Selena Morgan es una vampiresa de aparentemente dieciocho años, pero con ella esconde un pequeño, gran, secreto, para poder protegerla su madre y su padre la escondieron del mundo con ayuda de su tío y un sobrino.
Pero una muerte inesperada llevará...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Capítulo 18: "Dama de honor"
Cierro la puerta de mi armario mientras que me coloco mi pijama que contiene a Freddy Mercury en el frente, también llevo mis pantuflas, puede que sea mediodía, pero no quiero moverme el día de hoy de mi cama.
Anoche con Emmett llegamos muy tarde de Londres y hoy he dormido mucho tiempo, por lo que salto a mi cama y prendo mi televisor para poder ver alguna serie o película interesante.
Pero justo antes de que pueda darle play a una película de terror escucho como golpean la puerta de mi cuarto, por lo que, rodando los ojos, me levanto y camino perezosamente hasta esta, al abrirla me encuentro con Rosalie que tiene comida y con Jasper a su lado.
—Detalles de Londres —La rubia dice entrando en mi cuarto con la bandeja de comida sin dejar que diga nada.
—Y no muchos por favor, tengo que ver a Emmett a los ojos luego —Jasper se adentra igual que Rose y me quedo yo sola en la puerta.
—Claro chicos, no estaba haciendo nada interesante —Murmuro sarcástica mientras que cierro la puerta de mi cuarto y voy con los dos rubios de mis amigos.
—Freddy Krueger puede esperar —Rosalie dice y me tiende una bolsa de chocolates, por lo que los tomo y me siento en la cama con las piernas cruzadas. Comienzo a comer todos los chocolates bajo la atenta mirada de mis dos amigos.
—¿Qué? —Les digo mientras muerdo uno.
—Queremos saber ¿Cómo ha sido el viaje con nuestro hermano? —Rosalie me mira bastante emocionada porque le diga los detalles.
—Ha sido lindo —Sonrío recordando todo el viaje con Emmett —Hemos recorrido todo Londres, lo he llevado a lugares a los que solía ir con Mike, especialmente a una cafetería donde tuvimos que fingir que tenía un mal estar estomacal para que no consumiera —Ellos sonríen tiernos por lo que comento.
—¿Cómo ha visto tu casa? —Jasper pregunta y yo me encojo de hombros.
—Sí todos sabemos que es una mansión antigua, nada comparado con la casa Cullen, pero quedó impresionado, igual que Bella.
—Nunca vi tu casa —Rosalie dice y Jasper niega, él tampoco.
Rápidamente abro el cajón de mi mesita de noche y comienzo a revolver todas las cosas que se encuentran ahí, quito el cargador de mi computadora y me encuentro con una fotografía en un cuadro, por lo que la quito y se la muestro a Rosalie, ella la ojea con Jasper a su lado.
—Esa era yo, en 1910 —Sonrío viendo mi enorme vestido rojo y a mí con un peinado de la época —Obviamente ese es mi hermano, Mike —Mike sale con un traje negro, pero bastante elegante —Y la fotografía fue tomada por nuestra madre frente a nuestra casa —Miran el gran edificio detrás de nosotros.
—Es muy grande tu casa —Asiento.
—Tiene más de dos siglos —Explico y sigo comiendo.
—¿A dónde fuiste con Emmett? —Jasper me dice y yo miro a mi amigo.
—Especialmente a un centro comercial, sabes que es muy lindo —Asiente mi amigo —Y mejor cuando él me compró comida —Ambos se ríen.
—¿Y lo han hecho? —Rosalie dice y yo me atraganto con el chocolate antes de verla con los ojos abiertos, también veo a Jasper que se encuentra igual de expectante que la rubia.
—¿Podemos dejar mi vida sexual fuera de esta charla? Es incómoda —Pido.
—No, ahora dime ¿Lo hicieron sí o no? —Jasper dice y yo enarco una ceja.
—Sí —Con solo eso Rosalie chilla y Jasper sonríe, pero yo le arrojo un almohadón a mi amiga para que se callara — Quiero que nuestra vida sexual quede entre estos muros, si mi hermano sabe querrá matar a Emmett y no saben lo malo que puede ser mi hermano a veces —Ambos asienten.
—¿Y cómo fue? —Rosalie quiere indagar, pero antes de que pueda contestar la puerta vuelve a sonar por lo que me levanto feliz del momento incómodo.
—Debo abrir —Finjo estar triste.
—Te salvó lo que sea que haya del otro lado de la puerta.
Me rio y cuando abro la puerta me encuentro con Edward y Bella, ambos se encuentran tomados de la mano mientras que me ven reír.
—Vaya te encontramos feliz —Edward se ríe y yo asiento.
—¿Qué sucede? —Le pregunto.
—¿Podemos pasar? —Cuando Bella pregunta eso asiento y me hago a un lado para poder llegar nuevamente a mi cama.
Ellos cierran la puerta y noto el gesto de desagrado de Rosalie, pero solamente me acomodo entre todo el chocolate, el aroma de Bella es muy dulce, es verdad, pero el hecho de que tenga chocolate frente a mí hace que encuentre algo más dulce, azúcar con cacao.
—¿Qué tenemos aquí? Convención de rubias aparentemente —Edward dice y los tres rubios nos giramos a verlo.
—¿Y eso qué? —Jasper dice.
—Eso es envidia porque tu cabello parece a un ken inmortal —Me rio y él también.
—Además, anoche volvió de viaje, debemos indagar un poco —Rosalie me toma de la mano y noto como Bella se aproxima con timidez.
—Pero eso no importa —Miro a Rosalie para que me siga la corriente, ella solamente rueda los ojos —Díganme ¿Para que necesitaban hablar conmigo? —Les pregunto y Edward se sienta en mi cama.
—Saben que nos casaremos —Los tres asentimos —Será en el patio de casa porque Alice lo está organizando así —Nuevamente asentimos — Saben que hay muchas cosas para hacer —Los tres parecemos unos muñecos que saludan por asentir y además somos todos rubios —Saben...
—Ay sí Edward, sabemos que se casarán, ve a lo importante por favor, odio la intriga —Le digo y él se ríe por mi comentario.
—Bella —Todos miramos a la castaña que suspira.
—Selena, Rosalie —Nos mira a ambas —Alice será mi dama de honor, pero quisiera, mejor dicho, me gustaría, que ustedes también sean mis damas de honor —Cuando dice eso yo abro los ojos como platos, la rubia a mi lado no puede creerlo.
—No es por ser grosera, pero ¿Por qué? —Le pregunto a Bella mientras que apretó la mano de Rosalie para que pueda volver a reaccionar.
—Porque a pesar que no seamos unidas, son lo más cercano a amigas reales que tuve —Ella nos dice y yo me levanto rápidamente de la cama para abrazarla, al hacerlo noto que está tensa, pero a los segundos ella se relaja y me abraza.
—Claro que lo haré, con gusto —Me separo con una sonrisa que ella me devuelve.
Ambas nos giramos a Rosalie que se encuentra seria.
—Por favor Rose, ella ama a Edward —Le pido y Rosalie quejándose asiente, por lo que sonrío —Seremos tus damas de honor —Miro a Bella que asiente.
—No me hagan utilizar nada de color anaranjado porque me retractaré —La rubia de mi amiga dice y yo me rio.
—Y yo soy el padrino de bodas —Jasper dice orgulloso y yo me rio por lo que dice.
Los dos castaños salen del cuarto tomados de la mano dejándonos a los rubios solos, el trío de oro.
—Ahora sí, no hay excusa —Rosalie dice y yo me siento con las piernas cruzadas.
