Capítulo veintisiete

49 12 0
                                    


Fiona Felicci es internada en el hospital psiquiátrico perteneciente a la clínica Mayweather tras haber determinado que había intentado cometer suicidio y se encontraba con una profunda depresión que indicaba la necesidad de un tratamiento permanente.

Cari y Theo se negaron a ver a su madre, cosa que lastimó a Nico, pero tenía otros problemas de los cuales hacerse cargo.

Sin su madre siendo la fuente de ingresos, quedaban algunos ahorros y sus ganancias de Cupido que no eran suficientes para mantener la casa, ni el hospital de Fiona.

Siempre ha sido bueno en matemáticas, así que estaba quebrándose el cerebro en mi escritorio decidiendo qué hacer ya que ahora, oficialmente y sin quererlo, era el adulto a cargo de sus hermanos.

Dejé una taza de café negro humeante junto a él, y a modo de agradecimiento me dio un suspiro, sin desenfocarse de sus anotaciones.

No lo presioné, sé que cuando necesite hablar lo hará, y él sabe que yo estoy a su lado para escucharlo.

—Voy a reunirme con April —Le digo tomando mi bolso, revisando que tenga todas las cosas—. ¿Necesitas algo?

Niega en silencio, aun mirando los montones de números y anotaciones que tiene al frente. Quiero quedarme y ayudarlo, pero Dawn necesita que hable con April antes de la inauguración. Además, Nico no me dejaría ayudarlo.

Voy dejando la habitación cuando me toma del brazo de improvisto.

—Te amo —Me dice—, lo sabes, ¿cierto?

Mi interior se calienta con la sensación más bella e indescriptible, y tomo su rostro entre mis manos para besarlo.

No es un beso pasional, pero si uno cargado de emociones. Cargado de esa sensación que no logro describir en mi pecho.

—Por supuesto que lo sé, Nico —Me separo, sin aliento—. También te amo, demasiado.

—¿Más que los libros?

—No te pases —Advierto con diversión. Un brillo juguetón ilumina sus ojos por unos segundos pero luego vuelve a apagarse.

Temo nunca volver a ver ese brillo en él, pero nunca es demasiado tiempo, y Nico... Nico será capaz de superar esto.

—Acepto el segundo lugar —Besa mis nudillos—. Temía... Bueno, han sido unas semanas raras y complicadas, y quizás te he dejado de lado, pero no dejo de amarte. Quería recordártelo.

—¿Cómo quieres que te exija muestras de afecto cuando estas atravesando... Esto? —Sostengo su rostro—. Antes de novios, fuimos amigos, compañeros de toda la vida. Estoy aquí para ti, y estaré siempre. Nuestro amor no necesita pruebas porque es más fuerte que eso, ¿entendido?

—Cuando solucione todo, te llevaré a una cita.

—La estaré esperando —Dejo un beso rápido en sus labios—. Ahora me voy.

Asiente y yo dejo la casa, revisando tener todo en mi cartera.

Pronto estoy caminando hacia Amanecer luego de meses de no haber ido. De verdad espero encontrarme a Bianca, pero cuando llego descubro que Aline y su novio, Atticus, se están haciendo cargo.

—Salió con su novio —Me dice cuando pregunto por ella, luego de pedir un chocolate caliente—. Algo de ver películas Disney.

¿Y Rick sabrá que tiene novio? Porque hasta donde recuerdo, mi amigo tiene un crush enorme por Bianca.

Le agradezco por el café y voy a sentarme a una de las mesas del fondo, esa que siempre uso cuando vengo con los chicos, especialmente con Rick que parece tener una obsesión con este lugar.

Las Alas de Cupido (#1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora