la cabeza avergonzado —, fue mi culpa, no debí dejarlo solo.

—Sí, no debiste — Afiló la mirada —. ¿Y si alguien le hacía daño? ¿Cómo crees que hubiera acabado esto?

—Pues, fácilmente podrías morderlo, eso espanta a los alfas — JongHo se encogió de hombros.

—MinGi no es mi alfa — San inmediatamente miró mal al otro omega.

—Es mi mejor amigo, no mi omega, me preocupa su bienestar. No vuelvas a decir eso.

—JongHo no lo sabía, no le hables así — YunHo arrugó el entrecejo.

—Song MinGi, entrenamiento, ¿recuerdas? — El entrenador lo veía impaciente.

Sin embargo, MinGi no lo escuchó.

El alfa de olor a menta gruñó, haciendo que YunHo le devolviera el gruñido.

A ningún alfa le gustaba ser sometido por otro, por lo que establecían su autoridad con otros alfas, lo que casi siempre acababa mal.

—Dejen de gruñirse como niños — San se puso de puntillas —. Estoy bien, Min, iré con YunYun y Jonggie a las gradas, te estaremos alentando desde allá — Dejó un besito sobre la nariz del alfa.

Eso había costado demasiado, a San le dolían las puntas de los pies por el esfuerzo de pararse sobre estos para llegar a la altura de la nariz de MinGi y poder dejar un beso ahí, incluso tuvo que apoyarse en los hombros del alfa para mantener el equilibrio, pero funcionó su objetivo de mantener tranquilo al alfa, pues su tensión comenzó a bajar.

Pasaron los días, YunHo estaba tratando de ayudar a JongHo, MinGi y San con el tema de sus lobos.

Sin embargo, no habían muchos avances.

—Es algo difícil — YunHo suspiró —, no se logra de un día a otro. Yo tardé años.

Mientras, los tres chicos exhalaron con fuerza.

Estaban parados con las manos sobre bloques de cemento, en un bosque con nada más que altos árboles, pasto y animales silvestres rodeándolos.

Según YunHo, rodearse de la naturaleza era un factor importante para estos entrenamientos, por eso los llevaba a un bosque a hacer los ejercicios físicos y mentales para sus lobos.

—Ya pueden bajar — Se sentó en el suelo —. Tenemos que ir con calma, sus lobos comenzarán a manifestarse poco a poco, ¿no ven a San? Su lobo ya le dio su primer mensaje.

—Supongo que como se conocen desde cachorros, el lobo de San debe tenerle cariño a MinGi, ¿no? — JongHo ladeó su cabecita.

—Síp — San asintió —, Minnie siempre se ha portado bien conmigo, mi lobo y yo estamos muy agradecidos con él.

—Prácticamente somos como hermanos — MinGi tomó asiento —, aunque me sorprende un poco que su primer mensaje haya sido conmigo y no con WooYoung.

—Porque te queremos — San se sentó a su lado —, ¡eres como nuestro hermano mayor, Minnie!

JongHo miró a YunHo, quien le hizo una seña colocando su dedo índice en su labio, indicándole con ese gesto que mejor no dijera nada.

A él también le parecían extrañas las cosas que sucedían entre MinGi y San, y entendía a la perfección por qué la gente los confundía con una pareja.

Porque realmente lo parecían.