CAP 29

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-Y si yo no estoy bien?-dice y me sorprendo al escuchar a Rafe decirle a su padre eso.
-Que? No te sigo.-dice Ward y yo echo una pequeña risa irónica.
-Que no estoy bien.-repite otra vez con la voz algo cansada.
-Claro que si campeón!-dice Ward.-necesitas descansar.
-no no estoy bien Papa.-dice el cada vez con la voz más rota lo que le rompía a mí en mil pedazos.
-esta noche volveremos, dormiremos y nos comeremos un buen filete.-dice quitándole la importancia al tema.- por la mañana estarás como nuevo que lo soy yo!
-pensaba que estaba bien, pero no-dice llevando sus manos a la cabeza, mi mano la apoyo en su pierna intentando trasmitirle tranquilidad.
-Venga Contrólate haz el favor.-dice y lo miro con asco.
-Es que no paran de venirme...ahhh... pensamientos a la cabeza y no no se si soy capaz de controlarlos.-dice levantándose haciendo que Ward imite su acción.- y me da miedo lo que pueda pasar.-dice y yo me levanto también, llego el momento de ayudarlo, él no podía más!-no sé cuánta mierda mas pueda trágar vale?-dice y yo toco su espalda con una de mis manos, mientras comenzaba a llorar.
-Lo hablamos en casa si?-dice ward, cada vez me dan más ganas de pegarte un tiro en la puta cabeza!
-Me da miedo!-dice con la voz completamente rota.-Necesitó ayuda vale? No a ella, la necesito, enserio.
-Lo se, ya lo hablaremos.-dice con odio.
-Papá me estás escuchando.-dice llorando.-lo estoy pasando fatal.-dice y Ward lo abraza para no llamar la atención de los policías.
-Lo se lose, pero tienes que ser un hombre, mírame, se un hombre, ahora mismo, gracias.-dice para después dirigirse a los policías.
-Rafe!-digo para ir a abrazarle.-por favor esto no es ser menos hombre Rafe, necesito que estes bien, necesito que vayamos ahora mismo a que te miren.
-El no se va de aquí mocosa!-dice Ward acercándose a nosotros.
-Te está pidiendo ayuda! Es que no lo ves? Te importa una mierda como se sienta tu hijo.
-No me digas cómo tratar a mi hijo, yo soy su padre no tu!
-Padre? Vamos por favor no me hagas reír.-digo riéndome irónicamente.- Un padre no le diría a su hijo que sea un hombre cuando él está mal, un padre lo llevaría de inmediato a un profesional a que lo tratase, pero es más cómodo tener a tu hijo como psicopata porque así hace todo lo que sea por ti, como por ejemplo matar, esconder cuerpos.
-Y a la siguiente que va a matar es a ti, me canse de ti niñata, en cuanto lleguemos a Outer banks desaparecerás.-dice mirándome amenazante.
-No me das miedo Ward, a mi no!-digo acercándome a él.- Yo no te tengo ni una pizca de miedo.-digo tan Segura que hasta me creo a mi misma.
-Pues va a ser hora de que me lo tengas si no quieres tener graves problemas.-dice dando 3 pasos hacia atrás.
-En está vida todo lo malo se devuelve y espero que a ti te lo devuelva bien devuelto.-digo acercándome a él aún mas.-Te mereces todo lo malo que hay en este mundo y te juro que mientras yo viva me encargare de que eso te pase.-digo para darme la vuelta y dirigirme al coche.-Ah si se me olvidaba también me encargaré de que Rafe reciba esa ayuda que necesita para poder alejarse de ti así como lo hizo sarah.-digo para después meterme en el coche y esperar.

Quería llegar cuanto antes a los Outer banks, quería ver a mis amigos y buscar un especialista para Rafe, como si tengo que trabajar de mañana a noche me da igual pero Rafe recibirá esa ayuda.

Podría pedirle a Topper y Kelce que me ayuden con ello, al fin y al cabo ellos son sus mejores amigos.

Rafe se monta en el coche seguido de Ward, Nadie emitía ni una sola palabra, el ambiente era tenso y la incomodidad se notaba a kilómetros.

Volvemos a la casa que tenían y Rafe y yo nos fuimos a su habitación, mañana saldríamos a primera hora y teníamos que descansar, sobretodo Rafe, él era el que peor estaba en toda esta historia y normal.

Me tumbe en la cama y Rafe hizo los mismo, pose mi mano en su pecho y después apoyé mi cabeza en este.

-Buscaré la mejor ayuda si?-digo en un tono cálido.
-Gracias, pero tengo que ser un hombre.
-Oh Rafe basta, ser un hombre es aquel que cuando necesita ayuda se deja ayudar.
-Ya no se nada, no sé ni quién soy.
-Por eso necesitas esa ayuda Rafe.
-pero ni siquiera tengo dinero y mi padre no se va a ofrecer ya los has visto.
-Si también vi como literal dijo que me mataría.
-No lo hará.-dice seguro.
-Y tú?.-digo y me mira confuso.-el no se ensuciaría las manos, Rafe te mandaría matarme.
-El jamás haría eso.
-pero y si lo hace? Me matarías?
-Jamás, si me llegase a decir eso me largaría del país contigo, nos iríamos a vivir a otro país y nos esconderíamos de por vida si eso pasase.-dice mientras acaricia mi cabeza.
-pero y si te cansas de mi?
-Creeme que jamas te mataría, ni aunque me engañases o te odiase, jamás lo haría.
-Te buscaré el mejor especialista y trabajaré lo que haga falta para pagarlo, yo te ayudaré.
-Emi.-dice y levanto la mirada para poder verlo.-Te amo, te amo y por eso me sería imposible hacerte daño.
-Rafe yo.-para mi era tan pronto decirle te amo.
-Sh sh, no hace falta que me digas algo que no sientes.
-Rafe yo te quiero como a más nadie, me siena mal no confesarte que te amo, pero entre todo esto que paso yo, yo aún no me siento preparada como para decírtelo y sentirlo realmente.
-Tranquila Emi, no hace falta, me conformo con saber que me quieres y que decidiste ser solo mía.-dice para después besarme.

Pero esta vez el beso era tan tierno, lleno de sentimientos, que un gran cosquilleo recorrió todo mi estómago ocasionando un gran escalofrío, la piel se me erizó y una sonrisa salí por mi boca haciendo que el beso se terminase.

Me acosté en su pecho y con las caricias que me hacía en el pelo me quede dormirá rápidamente.

Sin compasión.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora