permiso

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Raiden estaba con su comadre del alma, Thrud.

Estaban discutiendo sobre cómo debería ser el cortejo, Thrud propuso una cena en la casa y Raiden, bueno, el quería aplicar todo lo que aprendió en el Kamasutra.

-YA, ¿¡PERO PORQUE NO PUEDO APLICARLO?!

-PORQUE SERÍA MUY PRONTO, PENDEJO, ¿¡ERES ESTÚPIDO O TE PARIÓ UN TELETUBI?!

Y Raiden se quedó calladito, enojar a Thrud no es algo lindo, bueno, en teoría si, por las caritas que hace, pero en la actitud, ni Satanás se le compara.

-Bueno, te voy a hacer caso, pero hay un problema..

-Con que pendeja pendejada me vas a salir ahora?

-Yo no vivo solo

-A

-...

-...

-Pides permiso, fácil y si dicen que no vas a un restaurante, yo te presto platita y te recomiendo lugares.

-No sabes cuánto te quiero...

-Si, si, si, los restaurantes son caros, si te presto me la devuelves con intereses y rápido.

-Retiro lo dicho, cobradora

-Llora pues.

Y Raiden miro feo a la Valkyria.

-Nada que ver, pero aprendí varias palabras en tres segundos.

-Si me vas decir groserías me voy.

-Mierda

Susurro

-Bueno tu anda para abajo y le pides permiso a Adán o a Eva.

-Y si uno dice que si y el otro no?

-Dices “acaso papá o mamá es tu jefe o jefa?"

-Mejor le digo a los dos de una vez y listo.

Y Raiden sin miedo al éxito fue donde su mami Eva.

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-Mamita linda, bella, hermosa, preciosa, que te amo tanto.

La madre de la humanidad suspiro y contesto.

-Nomas digo que no presto plata.

-Bueno, no voy a pedir plata...

-Entonces, ¿Que pasa?

-Ya te conté sobre-

-Que si te gusta el Dios Shiva? Si, la otra vez te Vi dando saltitos y cuando ví ese libro, reconocí al autor.

-Bueno, sabes que estoy cortejandolo y quería pedirte-

-Permiso para invitarlo a cenar? Claro.

-Como sabes?

-Tu y Thrud no hablan precisamente bajito.

-Y una cosa más ¿Cómo conoces a Kamadeva?

-Trato de ayudar a Adán cuando me estaba cortejando

-Oh, eso lo explica todo. Ahora voy a pedirle permiso a papá Adán.

Y con eso dejo a su madre, no sin antes agacharse y darle un beso en la mejilla.

Y llegó el momento de preguntarle al padre de la humanidad, quien estaba leyendo tranquilamente.

Se dirigió hacia el y le pregunto, directo al grano, pero al mismo tiempo no.

-Papa, ya te conté que estoy interesado en Shiva y bueno, si te dijera que quiero invitarlo a cenar, ¿Dirías que si?

Adán se la pensó.

-Bueno, igual lo harías con o sin mi permiso.

-Osea que si?!

-Si

Y Raiden hizo un rato bailecito de Victoria, esto si que era un logró y de paso se lo decía Thrud, quien ya estaba aburrida de esperar a Raiden y se quedó dormida.

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