El corazón de Hana latía de manera desenfrenada mientras ponía la mano sobre su pecho recargando su cuerpo en la fría madera de la puerta.
Había llegado a casa finalmente y después de haber huido de sus abuelos quienes vieron a su pequeña nieta llegar con las mejillas sonrojadas y una sonrisa inocente deslizando por sus labios se sentían curiosos por saber dónde había estado la pelinegra y con quién.
Pasó la yema de sus dedos aún tibios por sus resecos y pomposos labios recordando cómo estos casi eran besados por Seojun, ¿qué habría pasado si la hubiera besado?
Hana sacudió la cabeza caminando hasta su cama para tirarse en esta mirando al techo, ella ni siquiera sabía lo que era un beso y no era algo de lo que se sintiera orgullosa, sino avergonzada.
¿Seojun realmente pensaba besarla? ¿y si sólamente era que estaban solos o demasiado cerca? Seojun no podía besarla, ni siquiera estaba interesado en ella, no eran cercanos, además ¿por qué querría alguien besar a la torpe y pequeña Do Hana?
( • • • )
La cabeza de Seojun se encontraba con un cojín encima mientras pataleaba al aire y soltaba un grito de frustración pues había espantado a DoHa.
Su corazón seguía latiendo con fuerza sólo de recordar la cercanía de su rostro con el de la linda pelinegra, aunque seojun tratara de evitarlo la atracción y curiosidad que sentía por la pequeña amiga de su hermana menor crecía y parecía que el jovén no podía poner un alto a aquello.
¿Por qué había pensado en besarla? era la pregunta que rondaba por su cabeza sin parar. de repente la imagen de hana apareció en la mente de Seojun robándole el aliento, ahí estaba ella con su sonrisa inocente y sus pelinegros cabellos que incluso cuando estaban fuera de su lugar cuando parecía que no había tenido suficente tiempo para peinarlo la hacían lucir adorable, con sus mejillas rosadas resaltando de su pálido y fino rostro.
Sin pensarlo una sonrisa deslizó por los labios de Seojun, ¿cómo podía alguien ser tan adorable y linda sin siquiera hacer el más mínimo intento? y aquella noche incluso lucía más linda que de costumbre tanto que para han fue casi inevitable no querer besarla pero era cobarde y temía al rechazo, porque era algo que no quería experimentar de nuevo.
¿Y si a Hana le gustaba alguien más? ella lucía tan feliz estando al lado de Minho, el pelirubio amigo de la jóven y seojun no era alguien tonto, sabía que lee veía a hana con un brillo especial en sus ojos, la miraba diferente al resto de las féminas del grupo de amigos y el que no quisiera ver aquello era porque quería hacerse el tonto. ¿y si Hana sentía lo mismo por el chico?
De repente la necesidad de compararse apareció en su mente de manera rápida, minho era un chico apuesto y hasta tierno, parecía un tipo frío al principio pero aún así era alguien que daba una buena impresión desde el principio, él y Hana parecían llevarse bastante bien con cualquier persona, aunque la conexión con su pequeña Hana era especial y todo el mundo lo sabía, era algo más que obvio.
Apretó la almohada con fuerza golpeándose luego con esta sintiéndose bobo, ¿Por qué había dejado ir aquella oportunidad? la única cosa que le preocupaba en ese momento era que DoHa probablemente se sentiría incómoda después de aquel bochornoso momento y pensar que esta no quisiera dirigirle la palabra de nuevo lo hacía sumergirse en un ataque de ansiedad.
Sus emociones eran algo que comenzaban a preocuparlo demasiado, Seojun era alguien tan débil e inseguro cuando quería a alguien.
Era Jueves por la mañana y las clases estaban por comenzar, DoHa no tenía idea de cómo pero había logrado levantarse de la cama después de haber dormido casi nada, aunque su humor era insoportable aquel día. No la culpen, no durmió ni un poco.
Dejó caer su mochila en el suelo y se sentó frente al taburete con cansancio, sólo tenía que aguantar un poco más.
Minho apareció por la puerta con una sonrisa de oreja a oreja caminando hasta la pelinegra dejando luego una golosina en su taburete con una pequeña nota que decía 'buenos días, Hani' la chica lo miró y agradeció en voz baja llamando la atención del pelirubio quien rápidamente supo que algo no estaba bien con la menor.
— ¿No pudiste dormir bien? — preguntó.
Hana asintió dejando caer su cabeza con suavidad sobre su libreta de física, Minho rápidamente llevó su mano a los cabellos de la chica comenzando a jugar con ellos suavemente.
— Se ve que no tienes el mejor humor hoy, ¿debería mantenerme distante? — la menor negó sin ganas y Minho sonrió, incluso cansada DoHana parecía el ser más tierno e inofensivo.
— Toma, bebe esto. — dijo sacando una leche de fresa de su mochila y una barrita energética, las favoritas de la jóven. Hana se reincorporó en su lugar observando con sus brillantes ojos al chico.
— ¿Por qué haces todo esto?— soltó de la nada con confusión.
Lee carraspeó de inmediato rascando su nuca con nerviosismo pensando qué debía responder a esa pregunta, ¿debía confesar sus sentimientos?
— ¡Buenos días, bestias humanas! — saludó con euforia Kumi apareciendo en el aula con Sana colgada de su espalda.
Ese par estaba tan lleno de energía incluso tan temprano por la mañana, increíble.
El rubio se incorporó en su lugar sacando sus cuadernos para deslindarse de aquella situación y esa pregunta que lo puso nerviosa de inmediato.
— ¡Hana! ¿Por qué no nos dijiste que estás saliendo con el hermano de Gowon? — atacó Sana sentándose rápidamente frente a la pelinegra.
Hana pestañeó aturdida con seis ojos mirándola fijamente, Kumi se sentó en el suelo justo al lado de la pelinaranja completamente interesada en la conversación al igual que Minho, quien esperaba una respuesta de la chica sentada a su lado.
— ¿Uh? — vaciló. — Nosotros no estamos saliendo...— negó dudosa desviando su mirada.
Las miradas sobre ella se volvieron curiosas, Lia también había llegado al aula pero al ver que se encontraban charlando no interrumpió, solamente tomó asiento mostrándose algo distante y extraña para ser Lia.
— ¡Mientes! Te vimos. — dijo Kumi señalando a su amiga con una sonrisa burlona.
En ese momento DoHa ya se sentía bastante incómoda, no había nada entre ella y Seojun. Aunque realmente le preocupaba lo que sus amigas habían visto, ¿y si Lía también sabía de ello?
Hana alzó la mirada encontrándose con la de Lia quien parecía perdida, en su propio mundo. Eso la preocupó más, ella no quería lastimar a su amiga.
Sólo deseaba poder escapar de aquella conversación lo más rápido posible, no podía creer que estuviera pasando un momento tan incómodo y que sus amigos estuvieran involucrados.
¿Por qué no sólo lo niegas y ya? pensó, pero ¿y si sí estaban saliendo? Hana había leído en internet algunas cosas sobre citas, suena bastante bobo si lo analizas pero la pequeña DoHa no tenía ni idea sobre cosas románticas, citas o chicos, no hacía más que visitar sus fuentes 'confiables' como tiktok, internet y revistas adolescentes.
— ¡yah! tan temprano y están cuchicheando.— se quejó Gowon sentándose frente a Lia y reprochando al par de pelicortas por estar casi encima de Hana cuestionando cosas.
Gowon sabía que algo sucedía entre su amiga y Seojun, así cómo también de los sentimientos que la castaña detrás suyo tenía por su hermano.
La de anteojos conocía a su hermano como la palma de su mano y estaba segura que este estaba detrás de la pelinegra, cosa que al parecer y según sus instintos era algo mutuo. Por lo cual siempre animaba a su hermano a que se acercara más a ella pero por otro lado se sentía culpable sabiendo que de nuevo había un triángulo amoroso en el cual su hermano estaba envuelto al igual que dos de sus mejores amigas, eso no anunciaba nada bueno.
¡hola hola hola! Al fin actualicé, estoy muy emocionada de ver que hay muchísimo apoyo a mi historia, no dejaré de agradecer eso. < 3333
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𝘚𝘌𝘓𝘍𝘐𝘚𝘏. [ EN EDICIÓN ]
أدب المراهقينDespués de que Han Seojun haya dejado ir a su primer amor, sintió que todo había acabado. ¿Qué pasará cuando conozca a Do Hana aquella noche donde sentía que no podía más? ❝ 𝗊𝗎𝖾́ egoísta, ¿𝗇𝗈 𝖼𝗋𝖾𝖾𝗌, 𝗌𝗎𝗁𝗈? 𝗏𝗈𝗅𝗏𝖾𝗋 𝗉𝗈𝗋 𝖺𝗅𝗀𝗎�...