28. Pensando en Sasuke

1.9K 212 24
                                    

La cama era suave, el olor que las mantas desprendían eran igual que las flores del jardín que antes poseía en su casa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

La cama era suave, el olor que las mantas desprendían eran igual que las flores del jardín que antes poseía en su casa. Un vaso de leche estaba colocado sobre la mesita de noche y al lado de este unos panqueques de acompañamiento.

No sabía que hora era, sin embargo al ver el sol pasar por la ventana, supuso que ya era de día. Naruto se sentía extraño y no sabía como agradecer todo lo que sus amigos hacían por él.

Para el rubio era difícil adecuarse a lo que para muchos era normal, habían pasado cuatro días y aún se sorprendía de ver el sol cada vez que despertaba por la mañana. Vivió mucho tiempo en oscuridad, olvidándose de aquella sensación que era poder acercarse a la ventana y visualizar el mundo de allá afuera.

Su cuerpo era cubierto por ropa que no le pertenecía y sentía las ganas de arrancarla de su cuerpo al saber que Sasuke se enojaría si lo viera así.

La verdad era que aún no podía dejar de pensar en Sasuke.

Su hermano estaba tan dentro de él, que le era imposible no sentirse inquieto al creer que pronto lo encontraría.

Cuando salía de la casa dirigiéndose al patio, creía que Sasuke lo sujetaría y lo metería nuevamente a casa.

Cuando se vestía, pensaba que Sasuke se acercaría por detrás y dejaría besos en su cuello como siempre lo solía hacer.

Cuando cerraba sus ojos para dormir, creía que al despertar, Sasuke estaría a su lado protegiéndolo en sus fuertes brazos.

Necesitaba a Sasuke....

Aunque sabía que estaba mal....

Su estómago se quejó debido al hambre y se acomodó sobre la cama para poder consumir su desayuno. Actualmente se encontraba en la habitación de huéspedes, que por este mes le pertenecía y en la casa de uno de los amigos de Shikamaru.

Chōji fue muy amable al dejarlo quedarse en su casa. El chico era un amigo demasiado cercano a Shikamaru, por lo tanto acepto tranquilamente hacerle este favor. Shikamaru y Sakura le dijieron que no podía quedarse con ellos, porque lo más probable era que Sasuke lo buscaría en sus casas.

Naruto agradeció por todo lo que estaban haciendo por él y en más de una ocasión intentó hacer algo por ellos.

Sin embargo ni siquiera podía abrazarlos.

Cada vez que Naruto intentaba acercarse a algunos de ellos, recordaba la imagen de Sasuke y las incontables veces que le dijo:

“Tus abrazos, tus caricias, tus besos solo me pertenecen a mí”

El rubio sabía que Sasuke estaba lejos, pero seguía teniéndolo tan presente que sentía que realmente estaba ahí junto a él.

Las lágrimas empezaron a llenar sus ojos y dejó su comida a un lado para poder cubrir su rostro. Sakura le dijo que lo que hacia su hermano no era para nada normal.

Pero nadie sabía que Naruto no sabía lo que realmente era normal.

Lo único que aprendió toda su vida fue estar junto a Sasuke. Y de alguna manera, depender emocionalmente de su hermano mayor.

El sonido de la puerta se hizo presente y una pelirosa entró debido a los sollozos que escuchó al pasar.

Sakura tomó asiento a su lado y esperó a que el menor se tranquilizara para poder hablar. No era la primera vez que veía a Naruto llorando, sin embargo no sabía exactamente la razón, solo llegaba a suponer que era debido a Sasuke.

—Tranquilo. —Musitó suavemente la pelirosa mientras estiraba una mano para consolarlo.

No obstante dejó caer la mano sobre la cama al saber que ante cualquier contacto, Naruto se alejaría como la primera vez que lo vió.

—Sasuke.... ¿Él está bien? ¿Hablaste... Con él? —Preguntó débilmente el rubio quitando lentamente las manos de su rostro.

Sakura vió como los ojos de Naruto se hicieron rojos debido al llanto y sintió una pequeña opresión en el pecho.

—No lo he visto. —Respondió Sakura. —Tampoco se como está en este momento...

Sakura sabía que era mal mentirle de esa manera. Sin embargo si le decía la verdad, existía la posibilidad de que Naruto quisiera volver a verlo.

Gracias a unos conocidos, sabía que Sasuke no estaba para nada bien. Su trabajo consistía en acabar con la vida de las personas que Kakashi le decía, a cambio de esto este último le daba buena paga reconociendo el esfuerzo que presentaba.

La primera vez que vió a Sasuke este parecía un niño en medio de adultos. Sin embargo el azabache rápidamente aprendió sobre armas y distintos métodos para ponerle fin a la vida de cualquiera persona. Lo que más le llegó a sorprender era lo sereno que Sasuke se veía cada vez que cumplía con su trabajo.

Kakashi pertenecía a una pequeña organización, la cual se encargaba principalmente en hacer tratos ilegales, teniendo varios hombres que se ocupan de matar a personas por dinero. Pero sin olvidar de no dejar ningún tipo de rastro.

Ella no era una santa, había hecho algunos tratos con Kakashi que afortunadamente no terminaron mal. Gracias a él es que conocía a Sasuke, sumando el hecho que Iban al mismo bar cada noche. Al tener 18, casi 19 años el azabache hacía un par de trabajos cada quince días. Sin embargo desde que Naruto se fue de su lado Sasuke aceptaba cualquier trabajo que tenían para él, subiendo el número de dos a seis.

Seis trabajos por semana era demasiado peligroso para un chico de su edad, además solo haría que la oscuridad en su interior creciera y dentro de poco nadie podría detenerlo.

—Termina tu desayuno. —Dijo la pelirosa en un tono suave mientras intentaba sonreír. — Ahora debes comer por dos no lo olvides.

Naruto asintió sin mucho ánimo y lentamente volvió a tomar el vaso de leche para beber un poco. Su abdomen no parecía cambiar aún, por un momento llegó a pensar que Sasuke tenía razón y realmente no estaba embarazado.

¿Y si Sakura le había mentido....?

💕

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

💕

PSYCHO // SasunaruDonde viven las historias. Descúbrelo ahora