23 - Seré feliz desde las tres

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Historia y personajes: Garrick16

Escrito por: Raziel Cosme


Garrido se encontraba esposado de las manos y los pies en una celda de ColorCo. Le era difícil mantenerse consciente de lo que sucedía a su alrededor, cerró los ojos por el cansancio que sentía después de varias horas sin dormir, cuando un golpe de agua helada le borró la sensación de sueño. Espabiló y frente a él, el general Candor, envuelto en vendas y tratamientos, le miraba con una seriedad sepulcral, a su lado, un soldado bajaba el balde de agua, ahora vacío.

— Lamento la brusquedad, pero no sé que tanto confiar en usted.

Candor mostró en sus manos la gema de Garrido, haciendo que el luchador mirara por reflejo su cinturón vacío.

— Aunque no estoy seguro de su participación en mi rescate, no puedo evitar estremecerme al ver otra de estas gemas — Candor observaba con detenimiento la piedra —. Se dice que solo traen desgracias a sus portadores.

— No dude de ello — se burló Garrido mirando con terror como Candor colocaba su gema junto a la suya haciendo que ambas resonaran.

— Usted no debería tener una de estas — considero Candor—, señor Garrido.

El soldado se acercó al luchador y le quitó la máscara del rostro. Mostrando a un hombre cansado, con el rostro demacrado y con moretones y rastros de sangre aún en él.

— No esperaba menos de usted, Candor — sonrió Garrido con dientes ensangrentados y entreabriendo los ojos —. Aunque no esperaba que tuviera una de las gemas.

Candor miró las gemas, guardó la suya y puso la de Garrido en una mesa cercana.

— ¿Cuál es su posición en todo esto, Garrido? ¿Qué hace el líder de una farmacéutica entre los agrestes? — interrogó Candor.

— Ya sabe, me aburría en mi escritorio y decidí salir a tomar aire — se burló Garrido —, una cosa llevó a otra y heme aquí.

— ¿Cuál es su postura en esto? — insistió el general — ¿Está ayudando a los agrestes? ¿Qué papel tuvo en mi rescate? ¿Qué tanto sabe de todo esto? — los ojos de Candor atravesaban al luchador — por favor, no me obligue a torturarle — amenazó.

Garrido soltó una débil risa, tras lo cual, se quejó del dolor.

— Solo estoy de paso, tomando unas vacaciones del trabajo — respondió con burla dejando caer la cabeza.

— Soldado, desnude a nuestro invitado, revise que no tenga ningún arma o dispositivo.

El soldado sacó un cuchillo y sin vacilar, cortó toda la ropa del luchador, dejándolo expuesto y desnudo.

— ¿Por qué no responde, Garrido? — cuestionó Candor mientras el soldado examinaba con detenimiento al preso — ¿A quién protege?

— Sé menos de lo que cree — respondió con incomodidad al ser revisado con escrutinio — llegué tarde a la fiesta. Cuando me di cuenta, estaba en medio de una batalla llena de pelos y balas — explicó, tras lo cual, levantó la mirada y fijó sus ojos en los de Candor —. ¿Qué busca usted, Candor? Esta compañía ya tiene un alcance mundial, sus investigaciones están al día y si no mal recuerdo — Garrido hizo una pausa — ese tigre dijo que ustedes estaban creando agrestes.

El soldado interrumpió su tarea y confuso, miró al general sorprendido por las palabras. A punto de hablar, el comunicar de Candor y de todos los presentes en ColorCo se activo

— Se pide la presencia inmediata de todos los colaboradores para recibir la visita del general mayor Cobalto — Candor abrió los ojos, aterrado mientras escuchaba en su oído — El general mayor viene en su helicóptero y estará en diez minutos llegando al helipuerto. Repito...

Rakonto Drakone - FerozDonde viven las historias. Descúbrelo ahora