Seis de julio 2020
Lugar desconocido
— Lo siento, Chris, siento lo que he hecho —Jeongin se estaba disculpando otra vez sin poder dejar de llorar.— Ya te he dicho que no pasa nada —le dijo cogiéndole el rostro y acunandolo.
— Siento que he perdido la cabeza.
— Todo saldrá bien, ¿me oyes?
Jeongin no pudo resistirse a querer besar sus labios, pero un pensamiento le hizo quedarse a medio camino. Había besado a Minho y había comido carne humana, quizá eso Bangchan no lo aceptaba. Quizá lo veía como una aberración. Chris, sin embargo, se quedó confuso cuando Jeongin no terminó su acción, así que lo atrajo cogiéndole de la cintura para besarle como es debido.
— ¿Por qué no lo has hecho? —preguntó al separarse del beso, intentando regular su respiración.
— He besado a Minho y... —los ojos de Chan se llenaron de lágrimas. Sabía que no había sido por voluntad de Jeongin y eso le dolía como una puñalada— me odiarás por esto, lo sé —ni siquiera pudo terminar la frase antes de derrumbarse.
— No tenemos por qué hablar de esto, no todavía —besó su mejilla—. Primero, salgamos de aquí.
— Tenemos que sacar a Felix también.
— ¿Hay más? —Jeongin asintió.
— Cuatro o cinco, en muy malas condiciones.
— ¿Crees que sobrevivan a la escapada? —Yang le miró con ojos de cachorro, con tristeza, dudando de la capacidad de supervivencia de esos chicos— Entiendo.
Lo que dividía a una celda de otra eran los barrotes de hierro oxidado. Las celdas solo podían abrirse por fuera, sin necesidad de llaves o candados. Jeongin era lo suficientemente delgado como para pasar por en medio de los barrotes hacia la otra celda, la cual estaba abierta porque no había una presa en dicho lugar.
Salió y abrió la celda del inspector y, después, la de Felix. Le dedicó una mirada suplicante al mayor y un leve puchero.
— He sido una persona horrible con él. Le he hecho muchas cosas malas, tenemos que ayudarle.
Chan asintió— Está bien, lo sacaremos de aquí.
Bang se agachó a la altura de Felix, medio inconsciente y le tomó el pulso. Era leve y su respiración era anormal, pero seguía vivo. La gravedad de sus heridas era tan grande que se sorprendía que aún siguiera con vida.
— Felix, soy el inspector Bang —dió golpecitos en su rostro y este abrió un poco los ojos cuando el policía pasó uno de sus brazos por sus hombros—. Vamos a salir de este lugar, ¿si? Así que necesito que camines conmigo.
Lee asintió débilmente e hizo fuerza para ponerse en pie, aunque no lo habría logrado si Jeongin no se hubiera puesto en el lado contrario imitando la acción del mayor.
Así, los tres subieron poco a poco las escaleras del sótano intentando que la madera no chirriase.
Pudieron lograr su cometido, llegando arriba y abriendo la puerta lentamente. Esta hizo un ruido al estar las llantas oxidadas, pero esperaron unos segundos antes de avanzar por ese largo pasillo.
Felix gimió de dolor ya que el dolor en sus piernas era insoportable. Jeongin probablemente le hubiera roto algún que otro hueso.
— Ya casi estamos, aguanta —susurró Chan.
Al salir del pasillo, Jeongin señaló por donde tenían que ir para salir. Estaban cerca. Iban a lograrlo. Estaban a unos metros de la libertad, pero Chan sintió sus piernas flaquear cuando estas recibieron un golpe por detrás. Así, Felix perdió el equilibrio y cayó tras él.
Jeongin se giró ante el causante, Hyunjin lo miraba con odio.
— Sabía que lo ibas a arruinar todo. Lo supe desde el momento en el que te vi.
Jisung apareció a su lado. Jeongin retrocedió por inercia.
— ¿Qué pasa? ¿Nos tienes miedo ahora? Porque ayer estabas ladrando como una perra —vaciló el alto.
— ¿Es porque tu novio está aquí? —preguntó Jisung con ternura fingida, se acercó a Chan y agarró su cabello para levantarlo.
— ¡Suéltalo! —gritó Jeongin, el rostro empapado en lágrimas— Déjalo a él, me queréis hacer daño a mí.
Ambos se miraron y rieron en fuertes carcajadas. Chris apretaba la mandíbula pensando en el momento idóneo para atacar. Felix, por su parte, no podía moverse del suelo.
— Parece que no entiendes nada sobre el dolor —dijo Jisung.
— Si herimos a la persona que más quieres, duplicaremos tu dolor.
Jisung llevó dos de sus dedos a la herida en las clavículas del inspector y los metió hurgando en la carne y abriéndola sin cuidado. Chan gritó y llevó su puño hacia el rostro contrario.
Han cayó al suelo y Chris pudo ponerse en pie antes de que Hyunjin le golpeara.
— ¡Jeongin, escapa! —gritó su novio forcejeando con el de cabello largo— ¡Yo los detendré!
Yang volvió a retroceder mientras negaba con la cabeza hacia el mayor. No quería, lo había vuelto a encontrar después de mucho y no quería dejarlo solo.
— ¡Jisung, que no escape! —le gritó Hyunjin al ver como Jeongin se alejaba.
El llamado fue en busca del pelinegro, más no se espero que Christopher se echara encima de él tan bruscamente.
— ¡Sal de aquí ahora! —le gritó Chan.
Jeongin dió media vuelta y, con el corazón en un puño, salió de la cabaña y corrió sin mirar atrás como si supiera hacia donde estaba yendo.
Dejó escapar un sollozo cuando escuchó disparos, pero no detuvo su paso.
Si tardo tanto en actualizar es porque estoy de exámenes :'(
VAYAN A LEER SOLIPSISM, ES MI NUEVA HISTORIA PARANORMAL
(y tengo en mente una con temática de circus uwu)
ESTÁS LEYENDO
𝐂𝐀𝐍𝐍𝐈𝐁𝐀𝐋 ━━ 𝐒𝐊𝐙
Random━━━ Te perseguirán esta noche, te atraparán y te comerán vivo. Como si fueran animales. Una serie de desapariciones de jóvenes atemorizan al pueblo y Jeongin lo iba a vivir en sus propias carnes.