¿Cliché? ||KTH|| ✔

Capítulo 33.

—Pequeña— entré en la habitación y vi a NamGi dibujando— ¿Qué dibujas?—

—No sé — respondió negando y volvió a mirar el papel— ¿Muchos corazones?— sonreí y acaricié su cabello.

—¿Para quien son?— me senté a su lado.

—Para papá — desvió su mirada y la oí aspirar su nariz.—Aún espero la carta de su explicación — dijo coloriando los corazones—¿Le mandamos una? Tal vez si ve mis corazones no estará molesto conmigo— mi ceño se frunzo.

—¿Por qué crees que papá esta molesto contigo?— asintió despacio.

—Yo se que papá me quiere, y la única razón entonces de porqué no vino fue porqué está molesto —

—Pues no es así mi amor, papá no está molesto contigo, además como podría molestarse con la luz de sus ojos que eres tú — besé su mejilla haciéndole cosquillas— Quiero enseñarte algo— me miró confundida y asentí, me levanté y extendí mi mano para ayudarla a levantarse. Ambas salimos de la habitación para ir a la sala la cual estaba decorada con varios globos rosados y blancos junto a aquel chico en medio de la sala con un peluche grande en sus brazos y el cartel detrás de él que decía Papá está aquí, mi princesa.

—¿Mami?—

—¿Te leo lo que dice?— asintió— Papá está aquí, mi princesa— su rostro mostró sorpresa y volteó a ver a Taehyung y soltó mi mano.

—¿Oppa?— se acercó a él.

—Perdoname, preciosa— fue de prisa hacia él y lo abrazó, Taehyung tuvo que soltar el peluche para poder abrazarla y alzarla en sus brazos. Sentí el llanto de mi niña y no pude evitar que mis ojos se cristalizaran también.

—No llores pequeña— trató de tranquilizarla y se alejó un poco de él limpiando sus mejilla.

—No me estás mintiendo ¿Cierto?— preguntó con su voz entrecortada y él negó.

—No, mi amor, nunca te mentiría —

—Dijiste que irías a mi escuela y no fue así — le soltó y Taehyung me miró.

—Papá, tuvo un problema, por eso no pude llegar a tiempo, por eso estoy aquí, y no volveré a irme nunca más —

—¿Nunca más?— negó.

—Nunca más— lo volvió a abrazar con fuerza y Taehyung me miró, extendió su mano y negué, este momento es de ellos dos.

—Que tal si celebramos este momento con chocolates— agregué y mi niña volteó a mirame para luego ver a Taehyung hacerle una mirada cómplice.

—¡Chocolate!— gritaron ambos y no pude evitar reír.

—Esperen aquí — fui hacia la cocina para preparar el chocolate.

Al final no tuve otra opción que aceptar ir a vivir con Taehyung, mi madre tampoco fue de darme tantas opciones, hay otras maneras en la cual Taehyung y NamGi pueden convivir sin tener que ser precisamente que vivan juntos.

A partir de mañana empezamos a empacar, ni mi madre ni yo queremos esperar a que lleguen a echarnos de aquí, no quiero que mi hija presencie eso.

—¡Mami!— NamGi llegó a la cocina y me mostró una muñeca — Es igual a mí — se señaló y asentí— Tengo otra, aparte de la de TaeSong Oppa— asentí y fue hacia la sala de nuevo junto a su padre.