Ojos color fuego

Capítulo 17

Sentía que algo estaba olvidando algo.

Era una sensación en su pecho donde hay algo que estaba faltando, algo que estaba dejando en el olvido, y era importante, ¿Qué era aquello tan importante?. 

Por que se sentía tan inquieto.

¿Qué era lo que estaba olvidando?.

¿Que. . . ?

--Hermano, la comida esta lista.-- la voz de su hermano lo saco de aquellos pensamientos, Senjuro comenzó a servir la mesa.

--¡Si!.-- Kyojuro  observo como prepara el menor la mesa después de todo estaba entrenado el patio de la casa pero era un día caluroso y soleado por lo que tenían las puertas corredizas abiertas, dejo la katana de madera en su lugar y se enjuago el sudor del rostro en una toalla, al entrar su hermano tenia la mesa lista.--¡Oh! ¡te has lucido hoy Senjuro!.-- Todo se veía apetitoso además de que tenia un olor muy delicioso.

--Para nada, es una forma de celebrar que te has convertido en pilar, hermano.-- acabo por decir mientras colocaba el té en el centro de la mesa  para poder acompañar la comida del día de hoy.

La sonrisa de Kyojuro creció y su corazón se calentó a las intenciones de su hermano.

--Gracias, Senjuro.-- ciertamente había un festín servido en la mesa, podría comer hasta hartarse, por lo que ambos tomando sus tazones con arroz agradecieron por la comida y se dispusieron a comer, justo cuando Kyojuro dio el primer bocado no pudo evito gritar ¡Umai! haciendo que Senjuro sonriera feliz de que a su hermano le haya gustado tanto al comida y ahora como siempre tras cada bocado decía su característico delicioso.

--¿Entrenaremos cuando acabemos?.-- pregunto el menor con entusiasmo, no hacia mucho su entrenamiento había comenzado para poder dominar la respiración del Fuego.

--¡Por su puesto, serás un gran espadachín!.--  Aunque había notado que su hermano hacia lo que le pedía en el entrenamiento, carecía de algo que aun no identificaba, quizás mas adelante lo supiera con el entrenamiento, por ahora seguirá confiando en su hermano, después de todo Senjuro no tenia que ser como él, él podía escoger que ser y quien ser, y estaba orgulloso de que su hermano lo entendiera.

Renguko elogio la comida de su hermano y al acabar le ayudo a limpiar y recoger los platos y los tazones, dejando, claro; una porción de la comida en la habitación de su padre más algo de bebida que él había pedido, Renguko salió con su hermano pequeño a charlar sobre su respiración y sus misiones a la terraza de la casa, charlaban tan animadamente y tomando impulso de aquella animada charla, así que con ánimos Kyojuro no pudo evitar emocionarse al mostrar todo lo que sabia a su hermanito y traspasar aquel conocimiento a una nueva generación de cazadores.

También le había dicho que pensaba en tomar un aprendiz después de todo su hermano era aun muy joven para poder pelear contra aquellas despiadadas criaturas.

--Los demonios son peligrosos.-- concluyo el menor ya a sabiendas de que era lo que hacían y como se alimentaban, eran simplemente inhumano.--Ellos ya no son humanos, son monstruos.-- 

--No todos lo son.-- respondió el mayor con seriedad, había sido un impulso desde lo más profundo de su ser.

--¿Eh?.-- el menor le miro sin entender, ¿oyó bien?.

Kyojuro incluso parpadeo perplejo.

--¿Cómo has dicho hermano?.-- debía cerciorarse, su hermano parecía. . . .  desconcertado.

--Bueno, hay demonios que se trasformaron por culpa de Muzan, ¡no tuvieron opción!.-- aclaro rápidamente el pilar,  pero aun así, ¿por que había dicho aquello?, ¿conocía a un demonio amable?, no, no lo conocía, todos siempre cedían a su hambre, entonces una fugaz mirada rojiza tan cálida que estremeció su ser paso por su mente, ¿Qué había sido eso?.--¡Así que, aunque hayan perdido su humanidad no deberíamos llamar monstruos a aquellos de los que no supimos sus circunstancias!.-- no sabia a donde quería llegar, adopto su típica pose  de brazos cruzados mientras cerraba los ojos y trataba de meditar respecto al asunto y tal vez encontrar aquel destello rojo  que había visto, estaba seguro de haber visto ese color, ¿pero donde. . . ?.