𝐓𝐡𝐞 𝐩𝐫𝐞𝐭𝐭𝐢𝐞𝐬𝐭 𝐚𝐥𝐩𝐡𝐚ᵀᵃᵉᵏᵒᵒᵏ

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟖

Las clases se volvían cada vez más tediosas mientras se internaba el invierno. Los profesores cada vez explicaban menos y exigían más de sus alumnos que experimentaban la ansiedad y el estrés como la banalidad de todos los días.

Jungkook estaba teniendo sus primeros problemas. Y no era en sí la gran cantidad de ejercicios y trabajos que debía entregar antes de las vacaciones de invierno, mas bien se trataba del mal manejo del tiempo que se le escurría de las manos como si no existiese.

Se levantaba cerca de las cinco de la mañana y practicaba simulacros viejos para el exámen parcial de analisis matemático, que tenía la fama de ser el terror de primer año. Se le había hecho un habito que repetía incluso si no había podido descansar bien durante la noche, incluso si los ronquidos de Hobi eran tan fuertes como para dispersarlo un par de veces. Desayunaba cerca de las siete, y el café se había vuelto la bebida predominante. Jungkook se preguntaba que tanto café podría beber antes de enfermarse del estómago, ¿La cafeína tenía efectos colaterales? ¿Por qué ya no podría dejarlo? Le gustaba con leche y le calentaba la pancita cuando la naríz se le sentía tan fría que creía que se le caería.

Entraba a clases a las ocho y no tenía respiro de las aulas hasta la una del mediodía, tiempo que aprovechaba para almorzar. Veía muy poco a Hobi, ya que este estaba tan ocupado con sus clases como él, pero había tomado el valor suficiente como para encontrar nueva compañía. Felix y Minho estaban en primer año al igual que él. Eran buenos chicos y a Jungkook le agradaban.

A las dos volvía a clases hasta las cinco y se iba a la biblioteca para poder estudiar en alguna de las mesas del primer piso hasta que no diera más del cansancio y se dignara a cenar algo rápido, mas eran más las veces en las que se iba directo al dormitorio sin nada en el estómago. Había perdido algo de peso el último mes y la ropa le queda incluso más embolsada que de costumbre.

Por eso, una tarde de jueves, se sentó con desgano sobre la silla, dejando la mochila por encima de la mesa, al igual que la taza de café que había conseguido en el bufet al lado de la biblioteca. Las mesas estaban ocupadas casi en su totalidad por lo que cedio a aquella pequeña mesa contra la pared, que daba a la ventana. La lluvía había estado hacechándolos la última semana y las gotas contra el vidrio se sentían tan relajantes que Jungkook sintió la tensión en sus hombros ablandarse.

El aroma a libro y a café lo abrazó mientras sacaba los libros y los colocaba abiertos y superpuestos en la pequeña mesa, sacando luego un resaltador fluorescente para remarcar aquellas definiciones que eran imprescindibles saberlas a la hora del parcial. Estaba cansado, la noche anterior había vuelto a la habitación cerca de las doce de la noche y la lluvia lo tuvo despierto un rato entre tantos truenos y relámpagos. No esta seguro a que hora logró consciliar el sueño, si sabe que cuando sonó el despertador sentía que habían pasado no más de quince minutos.