XXXIV

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—Eres un idiota.

—¿Por qué siempre dices lo mismo?—Sunghoon gruño.—Soy el mejor de la clase.

Jay y Sunghoon se dirigían a la cafetería para encontrarse con el resto de sus amigos.

—Y  al final del día sigues siendo un idiota, eso demuestra que las notas no definen nada.

Golpeó a su mejor amigo y este solo se sobo el lugar afectado.

—Si me explicaras entendería.

—¿Qué hay que explicar? Todavía no le pediste a Sunoo que sea tu novio.— dijo obvio.—Eres un idiota.—volvió a repetir.

—¿Pero no es obvio que ambos nos gustamos? No hace falta poner una etiqueta, lo importante es lo que sintamos el uno por el otro.

—Pero Sunoo no sabe eso, idiota. El es del tipo romántico, le gustan las palabras dulces, que le regales chocolates y flores y le digas cosas bonitas.

Sunghoon se calló, su amigo tenía un punto. Sunoo era ese tipo de personas y amaba todo lo que Jay había nombrado. Se sintió algo tonto por no haberlo pensado antes.

—Además, es algo inseguro creo que le hará bien que le transmitas seguridad y que le pidas ser su novio se la dará. Quizás el pobre está comiéndose la cabeza preguntándose por qué aún no se lo has preguntado.

—No lo había pensado.—murmuró metido en sus pensamientos.

—Claro que no.—respondió Jay.—Para eso me tienes a mí.

Era su primera relación por lo que le faltaba experiencia. Estaba agradecido de tener a Jay para que lo guiará y lo ayudara.

—¿Cuál es el plan? —preguntó.

—Para esto vamos a necesitar de mi amorcito, Wonie lo conoce mejor y sabe lo que le gusta.

Por otro lado los menores ya estaban allí, Sunoo decidió decirles la noticia oficialmente.

—Chicos, tengo algo que decirles.—dijo llamando su atención.—Las cosas se dieron naturalmente lo cierto es que hace rato vengo dándole vueltas al asunto.—empezó a divagar nervioso

—Ya lárgalo.— lo apuró Jungwon.

—Bueno una cosa llevo a la otra y... El otro día me le declaré a Sunghoon y resulta que yo a él también le gusto.

—Ya era hora.— Habló el australiano con la boca llena restándole importancia ya que ya lo sabía. Jungwon a pesar de también estar enterado lo golpeó por su indiferencia sabiendo que esto era importante para Sunoo y que decírselo a ellos era un gran paso.

—Lo que quiere decir es que estamos felices por ti hyung.

—¿Niki? —preguntó el de pelo castaño al ver que no había emitido una opinión, se encontraba con el rostro serio y una expresión indescifrable. Tenía miedo que se enfadara con el ya que Sunghoon y el no se llevaban para nada bien.

Este solo se paró de la mesa abruptamente abandonando el lugar. Confundido Sunoo se levantó para ir detrás de el.

—Niki.—lo llamó pero el menor no volteaba, solo adelantaba su paso.—Nishimura Riki.— Volvió a llamarlo.

Corrió aún mas rápido para poder alcanzarlo, a pesar de más chico que él Niki era mucho más alto por lo que era difícil seguirle el paso. Cuando finalmente pudo alcanzarlo lo giró para que pudieran hablar frente a frente.

—¿Qué rayos te pasa?—preguntó agitado.

—No puedo creer que salgas con ese idiota.—gruño.

—Entiendo que no te agrade pero no te refieras así cuando hablas de Sunghoon, es un chico agradable y me gustaría que se llevarán bien. Eres mi amigo y el es...— trató de buscar una palabra para definir lo que eran.—El es importante también.

—¿Lo dices en serio? ¿Después de todo lo que te hizo sufrir? —se estaba empezando a alterar y había levantado un poco la voz asustando a Sunoo.—Desde que llegó a tu vida no hizo más que lastimarte, nunca nos lo dijiste pero pude notarlo, siempre lo observabas más que al resto y cada vez que te ponías mal parecía que el estaba involucrado. No eres más que otro idiota al igual que el, son tal para cual.— espeto.

El más bajito se sintió herido ante las palabras de su amigo, no entendía porqué estaba enojado con él ni porque lo insultaba. Niki le volvió a dar la espalda yéndose del lugar, Sunoo quiso volver a seguirlo pero una mano en su hombro se lo impidió.

—Dale su tiempo.— Le recomendó Jake.— Yo iré a hablar con él.

Asintió viendo como el australiano se iba en dirección donde había desaparecido el rubio.

Pensó que ahora que las cosas con Sunghoon iban bien y había resuelto el asunto de Jake todo estaba saliendo bien. Pero no podía relajarse sabiendo que uno de sus mejores amigos estaba enfadado con él.

Cabizbajo y con un nuevo sentimiento de incomodidad volvió a la cafetería. Allí ya estaban sentados Jungwon, Jay y Sunghoon.

Al verlo Sunghoon lo llamó con la mano indicándole que se siente a su lado. Al tomar asiento pasó su mano por detrás de su hombro atrayéndolo más hacía él. Sunoo se limitó a apoyar su cabeza sobre el pecho de Sunghoon desanimado.

—¿Qué pasó Sunny?—preguntó preocupado al ver su estado de ánimo.

—Niki está enojado conmigo y no se por qué.— dijo sintiendo sus ojos aguarse y las lágrimas querer escapar.

—Seguramente ya se le pasara.— trató de consolarlo Jungwon a pesar de saber que era mentira.

—Jungwon tiene razón.—lo reconfortó Sunghoon.—Quizás solo tuvo un mal día.

Al azabache no lo agradaba para nada el maknae pero sabía que para bien o para mal, era un amigo importante para Sunoo y sabía lo mucho que le afectaría una pelea entre ambos.

El de ojos felinos asintió sintiéndose mejor ante las palabras de sus amigos, quizás solo se lo había tomado personal y Niki no quería decirle esas palabras.

Todo estará bien

Se acurrucó en el pecho del mayor sintiéndose seguro y cómodo. Este último se encontraba haciendo circulos en su hombro tratando de pensar en algo que lo haría sentirse mejor.

En ese momento no le importaban las miradas del resto de los alumnos sobre ellos, solo importaba la calidez que le transmitía la presencia de Sunghoon.

Otro cliché más [Sunsun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora