5• ❂Complejo enigma

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Hoy por fin tendría mi primera salida a Hogsmeade, Lily la chica pelirroja del mismo curso de James y Sirius, se había ofrecido a darnos a Cristal y a mi un recorrido por el pueblo, nosotras gustosas aceptamos su oferta, después de todo y a pesar de que ya fue hace poco más de un mes, las cosas entre Sirius y yo seguían igual, lo que era muy doloroso, para mi, Sirius era la única verdadera familia que tengo y conozco desde niña fue el único que me hizo sentir verdaderamente querida además, ambos compartíamos el ser las ovejas negras de nuestras familias, sin Sirius nada de eso tenía sentido, y de haber sabido que esto pasaría por besarlo hubiese preferido mil veces correr por todo Hogwarts en ropa interior incluso hasta desnuda, todo con tal de estar igual que antes con él.

Para terminar de amolar todo Regulus estaba más frío que nunca, y sin ser suficiente, desde hace dos días que mi pobre corazón estaba completamente destrozado. Al fin sucedió lo que más me temía, contemple a mi amado Regulus con otra chica. Aun recuerdo cada detalle de ese trágico momento, tan vivido en mi memoria que se repite una y otra vez a asechando día y noche.

Esa tarde había decidido despejar mis pensamientos de todos los conflictos que acontecían, fui al lago negro y me senté en el tronco de mi árbol favorito, estaba perdida en mis pensamientos hasta que no muy lejos de mi, una pareja muy "cariñosa" se brindaban mutuamente grandes muestras de "afecto", yo con profundo asco y molesta porque habían perturbado mi paz, decidí irme, desafortunadamente tenía que pasar cerca de la pareja para entrar al castillo, pero entonces pasó, pude ver la cara del chico y justamente cuando lo hice, el se separo de la castaña, la cual note también era una Slytherin, que mo recordaba haberla visto alguna vez, mi mirada se encontró con la de Regulus, no se veían sorprendido, era como si el lo hubiese esperado, como sí deseara que presenciara semejante circo, lo único que pude hacer en ese momento fue tragar en seco y con un hilo de voz en él tono más neutro que pude les dije:

-Deberían buscarse un cuarto, estarán mas cómodos.

Con el corazón roto y lágrimas que amenazaban con salir me dirigí al castillo, el resto del día me la pase encerrada en mi habitación llorando como posesa, no baje al almuerzo ni tampoco a cenar, a pesar de todo Cristal me llevó comida, la cual ni siguiera toque, ella me había dicho que los chicos estaban preocupados por mi, pero estaba destrozada.

Al día siguiente me entere por la misma Cristal que la chica se llamaba Olivia Swan, hija de una familia de sangre pura y novia de mi amor platónico.

Y aquí estaba dos días después del trágico incidente fingiendo estar de lo más feliz y contenta para que mis amigas no se preocuparan.

Lily resultó ser una muy buena guía turística, habíamos ido a Honeydukes, Zonko's, y otras tiendas, a pesar de lo triste que estaba realmente me había divertido he incluso el dolor de mi corazón se apaciguó un poco, ya estábamos algo cansadas así que decidimos ir a las tres escobas a tomar unas cervezas de mantequilla, pero justo al entrar en una de las primeras mesas que se puede divisar estaba Sirius con James, Peter y Remus.
De inmediato mi mirada se encontró con la de Sirius, estaba a punto de salir de nuevo pero entre Cristal y Lily me tomaron de cada uno de mis brazos y me llevaron casi a rastras en dirección a la mesa de los chicos pude ver como Sirius también intento huir pero Remus y James no lo permitieron, a diferencia de mi él no opuso resistencia alguna.
-¿Que rayos están haciendo suéltenme?- dije casi gritando, algo molesta y avergonzada.
-Tienen que arreglar las cosas, los chicos y yo no los aguantamos más, menos con ese estado de eterna depresión que se traen tú y Sirius- me dijo una Cristal muy enfadada, un tanto resignada acepte pues lo extrañaba y también deseaba arreglar las cosas.
-Bien- empezó un James de lo más serio (cosa rara por cierto).

-En parte es mi culpa que las cosas entre ustedes estén tan tensas, así que les voy a dar un empujón, nosotros- dijo señalando a todos nuestros amigos menos a Sirius y a mi.
-Nos iremos y los dejaremos solos y sí para antes de tener que regresar a Hogwarts no han solucionado todo este embrollo, juro por mi madre que tomaremos medidas mas drásticas- esto último lo dijo golpeando su puño en la palma de su mano, dando a entender que recurriría a los golpes. Fue entonces cuando me atreví a mirar a Sirius y supe lo que pensaba.

El Hermoso TormentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora