❛'💭𝟎𝟎𝟑'❜

1.2K 163 29
                                    

Luego de aquella ocasión, USA faltó por un par de días, siendo Rusia el único que lo notó. A nadie en el salón le importo, ni siquiera a los maestros.

Luego regreso como si nada.

En el transcurso de la primera clase, podía sentir una intensa mirada sobre él. Tratando de ser discreto, movía la cabeza para ver al culpable; no obstante, todos sus compañeros estaban haciendo mejores cosas que prestarle atención.

Trato de ignorar el hecho, creyendo que podría ser su mente jugándole una broma. Sin embargo, la sensación no desapareció. Se sentía observaron en todo momento, incluso en la clase de deportes no dejó de sentirse observando. La situación comenzaba a incomodarlo, y también le molesta.

Durante el receso, buscó a Estonia para contarle todo, pero ella faltó a la escuela ése día, y los demás están bastante ocupados estudiando para una exposición.

Cansado, fue a la biblioteca, tomó el primer libro que vio y se marchó, yendo atrás de la biblioteca. Ya cómo una costumbre, se encontró a Estados Unidos sentado debajo del árbol.

No lo saludó, simplemente caminó a su lugar y tomo asiento, paso las primeras páginas del libro hasta encontrar el capítulo número uno.

Todo parecía tranquilo, Rusia empezaba a relajarse, pero, entonces, nuevamente sintió aquella intensa mirada sobre él.

No alzó la vista o algo parecido. De reojo, miró al chico rubio, notando con asombro cómo esté le observaba indiscretamente. Más extrañado que molesto, levantó la mirada haciéndole frente.

Viéndose descubierto, USA se sobresalto, no sabía cómo reaccionar. Ambos se miraron por un par de minutos muy silenciosos. Repentinamente, el rubio levantó su mano y le enseño el dedo de en medio, sólo para después volver a pegar la vista en su libreta.

Rusia dejó de lado el libro, y caminó en dirección a USA, poniéndose justo frente a él.

— ¿Por qué me miras tanto? —cuestiono serio, pero no enojado.

El otro ni siquiera le prestó atención. Estados Unidos mantuvo toda su atención en la libreta, ignorando al de mayor altura. Sin embargo, Rusia no se movió.

—Yo no te veía. —contesto aún con los ojos puestos en la libreta. —No te creas importante.

—Lo hiciste, hace un momento. —aseguro.

—Una ilusión óptica, seguramente. —respondió tranquilo.

Rusia enmarcó una ceja confundido ¿Qué clase de respuesta era esa?

Luego de unos momentos, Estados Unidos levantó la vista, y esos azules ojos le observaron atentos y concentrados. Un segundo después, gruño irritado.

— ¿Por qué no huyes? —expreso confundido y molesto.

— ¿Debería?

Rusia no entendía nada, y las respuestas del contrario no ayudan en lo absoluto. La situación es en extremó extraña, no sabe cómo afrontarla, nunca le ocurrió algo parecido.

— ¿Acaso...? ¿Acaso no te sientes asqueado? —pregunto perplejo. Poniendose de pie, miro de frente al tricolor.

—No entiendo... —susurro dando dos pasos atrás.

El rubio se acercó a él, dejando muy poca distancia entre ambos. Y con una expresión sería exclamo:

—Soy un delta.

𝐇𝐞𝐚𝐫𝐭 𝐒𝐢𝐠𝐧𝐚𝐥 ⃟࿐𝑅𝑢𝑠𝐴𝑚𝑒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora