SAKURA HAREM, MULTISAKU

🔹| DanteSaku |🔹

La ciudad está infestada por demonios, un grupo selecto de cazadores capaces de hacerles frente, pero como todo, nada es gratis, así que si buscas su ayuda no olvides tu billetera. 

Los demonios son capaces de disfrazarse como un humano cualquiera, ese es el gran problema que tienen que enfrentar día con día los cazadores, pero para los tres cazadores más fuertes no importa cuál truco usen, acaban hechos polvo, por eso muchos demonios, tratan de no cruzarse en su camino, en especial de uno, "Dante". 

—Señorita Lowes, ¿Está segura de esto? Este collar es un símbolo no sólo importante para usted, sino para el mundo demoníaco, entregármelo a mí, no es un tanto... 

—Confío en sus capacidades, además si está conmigo puede ser hurtado con mayor facilidad, hice una réplica eso servirá para distraer a ese demonio. 

—Aún pienso que dejarla sola, es un riesgo muy grande -suspiro. 

—Por favor, haga esto por mí, sólo anhelo que mi hija viva una vida tranquila, pero a causa de esta herencia no se puede, estaré feliz que alguien como usted la cuide —sonríe. 

—Si son los deseos de mi Señora, lo haré, pero quiero que se cuide y sobre todo siempre lleve consigo esto —le entrega una pulsera—. Con esto sabré si está en peligro y su localización —estrecha su mano—. No se preocupe por su hija, la cuidaré y si es necesario daré mi vida por ello. 

—Gracias, agradezco tu lealtad y cariño, debes irte, todo ha sido preparado —se despide. 

Tomo el taxi, antes de irme veo por última vez a mi Señora, a pesar de verse tan serena, se que está sufriendo, haré todo lo posible por unirlas de nuevo, no descansaré hasta que ambas estén juntas... 

—Me alegro que haya llegado, no imaginé que sería tan rápido, pero es un alivio. 

—Vamos hermana, el Orfanato necesita más ayuda, por eso me han mandado. 

—Por favor pase, le indicaré su habitación y después la presentaré con los niños. 

—Gracias, imagino que en estos tiempos hay muchas cosas que hacer. 

—Si, pero los niños son acomedidos y aplicados, no tendrá queja alguna. 

—Solo espero llevarme bien con todos, hermana. 

—Puede dejar sus cosas —señalando su habitación— llamaré a los niños al comedor, así que la espero en unos minutos —se retira. 

—Gracias, hermana. 

Coloco mis maletas sobre la cama, el cuarto es pequeño, pero cómodo, bajo para ver a los niños. 

—Niños, les presento a la Señorita Sakura Haruno, estará ayudando al Orfanato, así que espero que la traten bien. 

—¡Es muy linda, Sakura-san! 

—Gracias, es un gusto trabajar con la hermana Teresa, sobre todo el poder estar con todos ustedes —sonrió. 

—Así que llegó alguien más —entra una chica rubia. 

—¡Paty! Que son estas horas de llegar, pronto será la hora de comer. 

—Perdón hermana, es solo que nunca acabó de limpiar, Dante, es muy desordenado.