❛'💭𝟎𝟒𝟎'❜

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Los primeros rayos de sol, como pinceles dorados, pintan la habitación a través de las cortinas, transformando la estancia en un lindo lienzo impregnado de tonos cálidos y acogedores. Un susurro tranquilo se cierne en el aire, solo interrumpido por la suave respiración de los protagonistas, quienes se encuentran dormidos en la misma cama, entrelazados en las mismas sábanas.

Rusia despierta antes, y su mirada se encuentra de inmediato con el rostro sereno y dormido de U.S.A, con una tranquilidad y paz que contrasta con la intensidad vivida la noche anterior. Los recuerdos de esa noche aún resuena en su memoria. La vergüenza acaricia su ser al tener esos recuerdos tan nítidos en su mente; por supuesto que recuerda todo lo que sucedió horas previas, ¿cómo podría olvidarlo?

Quizás estaba en celo en ese momento, pero siempre fue consciente de lo que hacía. Lo que sucedió fue porque él también quería que sucedería, y su celo solo le brindó la seguridad que hace mucho necesitaba.

El alfa se permitió mirar a detalle la cara del norteamericano, como si esté fuese una divina joya, y sus dedos exploraron el dorado cabello del delta con delicadeza. La felicidad y el aprecio se instalan en su ser, haciéndole sentir dichoso.

Inclinándose un poco, Rusia deposito un beso suave en la frente del estadounidense, es un suave tacto dónde deposito un poco de su mucho amor. Entonces, el americano abrió paulatinamente sus ojos, cuando todo se volvió claro, se encontró con los ojos del ruso mirándole. El de bandera tricolor se quedó fascinado al ver el azul del cielo veraniego en los ojos del norteamericano; definitivamente, no hay otro cielo que quiera ver más que el azul cielo de los ojos de Estados Unidos.

No hubo palabras entre ambos, solo un silencio relajante y ameno. El albino continúo acariciando el cabello ajeno, mientras el contrario le mira con una tenue sonrisa feliz que calienta al corazón de su pareja. Rusia, con delicadeza, trazó con la yema de sus dedos las líneas en el rostro del norteamericano, en cada toque se percibe un amor y benevolencia palpable. Enternecido, U.S.A acercó su cuerpo desnudo al del otro y lo abrazó, depositando su cabeza en el espació entre el cuello y hombro del euroasiático.

Un aroma a menta se disperso en el ambiente, impregnado la habitación con una dulzura renovada. La calidez en el ambiente se volvió apacible, el calor de sus pieles se unen en una mezcla de amor y cariño mutuo.

Rusia deposito un tierno beso en la cabeza del delta, totalmente cautivado por el.

Te amo.

Te amo.

Ambos pronunciaron esa palabra al unísono, rompiendo el silencio con una confesión sincronizada, casi como si estuvieran conectados. Ellos se miraron, y pronto la habitación se lleno de risas suaves.

Los dos estuvieron de acuerdo, incluso si no lo dijeron en voz alta, en no salir de la cama aún. Quieren prolongar más aquel momento íntimo que comparten. Hablaron con miradas y susurros suaves, intercambiando cariñosos besos y caricias de aprecio.

En el momento que los rayos del sol saturaron la habitación, ambos se levantaron para empezar con su día. Y fue ahí cuando Estados Unidos propuso que tomarán una ducha juntos, diciendo que así ahorrarian más tiempo; si embargo, eso es una simple escusa, ya que su objetivo era estar cerca del eslavo por el mayor tiempo posible. El alfa se mostró muy tímido por la petición, pero al final terminó aceptando. El estadounidense no entiende la cohibición de Rusia, pues prácticamente ya se habían visto todo, ya no hay nada para ocultar o sentirse tímidos.

La pareja entró junta en la bañera, el agua caliente entro en contacto con sus pieles y el vapor les brindo un abrazo cálido. El agua elimino todo rastro de tensión en sus músculos.

𝐇𝐞𝐚𝐫𝐭 𝐒𝐢𝐠𝐧𝐚𝐥 ⃟࿐𝑅𝑢𝑠𝐴𝑚𝑒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora