Capítulo 21: "Diamantes"
Llego al centro de la pista de baile y Emmett viene detrás de mí, a mi lado Fred me cuenta un poco de su vida antes de Rosalie, mientras que la rubia lo escucha atentamente.
—Miren —Emmett nos señala a Alice hablando con los amigos de Bella, los molestos —Por lo que oí esperaban más de la boda —Emmett me dice y yo frunzo el ceño.
—Lo preparamos todo en un corto lapso de tiempo, que no se quejen, quiero verlos a ellos armar una boda en tres meses, aguantar a Alice quejándose y dejar que ella eligiera este vestido, los voy a hacer colador —Iba a ir a hablar con ellos, pero rápidamente Emmett me toma de la cintura impidiendo que vaya a hablar con los humanos.
—Calmada fiera —Me dice divertido y yo lo miro fijamente a los ojos.
—Pero...
—Pero nada, ahora vamos que debemos sentarnos —Suspiro frustrada y Rosalie se va con Fred, pero antes de que yo me pueda ir mi compañero me habla al oído —Me gusta que seas enojona, pero creo que hoy no debemos interferir en la boda —Asiento e iba a avanzar, pero su mano en mi vientre me impidió el paso —Por cierto, me encanta como te queda el vestido.
Sonrío orgullosa y me encamino a la mesa donde me siento al lado de Jasper que tiene a Alice a su lado, del otro lado de la mesa se encuentra mi hermano, Rosalie, Fred y otros humanos que no conocemos, pero solamente veo que en mi plato hay un chocolate, al igual que en el de todos, por lo que lo tomo para comerlo mientras que veo cómo se preparan todos para los discursos, todos menos yo.
—Voy primero —Emmett me deposita un beso en los labios antes de caminar rápidamente al escenario con una copa de champagne en la mano, por otro lado, yo tomo una que ya estaba en la mesa.
Escuchamos como un dedo golpea el micrófono y vemos a Emmett listo.
—¿Se escucha? —Nos pregunta y todos asentimos —¿Hola? —Todos lo miramos atento, cuando nota toda la atención sonríe, una maravillosa sonrisa que hace que me derrita internamente —Quiero proponer un brindis, a mi nueva hermana. Bella, espero que hayas dormido en estos dieciocho años, porque no dormirás por un rato —Noto como todos los humanos se quedaron confundidos, pero yo solamente pude reírme de lo que dijo.
Tomo un poco de mi champagne mientras que el resto da sus discursos, especialmente cuando habla Charlie, que me hace reír porque lo amenaza de manera directa a Edward, René canta una canción para Bella, Alice le dice que cambiará su sentido de la moda, Jesica la quiere opacar por lo que dijo, obviamente Esme se esmeró tanto en hacer un discurso que emocionó a todos, en especial a mí.
Pero cuando habla Edward yo hago un pequeño puchero, porque me identifico demasiado con lo que dice y con Emmett, él me toma de la mano con cariño mientras que miro al castaño que hace que mi corazón da un vuelco, todos chocamos nuestras copas felices.
Después de la comida pasamos todos a la pista de baile, mientras que mi compañero me abraza y me guía por toda la pista nos miramos atentamente a los ojos.
—¿Sabes? Siento que fui afortunado —Me comenta y yo frunzo el ceño.
—¿Por qué afortunado?
—Antes creía que el amor no era para mí, que estaba destinado a estar solo por el resto de la eternidad —Sonríe mientras que pasa sus brazos por mi cintura —Y ahora me di cuenta que esto es para siempre, que tengo a la persona que amo a mi lado.
Ambos sonreímos y de la nada la música es más rápida, por lo que con uno de sus brazos rodea mi cuerpo y me eleva del suelo girando sobre nosotros mismos, una carcajada sale de mis labios al igual que una sonrisa de los suyos, cuando me deja en el suelo sonriente acaricio su mejilla.
—Como dijo Edward, esto es para siempre.
La música se detiene y yo me giro confundida al notar a todos extraños, veo al dj que me mira fijamente y frunzo el ceño, mi mirada rápidamente va a mi familia que se encuentran ¿grabando?
Pero la voz de Emmett hace que me gire y lo vea fijamente.
—Hace tiempo que quería hacer esto, pero no encontraba un momento justo para poder decirlo, con muchas cosas que pasaron últimamente —Señala con los ojos a Bella que se ríe al pensar en la batalla que tuvimos, y yo también —Pero me encuentro aquí, Selena Morgan para decirte lo que siento, para poder expresarme, frente a todos.
—¿Qué sucede Emmett?
—Cómo te había mencionado con anterioridad, no creí que el amor era lo mío, creí que estaría solo para toda la vida, toda la eternidad, pero cuando llegaste cambiaste todo lo que antes creía, cambiaste mi forma de ver al mundo, cambiaste mi vida —Sonrío con un revoltijo en el estómago al oír todo lo que dice, una pequeña lágrima brota de mis ojos haciendo que la escena sea más tierna —Cambiaste todo, para bien, con tus tácticas de combate, con tu hermoso sentido del humor, con tu amabilidad y tu debilidad por el chocolate —Una pequeña carcajada sale de mis labios.
—Eso es verdad —Mike dice a un lado haciendo que todos se carcajeen.
—Pero a pesar de todo eso, tú te volviste mi debilidad —Otro revoltijo en el estómago al oír eso de sus labios —Y por eso quiero que tengamos un futuro juntos, con promesas, con una vida por delante, con una familia. Quiero estar contigo por el resto de la eternidad.
De la nada veo cómo se arrodilla en el suelo y suspiro sabiendo lo que significa eso, sonrío aún más por lo que todos me miran atentos, de su bolsillo noto que saca una cajita de terciopelo negra.
—Quiero que tengamos un para siempre juntos, una eternidad juntos —Literalmente, abre la cajita dejando ver un hermoso anillo en ella de diamantes y yo siento como las lágrimas se van acumulando en mis ojos —Selena Morgan ¿Quieres hacerme el honor de ser mi esposa? —Al escuchar eso todos se quedan en silencio esperando que diga algo.
—Claro que sí Emmett —Al decir eso todos aplauden mientras que mi compañero se levanta y me coloca el anillo de diamante en el dedo anular, luego me deposita un beso en los labios que hace que todos aplaudan más fuerte —No esperaba esto —Le murmuro cerca de sus labios, su sonrisa se encuentra intacta, parece un niño con un dulce.
—Te amo, juro que te amo —Me murmura y vuelve a besarme.
—Te amo, Emmett —Le digo entre besos.
—Bueno, es mi hermanita, ojo —Mike anuncia y ambos nos giramos para ver como todos los integrantes del clan Cullen se aproximan felices, pero especialmente veo que no hay una señal de sorpresa en sus rostros.
—¿Sabían de esto? —Todos asienten, incluyendo a Bella.
—Le ayudamos a armar todo —Edward comenta y miro a Emmett con una sonrisa.
—Genial, ahora solo queda Mike —Jasper golpea la espalda de mi hermano que mira al otro lado de la pista, y ahí veo a Kate mirándonos fijamente.
—No falta mucho —Edward comenta y yo lo miro confundida —Mike encontró a su compañera de por vida.
Entonces todos los Cullen ya encontramos nuestros compañeros de por vida, abrazo a Emmett con fuerza, mi prometido, hasta que escuchamos que Bella y Edward deben irse, por lo que el pelinegro ayuda a montar todas las maletas en el carro mientras me despido de Bella.
—Ten cuidado, hacer el amor con un vampiro es un tanto brusco —Le informo y ella me mira con confusión.
—¿Cómo brusco?
—Tranquila, es bueno, pero no miden su fuerza, solo eso.
Asiente y me abraza para finalmente tomar la mano de Edward y salir de la casa entre todos los invitados que les arrojan arroz y les dan sus felicitaciones, algún día haremos eso con Emmett, salir de esta casa siendo marido y mujer.
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Un pequeño gran secreto │Emmett Cullen │
أدب الهواةSelena Morgan es una vampiresa de aparentemente dieciocho años, pero con ella esconde un pequeño, gran, secreto, para poder protegerla su madre y su padre la escondieron del mundo con ayuda de su tío y un sobrino. Pero una muerte inesperada llevará...