Ojos color fuego

Capítulo 19

¡¿Que hacia aquí una luna superior?!.

Akiko estaba paralizada, su poder era muy abrumador, tanto como para avisar antes de haber aterrizado, lo dejaba fluir sin ningún miedo, le traía sin cuidado ocultar su presencia y poder.

Kyojuro ya tenia su mano sobre el mango de la katana a la espera, Tanjiro echaba la cabeza hacia tras todo lo que podía a para ver al enemigo que acaba de aparecer, pero aun pese a ello no evito que se estremeciera por lo que percibía su olfato, además de quedarse completamente confundido como su hermana y el pilar por la presencia del demonio, Kyojuro  no demostró su sorpresa, solo una fría calma.

Kyojuro estaba atento, él no era un enemigo ni normal ni común, el número en sus ojos se lo confirmaba, era una luna superior, y no cualquiera, si no que era la numero tres.

La élite de Muzan. 

En un movimiento la luna salto con tal fuerza que levanto la tierra del suelo con sus pies para tratar de un golpe matar al cazador de las cartas de hanafuda, Akiko dejo de estar paralizada solo para reaccionar lo más pronto, echándose sobre su hermano, cubriéndolo con su cuerpo del ataque, apenas el puño iba a rozar los cabellos de la Kamado mayor, cuando. . . 

¡Respiración de la flama!. Segunda postura. ¡Cielo en flamas ascendentes!.

Kyojuro había cortado el brazo del demonio en dos pero sin si quiera llegar a cortarlo y separar el miembro del cuerpo del demonio.

Era muy resistente.

El demonio de cabello rosado retrocedió dando un par de saltos, Kyojuro estuvo aliviado de haber podido reaccionar a tiempo y haberlos salvado  tiempo.

--Akiko quédate detrás.-- susurro completamente serio. No quería que saliera lastimada.--Tu también Joven Tanjiro.-- estaba herido, y este era un nivel completamente diferente de pelea, no quería que Akiko perdiera la poca  familia que le quedaba.

No dejo de estar en guardia aun si el demonio sonreía alegre.

Uniendo en un solo movimiento su brazo, Akiko se levantó lentamente pero aun estando cerca de Tanjiro, estaba aturdida por su nivel de regeneración. Akiko reconoció que Tanjiro estaba siendo el objetivo de los demonios, pero, ¿porque?.

--Buena espada.-- decía el demonio mientras probaba la sangre que había quedo en su muñeca, tras haber cerrado aquel corte tan sencillamente.

Kyojuro noto que se regeneraba rápidamente y tiene un aura abrumadora, vio de reojo como la Kamado estaba en pose defensiva cubriendo a su hermano quien aun seguía tumbado en el suelo observando que estaba pasando.

--¿Por que alguien tan poderoso como tú, ataca a los heridos primero?.-- se había dado cuenta haciendo que el demonio sonriese más, como si estuviera complacido.

--Pensé que se podría interrumpir la conversación que estamos por tener.-- respondió.

--¿De que vamos a hablar?. Esta es la primera vez que nos vemos, pero ya te odio.--"Estuviste a punto de lastimar a alguien que es muy preciado para mi" quiso decir pero no era el momento, debía asegurase de proteger a los hermanos, aun si aquello le costaba su vida.

--¿En serio?.-- se burlo el demonio.-- Odio a los humanos más débiles. Ver gente inútil me pone la piel de gallina. Pero aun más a los demonios débiles.-- sus ojos se posaron en la demonio, Akiko tembló al estar bajo su mirada.

--¿Una demonio ayudando a los cazadores?, vaya que eres débil como para arrastrarte a ser protegida por ellos.-- dijo con repulsión.-- Los seres débiles simplemente deberían dejar de existir, humanos y demonios.--