—¿Cómo te fue? —Yoongi lo asalta apenas cruza el humbral de la puerta, está sentado en el escritorio rodeado de varios libros, la tableta gráfica reposa sobre la mesa casi al filo entre tanto apilamiento.
Taehyung bufa una vez y eso parece ser suficiente respuesta para el alfa, quien vuelve a su trabajo con una sonrisita en los labios.
—¿Fueron a comer? —inquiere analizando el dibujo en la pantalla, impulsando los anteojos azules sobre el puente de su nariz cuando vé que el rebote de la luz no está lo suficientemente marcado.
—¿Por qué me hablas así? —el alfa menor espeta, y cuando Yoongi se gira lo ve caer pesado sobre la cama, con los labios apretados en un gesto enfadado— Me hablas de él, como si... Estás malinterpretando todo.
Taehyung lo mira con los ojos grandes, y Yoongi ve la confusión disfrazarse de molestia en la contorsión de su rostro. No quiere presionar, por lo que espera a que el otro hable.
—Jungkook, él... Yo. Yo no... No estas entendiendo, hyung —y el aludido se acomodó serio en la silla para que sintiera toda su atención— Te dije que quería acercarme, pero no... Solo creí que podiamos llevarnos bien porque a él le gusta el manga... No es lo que piensas —y quiere decirle, Taehyung quiere gritarle a su hyung que porque a él le gustaran los alfas no significaba que a él también le fueran a gustar, pero se contuvo. No queriendo descargarse con la única persona que estaba ahí para él.
Yoongi lo miro apoyar las cabeza en el talón de las muñecas aún sentado en el borde de la cama. Y no fue su verdadera intención entrometerse, mas estaba casi seguro de que no se equivocaba.
—Está bien, Taehyung. Yo no pienso nada —y el menor se ve afligido cuando busca su mirada.
—Sí. Yo se que sí. Cres que él me... —y la angustia que lo afligue es suficiente para poner a Yoongi en guardia.
—Hey, yo no creo nada ¿Está bien? —suspira, aún mirándolo a la cara— Solo quería incentivarte a que tuvieras un amigo.
Y espera sonar lo suficientemente creible, porque se esta enforzando en contenerlo, y de todas formas no deja de ser la verdad.
Taehyung inhala hondo antes de desplomarse en la cama, el recuerdo sintiendose agrio en su mente y aprieta los ojos para tratar de olvidar, mas es imposible que el pensamiento no lo siga atormentando.
A Taehyung le quema la cara. No sabe que es lo que ha hecho mal, ni siquiera cree ser merecedor de aquel trato. Pese a su irrefutable inocencia, no puede safarse de los intensos ojos frente a él, que lo miran como si inquirieran, como si sospecharan de algo. Quiere defenderse a si mismo y a su nombre, mas ni siquiera alcanza a separar los labios cuando el azabache lo apunta con un dedo.
—No confío en tí —es todo lo que le dice.
Taehyung lo ve llevarse los palillos recargados con el ramen que acaban de comprar a su boca. Las mejillas se abultan redondas mientras mastica aún con la vista fija en él.
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𝐓𝐡𝐞 𝐩𝐫𝐞𝐭𝐭𝐢𝐞𝐬𝐭 𝐚𝐥𝐩𝐡𝐚ᵀᵃᵉᵏᵒᵒᵏ
Tiểu Thuyết ChungJungkook ingresa a ChongSeon, una universidad exclusiva para alfas, dispuesto a estudiar arquitectura, con el pequeño inconveniente de que, bueno... el no es precisamente uno. Por otro lado, Taehyung no entiende porque después de tantos años de atra...