Color miel『En edición』

Capítulo 12

Haciendo las paces

Tanner.

Luego de que llega la ambulancia por Celeste que despertó, pero se ve fatal me llevo a Ivanna al auto llevándola a casa de ella, cuando llegamos me quedo esperando a que baje, pero no lo hace

—Tanner si sigues con esa perra te juro que la dejo peor — Suelta sin mirarme.

—Ivanna entiende que es mi amiga, que no superes lo de Dario no es culpa mía, todas no son iguales.

—¡Las malditas de Boston si! — Grita

—Joder, que tienen que ver las chicas de Boston en todo esto, pudo ser cualquier otra chica, de China, Colombia, España, cualquiera.

—Eso dices tú, pero no sabes nada de ella, ¿sabes qué? mejor me voy — Sale del auto dándole un portazo.

Piso el acelerador saliendo del lugar, estoy tan enojado y preocupado a la vez que no se que hacer, le envió un mensaje a Christian preguntándole por Celeste, me comunica que la están revisando.

Regreso a mi casa con el enojo aún, mamá me habla pero no le prestó atención solo subo las escaleras y me encierro en mi habitación a escuchar música mientras veo aquella pequeña foto que tengo en mi mesita de noche del día de la exposición con Celeste, si al menos la hubiese conocido antes nada de esto estuviera pasando y mientras quiero arreglar una cosa, Ivanna llega y arruina lo que he logrado, la estoy haciendo sufrir y eso es lo menos que quiero hacer.

Por la noche bajo a cenar con papá, mamá y Vivi, mientras cenamos mamá cuenta sus nuevos proyectos que tiene en mente, pero yo estoy en otro mundo pensado en el daño que le hice a Celeste está tarde.

—Tanner — Me habla mamá haciéndome reaccionar — ¿Estás bien? ¿Cómo te fue hoy?

—Bien mamá....¿Luego podemos hablar? — Pregunto viendola desde el otro lado de la mesa.

—Si cariño, cuando quieras — Vuelve su vista preocupada a mi padre.

Cuando terminamos cenar Vivi se va a su habitación y papá se va a la de mamá y él para darse un ducha, me siento con mamá en la sala y le cuento todo lo que sucedió.

—Tanner — Me toma de las manos — Eres el hombre más lindo que he visto y eso me alegra porque nos da la señal de que logramos educarte bien, no cualquiera haría lo que tú haces por Celeste, desde que llegó has querido arreglar todo, eso es bueno, pero entiende, está vez tú no hiciste nada solo querías estar con ella, Ivanna fue la culpable, las cosas que ella hace no te las puedes echar a tus hombros también, tú lo único que has hecho es arreglar las cosas de ella.

—Si mamá, lo sé, pero se que justo ahora Celeste me odia y yo no quiero eso, ella a estado conmigo desde la exposición, fue la primera que me rechazó, eso la hizo única y yo solo quiero ser alguien en quién pueda confiar.

—No mi amor — Toma mi rostro entre sus manos — Estoy segura de que ella no te odia, ella no es así, has logrado que ella se abra más con las personas, crees que tú apoyo no ha funcionado, mira, tiene amigos justo ahora, Christian, las chicas esas, te tiene a ti, ha logrado expresar un poco más de sus sentimientos, la he notado en todas mis citas, has hecho un cambió en ella.

—¿De verdad?

—Si, y eso te hace ser a ti un hombre el cuál debe ser venerado por lo caballero que es.

—Solo quiero que ella este bien — Bajo la cabeza con las manos en mi regazo.

—Lo estará, solo habla con ella, pero tú no tienes la culpa de lo que sucedió ahí.