𝖽𝗋𝗂𝗏𝖾.

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- ¿qué le dijiste a DoHa? ¡eres un mentiroso! - chilló la menor de los Han dando un golpe a su hermano en el brazo a lo que el mayor respondió con un gimoteo.

- tú dijiste que la invitarías a cenar. - se excusó mirando hacia otro lado mientras sobaba su brazo adolorido.

- ¡pero no esta noche! - chilló.

En cuanto Seojun había entrado a casa la había llamado por medio de gritos con desesperación.

Fue hasta que la menor salió de la lavandería respondiendo a los gritos de su hermano y ocasionando que este se callara de golpe y se tirara arodillado al suelo dramáticamente, su hermana lo observaba con extrañeza, Seojun era raro pero algunas veces exageraba.

El chico mullet juntó sus manos mirando a su hermana menor con preocupación y cerró sus ojos para después comenzar a hablar.

- Por favor promete que no te enojarás por lo que he hecho y no le contarás a mamá. - rogó.

Gowon frunció los labios cruzando sus delgados brazos por encima de su pecho.

- ¿Qué fue lo que hiciste, Seojun? - rascó su nuca soltando un sonido que dejaba ver la frustración en la de gafas.

Y era así como el mayor de los Han se encontraba sentado en el sofá mirando hacia el gran televisor, evitando la mirada fulminante de su hermana menor.

- Creí que Hana no te agradaba, ¿por qué pareces tan cercano a ella? - divagó curiosa.

Desde la última visita de sus amigas en la cual Hana había estado presente, su hermano lucía distante y cada diez minutos preguntaba a su madre si las menores ya iban a irse, lo cual molestó a ambas mujeres pues era muy grosero de su parte, pero el chico parecía bastante incómodo con la presencia de la pelinaranja y la pequeña Won.

El muchacho carraspeó tomando un cojín para jugar con este mientras pensaba qué responder a su pregunta.

- No somos cercanos. Y no me agrada. - dijo. - Pero al parecer a mamá sí y tú disfrutas mucho de su compañía. - Gowon asintió pues era verdad. - Además se ofreció a ayudarte con tus tareas, como en francés donde por cierto eres bastante mala. - rió haciéndola molestar.

- ¡claro que no! Soy muy buena en francés. Je ne pais le rat. - habló orgullosa en un tono fallido de lo que se suponía debía ser francés

La tuya por si acaso, pensó Seojun oprimiendo una risa.

- Pero...- continuó. - ¿Ella no tenía cosas que hacer hoy?- preguntó confundida, Seojun entró en pánico de inmediato y negó.

— No lo creo, ella no me dijo nada. — soltó con inocencia pero mentía, aunque no se sentía ni un poco culpable, bueno quizá sólo un poco.

Gowon asintió no muy confiada y se levantó de su lugar para dirigirse a su cuarto, Seojun frunció el ceño al escuchar la notificación de su móvil anunciando un nuevo mensaje.

Gogo.

Me debes una. :)

Se tiró al sofá ahogando un gruñido, Gowon no le hacía favores sin recibir nada a cambio.

( . . . )

— ¿él te invitó a salir? ¿de verdad? — gritó al otro lado del teléfono Lia con quien había estado hablando durante los últimos quince minutos.

𝘚𝘌𝘓𝘍𝘐𝘚𝘏.  [ EN EDICIÓN ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora