Cuando te encontré...

Capítulo 5. ¿Sin miedo?

Carlos' POV:

Me encontraba trabajando en la fábrica revisando algunos detalles con los ingenieros cuando Marian me dijo que estaban pasando cosas en su familia y se sentía algo triste.

– Ahora vuelvo – le dije al equipo. No dudé ni 2 segundos para llamarla, quería que notara que no importara la distancia, estaba al pendiente de ella.

La plática era amena como siempre, no podía dejar de pensar en lo bella que se veía sin importar que no estuviera arreglada, su belleza era natural y eso era algo que no veía muy a menudo en mi círculo.

En un segundo me entró un sentimiento de culpa, sentía que estaba engañando a esta chica mientras ella me compartía cosas personales, me sentía mal de no poder explicarle porque podía pasar horas sin contestarle y no es que no quisiera, es que estaba entrenando, en el simulador o simplemente haciendo otras cosas en Ferrari.

– ¿Todo bien? De repente te sentí raro, cómo si hubieras olvidado algo importante... ¿Cerraste bien la puerta de casa? – ella notó que algo más estaba en mi mente

– Si...es sólo que necesito decirte algo y realmente espero que nada cambie entre nosotros dos – no lo pensé más y abrí la boca. Al instante vi como su cara cambió de expresión.

– Me estás asustando – dijo con voz muy baja.

– Marian, yo...– escuché como la puerta del baño se abrió.

– ¿Carlos? ¿Estás aquí? – escuché la voz femenina de mi RP.

– Si, dame un momento – grité. – Marian, perdona, me tengo que ir, después te llamo – colgué sin voltear a verla realmente.

– ¿Qué hacías ahí encerrado? – rió Charlotte al verme salir del cubículo.

– Nada, sólo, ya sabes lo que se hace ahí dentro, ¿realmente quieres que te cuente?

– Que raro porque te escuché hablar y reír desde fuera – yo sólo me quedé callado.

– Vamos, puedes contarme. Desde hace días te noto diferente y no en un mal sentido, te noto más motivado a pesar de que no sueltas ese celular, antes podías olvidarlo en casa y no pasaba nada, ahora lo revisas cada que puedes, ¿qué, o mejor dicho, quién está pasando? – Charlotte se había convertido como en una madre para mí, estábamos todo el tiempo juntos y era imposible no conocernos a profundidad.

– No es nadie, es sólo una amiga que conocí en las vacaciones – le dije tratando de evitar el tema.

– ¿En México? – me miró bastante extrañada, sólo asentí con la cabeza – Bueno, parece que no tienes muchas ganas de hablar al respecto, sólo te pido que tengas cuidado, tú mismo sabes lo que es conocer a alguien que sólo te busca por la fama.

– Ya sé Lotte, pero con Marian es completamente distinto – me miró aún más extrañada.

– ¿Así que Marian, eh? Es un bonito nombre. Yo no soy nadie para decirte que hacer o con quien salir, sólo quiero que seas feliz y que no salgas lastimado otra vez... ahora andando, hay capsulas con Charles por grabar – dijo antes de salir por la puerta dejándome ahí solo recordando lo que había pasado hace unos años.

**Flashback**

Hace algunas temporadas conocí a una chica en el paddock, Valentina. Los detalles de como nos conocimos están de más, lo importante es lo que pasó después.

Valentina era una chica muy agradable y cálida, a todos lados a los que llegaba iluminaba su sonrisa. Al equipo le caía bien porque a pesar de estar todo el tiempo conmigo, no se entrometía o estorbaba en las actividades.

El día que todo sucedió era viernes de práctica libre en uno de los autódromos, lamentablemente el coche que estaba corriendo no funcionó de manera adecuada y me tuve que retirar a los 10 minutos de comenzar. Estaba muy frustrado y lo único que quería era ir al hospitality para después buscar a la chica con la que salía.

Después de cambiarme y darme unos segundos para desquitar mi furia contra la pera de box, salí a buscar a Vale. Pregunté al equipo si alguien la había visto y no obtenía respuesta, me comencé a preocupar porque tampoco respondía al celular. Busqué por todos lados donde podía tener acceso y nada. Estaba a punto de regresar cuando esuché unos murmullos.

– Shhh, nos van a escuchar – reconocía esa voz, ese acento tan peculiar.

– Nadie nos va a escuchar, todos los equipos están concentrados en las prácticas – fue ahí donde sentí un pinchazo en el estómago. Me acerqué al lugar de donde provenían los sonidos y los encontré en la peor situación posible.

– ¿Qué mierda te pasa cabrón? – empujé a de Daniel Ricciardo contra la pared.

– ¿Carlos? ¿Qué haces aquí? Tú deberías de estar corriendo – dijo la chica limpiándose el labial corrido.

– Y tú no deberías de estarte besando con este idiota – me acerqué a él – ¿no te basta con quererme quitar el asiento? Ahora quieres quitarme también a la novia, ¿tanto me admiras, cabrón? – él sólo reía.

– Mi querido Chili, si supieras que ella fue quien me buscó no estarías así y te recuerdo que tu contrato en McClaren ya no tarda en terminar – lo solté. Miré a Valentina y ella no podía ni verme a los ojos.

– ¿Saben qué? Creo que hacen una pareja perfecta, son tal para cual – reí.

– Carlos, yo...– me tomó la chica del brazo.

– Tú te puedes ir a la mierda – dije y me fui del lugar.

Me sentía demasiado enojado pero esto no se iba a quedar así, en la pista se arreglarían las cosas.

**Fin del flashback***

Decidí olvidar ese pensamiento y enfocarme en mi trabajo.

Marian's POV

– Me estás asustando – dije tratando de hacerme chiquita.

– Marian, yo...–

– ¿Carlos? ¿Estás aquí? – una voz de mujer.

– Si, dame un momento – gritó algo espantado – Marian, perdona, me tengo que ir, después te llamo – colgó sin decirme más. No quería tomarle mucha importancia porque sabía que se encontraba en su oficina, o bueno, eso era lo que él me había dicho, no Marian, no es para que empieces a dudar de él, pensé.

Me quedé acostada viendo al techo y fue ahí donde llegó un pensamiento que me llenó los ojos de lágrimas. Ok, si él tenía algo que confesarme, que al parecer era algo importante que podría cambiar nuestra 'relación' y se puso muy nervioso cuando esa chica entró...¿Será que Carlos tiene a alguien más?