SAKURA HAREM, MULTISAKU

🔸| ItaSaku |🔸

—¡Sakura! —rodea su brazo en el cuello de su amiga— Me comentaron que hiciste una misión en solitario, ¿Eh? —la mira con un toque de diversión, ansía saber con lujo de detalle como le fue. 

—Si... No pasó nada interesante —sonreí nerviosa. 

—la mira detenidamente— ¿Es broma? 

—Enserio, que podría haber pasado... 

—Te conozco, desde hace días te noto extraña, bueno de por si eres rara.

—Ino —la mire enojada—, solo fue una misión de rango bajo, entregar un pergamino y listo, nada de acción. 

—¿Segura? Sé que me ocultas algo... ¡No me digas que te cruzaste con Sasuke-kun! —chilla la rubia de la emoción. 

—No, con él no —leve sonrojo. 

—sorprendida— Entonces quizá con algún buen partido ¡En hora buena que hayas dejado atrás a ese emo! —la mira curiosa. 

—Lo siento se me hace tarde para ir con, Shizune-san —camina más deprisa, pero su rubia amiga, la hace parar. 

—Debo saber que pasó, sino me lo dices tú, lo averiguaré de algún modo —entrando en su mente. 

FLASH BACK

—No creí que lloviera de repente, se veía tan bonito el día —suspiro resignada a esperar a que pase la lluvia para poder llegar a mi destino—. Debo de preparar una fogata -tiemblo por el frío. 

—Vaya, qué coincidencia encontrarnos aquí, Sakura —más al fondo de la cueva se escucha una voz profunda. 

—¿EH? —por la oscuridad de la cueva no veo nada, pero su voz se me hace conocida, pero de quién— ¿Quién eres, muéstrate? —dije mientras saco un kunai. 

—de un parpadeo ya está justo en frente de la pelirrosa— No me recuerdas —se acerca un poco más a la chica y sujeta su mano donde tiene el kunai. 

—Itachi Uchiha... —mi voz salió como un susurro, traté de dispersar la ilusión, por si es un genjutsu, pero no funcionó, él sigue en frente de mí, con esa mirada tan profunda. 

—No soy una ilusión, tu cabello ha crecido mucho desde la última vez que te vi —la toma del mentón. 

—trato de separarme, su toque me hace sentir incómoda o tal vez es su mirada la que me estremece— ¿Qué haces aquí? 

—Bueno, lo mismo que tú —se alejó de ella y se sentó en el mismo lugar que estaba—. No te haré nada tranquila —sonríe divertido. 

Me enoja su actitud tan arrogante, pero la lluvia no cesa, tendría que compartir por un rato la cueva con él, me senté del otro lado, no quiero gastar energía en un combate, teniendo en cuenta que él no desea pelear, frotó un poco mis manos en mis piernas para entrar en calor, las gotas aún resbalan por mi rostro y el frío cada vez se siente más en mi cuerpo. 

Los segundos se están haciendo cada vez más eternos, para colmo la lluvia no cesa y las ráfagas de viento entran a la cueva. ¡Soy un ninja! Esto no debe detenerme, me decía una y otra vez en mi mente para calmar la impotencia que crece en mi interior. 

De pronto siento unos brazos que me atraen hacia él, colocandome sobre su regazo, me cubre con su capa, estoy confundida por su acción. 

—No me mires así, tengo frío también y el calor de ambos nos ayudará a mantener nuestra temperatura. 

—sonrojada— Gracias... —fue lo único que pude decir, mi mente había dejado de razonar desde el momento que me tomó en sus brazos.