[･🌼･] GLAMROCK FRENNIE [･🌼･]

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El oso había regresado tarde de dar un concierto, estaba cansado y lo único que quería era dormir.

Al llegar a su casa se percató de que su pequeña familia estaba acostada en un sofá, lo habían esperado y posiblemente llevaban horas ahí.

Normalmente llegaba a las 10:30 pm pero este día su turno abarcó más de lo previsto, termino llegando a las 4:30 am. Ahora se sentía muy culpable, puesto que no había podido avisado de la situación a su pareja.

El mayor acercó a ver a su pareja, suspiro cansado para proceder a tomar primero a su hijo, lo cargo para llevarlo a su habitación. Al llegar a la habitación del infante, tuvo que tener cuidado para no pisar juguetes, al llegar a la cama del menor lo recostó con cuidado, lo arropó y finalmente le dió un beso en la frente.

G!Freddy: Descansa gregory, mañana no irás a la escuela, no cuando dormiste muy tarde hoy.

El mayor se retiró con silencio, si hubiera volteado se hubiese percatado de la sonrisa de el infante.

Al bajar de nuevo el mayor se acercó a su pareja, se arrodilló para poder despertarlo, movió muy despacio a el conejo mientras le hablaba en voz baja.

G!Freddy: Bonnie~ conejito, ya llegué, vamos a dormir.

Sin embargo no recibió respuesta, solo podía ver como su pareja se movía de un lado a otro en busca de comodidad.

G!Freddy: Bonnie, vamos, solo será para ir a la habitación, levántate.

Bonnie: Shhhh~ déjame dormir aquí gregory, ve a dormir que mañana tienes escuela, yo esperaré a Freddy.

El mayor suspiro enamorado, no insistió más al conejo pero si lo llevaría a descansar en un lugar más apropiado. Lo tomó entre sus brazos para después caminar a su habitación compartida, en el camino podía escuchar como el conejo soltaba pequeñas risas, suponía que estaba en un buen sueño. Al llegar a la habitación cerró la puerta con seguro, acostó a su conejo en un lado mientras el se costaba en el otro extremo, no le importaba acostarse con ropa del trabajo, simplemente quería dormir y ya.

Sin embargo, una voz dulce y somnolienta llamo su atención, habiendole abrir los ojos y embozar una sonrisa.

Bonnie: ¿Cómo está mi dulce oso? ¿Mucho trabajo hoy?

G!Freddy: Si, los cumpleaños y conciertos se juntaron, la familia de hoy pago extra por 6 horas más de fiesta así que chica y yo tuvimos que quedarnos extras.

La voz del mayor empezó a escucharse apagada y pesada, signos de el sueño, cosa que el menor percibió, por lo cual decidido se acercó a el oso para abrazarlo.

Bonnie: Debes estar agotado, ¿Porqué no duermes más esta vez? Quédate conmigo todo el día, no vayas a trabajar, reportate enfermo o di que te dió indigestión, diarrea o yo que se.

Aquellas excusas causaron que el mayor riera en unas cuantas carcajadas, pero paro al ver que el contrario hablaba enserio.

G!Freddy: Oh, está bien, si mi esposo demanda atención entonces no tengo de otra, tampoco es como que quiera hacer otra cosa, me quedaré.

Correspondió aquel abrazo para posteriormente darle un beso en la frente a el menor. Ambos cerraron los ojos y terminaron durmiendo.