Tu y yo
*
este extra es sobre la noche de bodas de Danielle y Alec.
Danielle cruzó el portal con Alec que los llevaría a su casa en Idirs que había sido un regalo de Maryse y Robert.
Danielle miraba fascinada la entrada de su nueva casa aún sin creer realmente que esa era de ella y de su esposo.
Alec sonrió también al ver su casa pero sonrió aún más cuando vio la figura de Danielle frente a él y con delicadeza la levantó en brazos mientras ella reía, juntos entraron a la casa y sin decir ninguna palabra la llevó a la habitación y deposito dulcemente en el piso.
-Bueno señora Lightwood ¿como quiere pasar su noche?-preguntó Alec enredando sus brazos en la cintura de la rubia.
-Tengo algunas ideas señor Lightwood-respondió Danielle estirando sus brazos para tocar el cuello de su ahora esposo para atraerlo hacia ella y besarlo.
Ese beso se sintió tan mágico, tan único. Ya no tenían que pensar en Valentine o Jonathan sólo se tenían mutuamente y eso era lo mas importante.
El beso empezó a subir de tono y Alec ya estaba pasando sus manos por el cierre del vestido de Danielle que ya había quitado la corbata y desatado los primeros botones de la camisa de Alec.
Alec se retiró del beso un momento admirando las mejillas rosadas de Danielle y sus labios hinchados por el beso.
-Date la vuelta-indicó el peli negro osa que ella hizo inmediatamente sintiendo los dedos de Alec quitar el cierre de su vestido y segundos después la tela deslizarse de su cuerpo dejándola tan solo en sus bragas.
Danielle volvió a girar para volver a ver a su esposo quebestaba embobado con el cuerpo de su mujer viendo como el collar que tenía pasaba entre sus pechos y como él encaje de sus bragas parecía tan suave sobre su piel.
Alexander Lightwood estaba completamente enamorado de Danielle y no pasaría un día en el que no lo demostrará.
-¿Ves algo que te guste?-preguntó Danielle soltando también su cabello dejando sus rizos rubios caer sobre su cuello.
Alec no respondió y en cambio tomó de la nuca a Danielle y estampó sus labios con los de ella dejando a sus manos vagar oír la espalda tan suave de su mujer.
Danielle no se quedó atrás y retiró la camisa del cuerpo del pelinegro y acarició con cariño y deseo su nueva runa en el pecho sobre su corazón, la runa que los unía en matrimonio.
Ambos retrocedieron y cayeron al colchón de su cama donde Alec bajo sus labios al cuello de la rubia recorriendo las runas en su piel mientras ella soltaba suspiros de satisfacción.
-Alec-murmuró ella cuando los besos de Alec bajaron sobre su abdomen retirando el resto de encaje de su cuerpo-no es justo que tu aun estés vestido.
Alec sonrió de manera burlona a su esposa dejando un beso en el muslo de la cazadora para después separarse y quitarse sus pantalones con su ropa interior para después volver a atacar los labios de Danielle.
En un movimiento rápido Danielle los giro a ambos colocándose encima de él rozando sus partes íntimas haciendo que ambos disfrutarán del roce.
-Feliz noche de bodas Gid-dijo la rubia bajando sus caderas dejando que Alec entrará en ella y empezando a moverse sobre el.
-Feliz noche de bodas linda-respondió Alec besando los pechos de su esposa mientras rodeaba las caderas de Danielle para ayudarla a hacer las embestidas más rápidas y profundas.
La habitación se lleno de sus suspiros y los choques de sus pieles mientras ambos llegaban al primer clímax de la noche.
Danielle se dejó caer sobre el pecho de su marido besando la mandíbula de este y tranquilizado su respiración.
-sólo somos tu y yo-dijo Alec también con la respiración entrecortada.
-tu y yo-repitió Danielle sonriendo enternecida alzando su rostro y acariciar los labios de Alec con los suyos-no espere tanto por esta boda para que esto sea lo único de la noche.
Alec sonrió y giro su cuerpo dejando a Danielle debajo de él aún dentro de ella.
-Sabes que no dormiras en toda la noche-dijo Alec volviendo a moverse dejando el ambiente de pasión volviera a la habitación.
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3.Love is pain-Alec Lightwood
FantasyEl matrimonio entre Danielle y Alec iba de maravilla, ambos dirigían el instituto y hasta ahora no había problemas pero de la nada la desconfianza y el terror vuelve a llegar a sus vidas lastimando a su familia. ¿Sobrevivirán a esta tormenta o se pe...