La Ciudad Gedrateica

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(Este cuento pertenece al Ciclo de los Dioses Demonios).

La gran ciudad Gedrateica era un oasis en el desierto, el investigador en su peregrinación lo sabía.

Caminó por los largos callejones, observando lo que alguna vez estuvo lleno de vida y rebosando de quien sabe cuantas almas. Las inscripciones en estos antiguos lugares hablaban de como se componía la sociedad de estos antiguos seres.

Caminó por la vieja ciudad, dando pasos largos pero deteniendose a observar cada detalle. El agua aún florecía de las piletas, se veía cristalina y delicada. Algo no parecía encajar bien del todo, al mirar hacia abajo notó que había mucho más, parecía que los ductos por donde el agua se movía eran anchos, y poseían gruesas paredes que se ocultaban algo más.

Aun así, no quiso adentrarse en esos lugares todavía. Los Demonios habían desaparecido hacía millones de años, imperios se habían levantado y habían caído desde su extinción, pese a ello sus ciudades seguían intactas, y esculpidas con precisión. Parecía que los materiales de lo que habían sido fabricadas eran inmunes al paso de las eras, el tiempo no les había afectado en absolutamente nada.

La Ciudad Gedrateica fue la capital de la antigua raza, y en el centro, tras horas de caminata por la sombra, el investigador dio con el Palacio Gedra, donde la Dinastía Demoníaca, el linaje que poseía la carne deificada y consciencias que se creían eran divinas habitaron. 

En la entrada del palacio habían más estatuas, honrando seguramente a la dinastía que alguna vez existió, pero al igual que la estatua a la entrada de la ciudad, estas estaban rotas. Tal parecía que no se habían desgastado con el tiempo, sino que alguien las había roto adrede ¿Quién podría haber llegado a este extremo?

Las paredes aún poseían inscripciones de la antigua civilización, tras acercarse a leerlas el investigador escuchó algo. Al voltearse, creyó ver algo que se movió fugaz escondiéndose, él se puso contra la pared olvidando de inmediato lo que había visto, tal parecía que la ciudad estaba abandonada, pero no deshabitada...

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