-Nunca crei que me emparejaran con tantos personajes -exclama Sakura sorprendida
-¡Es que eres tan perfecta!
-Y debo decir que son todos tan hermosos, creo que me gustara este apartado -observando.
-Y no has visto ni la mitad, así que prepárate, po...
—Sasori, llegaremos tarde a la reunión —menciona su abuela desde la puerta, ya hace más de 10 minutos que está esperando a su nieto y este no ha salido.
—Ya voy abuelita, solo guarde algunas cosas —sale con prisa el joven de 12 años.
—Te vez demasiado alegre —expresa con cierta curiosidad su abuela, pues desde que fallecieron sus padres, no lo ha visto sonreír.
—Bueno, vamos a la Aldea de Konoha, espero encontrarme con alguien —sonríe.
La abuelita solo asiente y caminan rumbo a su destino, sabe que su nieto no es de los que se interesa por alguna persona muy fácilmente, solo esperaba que sea buena persona y no lastime a su pequeño.
Han pasado tres días que salieron de la Aldea de la Arena y llegarían a medio día a Konoha, Sasori fue a buscar algunas hierbas al bosque, al llegar a su destino la vio por segunda vez, estaba entrenado y parece que llevaba rato ahí, está en lo alto de un árbol, sabe que está mal espiarla, pero solo quiere contemplarla un momento mas, decide que debe regresar con su abuela antes que se moleste por su tardanza, pero la chica está punto de caer, así que con su velocidad y agilidad la atrapa en el aire.
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—¿Estas bien? —cuestiona el chico.
—Si, gracias por ayudarme —la chica esta nerviosa ante su cercanía, además le ha sorprendido la velocidad en la que llegó y la atrapó, se levanta con la ayuda de este, aunque lo puede hacer sola, decide no negarse ante la amabilidad del chico frente a ella.
—¿No te has lastimado? —insiste el pelirrojo.
—sonríe apenada— No, y es gracias a ti, pero nos conocemos de algún lado, no se porque pero tu rostro se me hace conocido —lo mire a los ojos, pues efectivamente se me hace conocido.
—él sonríe, y toma la mano de la chica— Nos conocimos hace mucho, espero me logres recordar como yo lo he hecho desde que te vi por primera vez —besa su mano y desaparece.
—¿EH? —su cara arde, no se esperaba la acción que hizo, pero la dejó más intrigada, ahora sabe que ambos se conocen, pero de donde, trata de hacer memoria y un recuerdo fugaz aparece en su mente y una sonrisa surca sus labios— Ya me acorde de ti...
—Oye, Sakura-chan, la abuela Tsunade, nos ha mandado llamar, debemos estar en la Torre Hokage en 10 minutos —llega su amigo y la ve— ¿Por qué estas roja?
—Por nada, iré a cambiarme, nos vemos en la Torre Hokage, Naruto —sonríe y se va con prisa.
—Que rara es, Sakura-chan —se rasca su cabeza y decide ir con su otro compañero de equipo.
Al entrar a la oficina de mi mentora, todos los chicos están ahí, en el centro esta él con una señora de avanzada edad y sin mas paso, al parecer estarían un tiempo en la Aldea para compartir conocimientos acerca de venenos y nosotros de antídotos y tal vez en un futuro no muy lejano si la cosas iban bien ambas aldeas por fin pactarían una alianza nueva.