Overlord: Lujuria

Parte 27

-Al final... fue una terrible idea-

Mientras tomaba un baño, Momonga lamentaba el acto que había organizado en E-Rantel. Un plan que fue benéfico y perjudicial a partes iguales.

Las mucamas del pabellón dorado estaban acostumbradas a guardar secretos. No era poco común que nobles o ricos mercantes llevaran ahí a sus amantes. Eran discretas, pero en esta ocasión no lo fueron, y en pocas horas toda la ciudad supo lo que había pasado entre Momon y Nabe, y entre EvilEye y el héroe que la rechazo.

Después de que EvilEye robara un beso al héroe oscuro, Nabe había "olvidado" silenciar una de las paredes de la habitación donde estaba, y en consecuencia, las rosas azules y las mucamas del pabellón dorado escucharon los gemidos de la princesa Nabe, aquella mujer de mirada fría y sumamente callada, fue convertida en mujer dentro de los muros de la habitación, gimiendo tan fuerte, apenas pudiendo respirar, y todavía pedía por más, insaciable.

Las sirvientas contaron como EvilEye, tan excitada que olvido ponerse su mascara, toco a la puerta del héroe oscuro para suplicarle a Momon que le hiciera lo mismo que a Nabe.

Y, cuando la puerta de la habitación fue abierta, las mucamas vieron a la princesa Nabe. Su cuerpo de diosa estaba empapado en sudor, de su entre pierna escurrían sus propios fluidos y los de su compañero, y su expresión demostraba que estaba tan ahogada en el placer que apenas y podía mantenerse consciente.

Aun así, a pesar de verse acabada la princesa suplicaba por más. Al ver en que estado se encontraba Nabe, las mucamas estaban apunto de seguir el ejemplo de EvilEye y pedir ellas mismas participar en lo que sea que haya convertido a una poderosa aventurera Adamantina, en nada mas que una perra en celo. Apenas el juguete de Momon.

Pero Momonga rechazo a EvilEye con cortesía, una tan fría y cortante cortesía, que la EvilEye se quedo ahí frente a la puerta, masturbándose hasta que por fin el hechizo de silencio fue lanzado y EvilEye ya no pudo escuchar mas lo que pasaba dentro de aquella habitación.

Después de eso la hechicera se quedo llorando en el suelo, y sus compañeras tuvieron que llevársela dentro de nuevo.

La historia, sin embargo, causo mas problemas de los que soluciono.

Esto hizo que los rumores sobre la sexualidad de Momon fueran aclarados, sí. Pero también hizo que muchos aventureros abandonaran la ciudad a la mañana siguiente.

Un 20% de los aventureros que aun quedaban en E-Rantel tras la conquista del rey hechicero, decidieron quedarse para apoyar a Momon. El otro 80% lo hizo debido a un fuerte enamoramiento hacia la princesa Nabe, y fueron estas ultimas personas las que quedaron destrozadas al saber que su héroe Momon usaba a su compañera como nada mas que un juguete para descargar su lujuria.

Esa noche, después de enterarse de que su diosa gemía como una perra al ser tomada por el héroe oscuro, los aventureros agotaron el licor de una buena cantidad de bares, y a la mañana siguiente, con el corazón roto, abandonaron la ciudad, jurando nunca volver a enamorarse de alguien tan fuera de su liga.

Momonga quería que aventureros vinieran a su ciudad, pero debido a su acto perdió a muchos de los que tenía. Eso afecto sus planes a futuro.

Y si solo eso no fuera suficiente... las mujeres se volvieron la otra parte del problema.

Por la forma en la que EvilEye fue rechazada, Momonga esperaba que los intentos de las mujeres para colarse en su cama fueran disminuyendo. Lamentablemente EvilEye había sido vista sin su mascara, y llevando una ropa muy ajustada y reveladora.

Las mujeres que aun tenían esperanza comenzaron a correr el rumor de que EvilEye habia sido rechazada debido a su cuerpo poco desarrollado. Y debido a las historias que se contaban, sobre como Nabe había sido ahogada en un placer que la dejo irreconocible, las mujeres de la ciudad comenzaron a sentir una envidia inenarrable. Todas querían experimentar lo mismo que la princesa, y ello causo mas problemas.