✡ Guerra de Dioses y Demonios 3: El Torneo de las Mil Escuelas

✡ CCVI

Capítulo 206: El Sagrado Imperio

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Tox, Landor y Karden (los tres barbudos) abrieron los ojos como platos en cuanto vieron al responsable del incendio forestal. Ellos sabían que ninguna persona de este continente debía ser tan poderosa como para provocar un incendio de casi un kilómetro de longitud en menos de diez segundos y con un único ataque, así que ellos habían creído que los responsables eran un grupo entero, tal vez un ejército, quienes se organizaron para incendiar al mismo tiempo todos los árboles en una extensión de un kilómetro, seguramente con ayuda de explosivos mágicos y bombas de fuego. Los tres barbudos creyeron que esto se trataba de un acto de vandalismo, un acto de sabotaje en contra del Imperio Lazathor, el cual probablemente había sido perpetrado por una banda de rebeldes opositores o quizás por un grupo de soldados de algún reino enemigo... Pero ellos estaban completamente equivocados.

Al ver que el responsable del incendio no era otro más que un mismísimo Dragón Dorado, ellos se quedaron completamente petrificados.

Para entender la situación más a detalle había que saber que existen dos clases de dragones: Los dragones ordinarios y los dragones de sangre pura o también conocida como sangre guerrera.

Raidel se había enfrentado a un dragón ordinario en Ludonia, hacía ya un año atrás. A pesar de que solo se trataba de un "dragón ordinario", aquella bestia había sido capaz de aniquilar a cientos de soldados en la guerra que libraron Ludonia y Subalia. El dragón incluso había asesinado y devorado a Toren, quien era el grandulón de dos metros de altura, empuñaba una espada tan larga como él mismo, y cuyo cuerpo estaba cubierto de cicatrices de garras. Toren estuvo dentro del Top 3 de los guerreros más fuertes de Ludonia. Su especialidad fue luchar contra monstruos y bestias salvajes... Sin embargo, no había podido derrotar a un "dragón ordinario". En la última parte del combate incluso Karson lo había ayudado. Karson era el sujeto a quien apodaban Cara Quemada, ya que tenía la mitad del rostro completamente quemado. Él y Toren fueron conocidos como los "Eternos Rivales", dado que se disputaron por años el segundo puesto de los guerreros más fuertes de Ludonia. Al final nunca se supo quién de ellos fue el más fuerte, ya que Toren murió devorado por el dragón.

Un dragón ordinario era una bestia capaz de aniquilar a cualquier animal de la naturaleza. Su poder y fuerza eran incuestionables. Eran monstruos colosales y terribles. Sin embargo, los dragones de sangre pura eran criaturas mucho más grandes y poderosas que los dragones ordinarios.

Aunque ahí no termina la escala de poder. Dentro de los dragones de sangre guerrera hay doce subespecies, pero solo tres de estas destacan por estar en la cima jerárquica, ya que son mucho más poderosas que todas las demás: Los Dragones Negros, los Dorados y los Rojos.

Esas tres subespecies eran tan temidas en todo el mundo que cuando las personas hablaban de ellas, lo hacían con un temor y respeto casi reverencial. De hecho, el temor era tan profundo en la población en general que esas tres subespecies habían pasado a ser ampliamente conocidas como "las grandes fuerzas destructoras de la naturaleza". Se habían contado miles de leyendas y canciones respecto a sus supuestas hazañas. Algunos ignorantes en genealogía incluso habían creado un nuevo escalón conocido como "Raza Asesina" para referirse a esas bestias. Según ellos, no habían dos clases de dragones, sino tres: Los dragones ordinarios, los de sangre pura y los de raza asesina. Dentro de este último escalón se encontraban los dragones negros, dorados y rojos. Evidentemente, el temor que esos dragones imponían en la civilización era tan grande que la gente tenía que inventarse una nueva rama genealógica simplemente para intentar comprender por qué poseían un poder tan aterrador.

Pero lo que poca gente sabía era que la llamada "Raza Asesina" estaba bastante desequilibrada. Los Dragones Dorados eran mucho más poderosos que los Negros y los Rojos.