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1985 - Indiana, Hawkins
-¡No!-
Steve debía admitir que se despertó sobresaltado cuando su novia grito entre sueños. Fue por segunda vez en esa semana, logrando que se preocupara por su estado. Sus manos incluso se encargaron de mandar a volar las sabanas que los cubrían para luego atrapar el cuerpo de Frey entre el suyo. La chica comenzó a moverse desesperadamente en su lugar murmurando. cosas sin sentido.
Y si tenia que apostar, llorando también.
-¿Frey? Despierta Freya-
Hunter abrió sus ojos de golpe, girando su vista hacia todos lados casi con desespero. Al minuto se dio cuenta que se encontraba en la seguridad de su habitación y entre los brazos de su novio. Muy por el contrario de su sueño, donde una vez mas veía ese horrible lugar oscuro fuera de las calles de Hawkins. Al menos esa vez no se encontró a Billy siendo lastimado. Pero ni siquiera asi fue suficiente para que se calmara, porque cuando su mirada conecto con la de Harrington, sus lagrimas comenzaron a caer por sus mejillas.
No parecía ser una simple pesadilla.
-Todo esta bien linda- la apretó contra él -Estoy aquí y estas a salvo ¿De acuerdo? Ahora necesito que hagas algo por mi cariño. Necesito que inhales y exhales muy lentamente. Solo sigue mi voz y respira con tranquilidad. Tu puedes-
Yo puedo.
Freya pensó para sus adentros intentando igualar la respiración del chico. Steve la sintió aflojar todos sus músculos y comenzar a descender lentamente hasta quedar acostada en medio de su agarre. Harrington acaricio su espalda con suavidad, dejando caricias en su piel y apoyando sus labios en la frente de la ya mas tranquila chica. Esas pesadillas parecían comenzar a ser mas y mas profundas.
Tanto, que ninguno sabia si realmente eran sueños.
-Creo que algo esta viniendo...- ella susurro como pudo contra su cuerpo -Algo malo, y no se como detenerlo-
-¿Algo malo?- él recordó los años anteriores -¿Algo como que? ¿Malo como lo del otro lado?-
-No lo se... yo...- la chica ni sabia que decir -No lo se. ¡No se nada y eso me esta matando!-
-¡Tranquila! ¡Tranquila!- su novio susurro en su oído -Solo descansa un rato mas.
Hunter cerro sus ojos con un poco de miedo, siguiendo sus palabras con intención de calmar sus nervios. No quería ver los rostros de personas distorsionadas, tampoco a Billy y ella en el medio. No le aterraban pero tampoco la hacían sentir excelente. O al menos no le producían nada grave como ver esa tenebrosa calle del otro lado, que se repetía una y otra vez. Algo que no sabia si era realmente algo malo o solo sus alucinaciones.
