what's is love ✧ knowmin

Capitulo 5

Aquel día no era capaz de sonreír, se sentía muy triste, aunque tal vez para otros pudiese ser una exageración, para él no lo era, en verdad ese brazalete era muy especial, sentía que realmente brillaba como la luna, pero ahora que lo había perdido, se sentía él mismo tonto que todos podían humillar.

— Hey, Seungmin— le saludó Felix mientras ponía una mano alrededor de su hombro— Vendrás a mi fiesta, ¿verdad?

— Claro — respondió sin ánimos.

— ¿Por qué tan apagado? — frunció los labios— Si no quieres venir, bien, no vengas.

—No es eso, es qué no me siento muy bien hoy— aferró los libros a su pecho— Pero si, quiero compartir contigo esta noche.

—No olvides tu regalo— pellizco la punta de su nariz para después marcharse dejándole solo.

Claro que no olvidaría su regalo, de hecho, hace una semana atrás, se había pasado casi una hora buscando un regalo para él, no sería capaz de olvidarse del cumpleaños de su mejor amigo... aunque él sí lo había hecho con él suyo.

En el fondo de su corazón sabía que Felix no era en realidad su mejor amigo, jamás podría serlo de un chico tan popular como lo era él, sus personalidades eran totalmente distintas, no encajaban en nada. Pero Seungmin quería seguir manteniendo esa ilusión, pues así no se sentía tan solo.

—¡Fíjate, imbécil! — le ofendió un chico cuando sin querer chocó contra él— ¿A caso esos malditos lentes no te dejan ver bien el camino?

—L-Lo siento — se disculpó mientras recogía sus libros que habían caído al piso.

— Patético— le dio un manotazo en la cabeza para después reírse junto a sus amigos e irse.

Lo único que él hizo fue acomodarse el cabello y caminar lo más pronto posible hacía su casillero. Estaba tan acostumbrado a que los demás le hicieran cosas como esas, que ya no le importaban o al menos quería aparentar que no.

Minho iba saliendo del baño cuando observó a Seungmin y rápidamente se escondió para no ser descubierto mientras lo miraba.

— ¿Pero, qué? — se preguntó mientras sostenía el brazalete entre los dedos y no podía creerlo, nunca lo perdió, en realidad lo había dejado en su casillero— ¡Que suerte tengo!

Sonrió tanto que hizo que sus pequeños ojitos se hicieran en una rayita y Minho no pudo evitar sonreír también, al verlo así de feliz y de saber que en realidad apreciaba las cosas que le regalaba anónimamente.

— Hola, Minho— se apareció Hyunjin a su lado— ¿Espiando a Kim?

—Claro que no — respondió de mala gana— ¿Por qué espiaría a ese nerd?

—No lo sé, dímelo tú.

— Nada que ver— pasó por su lado golpeando a propósito su hombro y Hyunjin solamente rodó los ojos para después acercarse a Seungmin.

—Buenos días.

—Muy buenos— contestó mientras trataba de ponerse el brazalete.

— Oh, ¿necesitas ayuda?

— Si, lo siento— contestó apenado mientras le daba su mano— Soy un poco torp...

No pudo terminar la frase porque él chico se lo había impedido poniendo una mano sobre su boca —No lo digas más, no eres torpe, eres muy inteligente — Seungmin lo miró asombrado mientras él le terminaba de poner el brazalete.

—Gracias, Hwang Hyunjin— se sonrojó por la pena.

—Es muy lindo — le sonrió— ¿Dónde lo compraste?