29.- Clases

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Suena la alarma, mis sentidos se agudizan, caigo en cuenta de que ya es el primer día de clases, adiós a las fiestas recurrentes, adiós a dormir tarde, adiós a permanecer sedentaria todo un día; por fin llegó el día en que tenía que terminar la secundaria, ser alguien en la vida y todo eso, de alguna u otra forma me causaba mucha felicidad, aunque suene raro, extraño la tabla dura del pupitre debajo de mi, extraño mis desvelas por tareas, extraño escuchar al profesor toda una mañana bien sea regañandonos o dando una aburrida clase, dentro de mi siempre seré una aburrida cerebrito, aunque tenga una mejor vestimenta y un cambio de actitud, ah y un novio.

Me levanto por fin después, para encaminarme al agua tibia que se encuentra en mi ducha, las gotas repiquetean, salpicando sobre mi cabello y cuerpo, cierro los ojos recibiendo con gusto la dulce sensación del agua; al terminar salgo para secarme, pienso en unos instantes de mi vestimenta, opto por un short corte alto acompañado de un sweater beige que queda a la altura de mi ombligo dejándolo ligeramente descubierto, mis típicos converse de color amarillo, mi bolso jeansport de animal print, espero que mi prima se haya levantado porque no quiero llegar tarde lo que significa que tendrá que quedarse en esta casa y salir para esperar un taxi o  ir hasta la parada de un bus (que lo dudo). Entro a su habitación corruptamente y allí está ella en ropa interior buscando ropa que ponerse en su closet.

-Se vale tocar idiota.- Habla desinteresadamente mientras no pierde de vista su búsqueda

-¿Todavía cambiándote?.- Le refunfuño

-Es que no se que ponerme.- Se lamenta

-Verónica... Ayer te compraste una cantidad exagerada de ropa nueva y ¿sigues sin saber que ponerte?.

-Es que toda la ropa es muy bonita y no se que hacer.- Dice con un puchero al final

-Bueno como sea, apúrate que Leo nos buscará a las 7.50 y ya son las 7.40.- Termino de decir para así salir del cuarto, me encamino a la cocina para prepararme la comida más importante del  día, decido por un tazón de cereales flips, a una cantidad casi desbordante del tazón para luego de terminar servirme otro, mi apetito es voraz, aún ni entiendo como no logro engordar de una forma mórbida, pero de todas formas agradezco por estar en mis sexys condiciones. Vibra mi celular.

Voy llegando.- Leonardo

Oki, ya Vero está casi lista.- Carla

Bien.. Que se apure que me da flojera llegar tarde.- Leonardo

Eso hace, ¿fuiste por mi Yessica?.- Carla

Si.. Fui por tu querida mujer que no ha parado de hablar todo el camino.- Leonardo

Que bueno, así te entretienes un poco.- Carla

Aja... Mira llegue, sal ya.- Leonardo

Shh, no apures.- Carla

Subo a la habitación de mi prima para regañarle que ya es tarde y que de seguro ni se ha vestido, no obstante para mi sorpresa está lista.

-¿Creíste que no terminaría a tiempo?.- Pregunta con tono egocéntrico, para pasarme por al lado volteando sus ojos de forma "diva", le saco la lengua y le sigo por detrás.

El viaje fue animado, hablamos de las expectativas de nuestro primer día y en como se encontrarían los alumnos al llegar, si tal vez habría nuevos o no.

-Espero que haya chicos lindos.- Menciona animada mi prima

-Yo también.-Le sigue mi amiga, yo simplemente me tapo la boca según la mirada de Leonardo.

Let the party begin mother fuckers (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora