what's is love ✧ knowmin

Final

Viernes, 3:00 p.m

Instituto -XX-

Graduación del último año.

El tiempo corría velozmente y no se detenía para esperar a nadie. Parecía que había sido ayer cuando por primera vez entraron a la preparatoria, pero sin embargo no era así, eso había sucedido hace tres años atrás. Para algunos, la preparatoria era la mejor etapa de sus vidas; pues podían vivir su adolescencia al máximo, teniendo muchos amigos, asistiendo a fiestas y tener noviazgos cortos, pero para otros no era una etapa tan buena y Seungmin estaba de ejemplo.

Había recibido tanto acoso desde el primer año, a diario recibía insultos u ofensas de parte de sus compañeros, tanto que había llegado el punto que se había acostumbrado a eso; al dolor. Sinceramente jamás se imaginó que uno de esos chicos que solía molestarlo, terminaría siendo la persona que más quería en el mundo y su precioso novio. Pero la vida si que te daba sorpresas muy grandes, a veces las que piensas que son imposibles.

Viéndolo desde otro punto, Seungmin podían parecer una persona masoquista o fácil de manipular por estar con el chico que muchas veces se burló de él, incluso sonaba extraño decirlo; «mi novio antes era mi acosador»... si, era muy raro. Pero la verdad es que no le importaba, Minho le demostró quererlo desde el momento en que le confesó su amor, no hubo algún día que se atreviera a hacerle daño después de aquel día y era por eso que le había confiado su corazón.

Porque le demostró que era capaz de cuidarlo y si, así lo había hecho hasta el presente. Por eso nada le haría cambiar de opinión; estaba felizmente enamorado de su novio.

— ¡Felicidades a todos los graduados de este año! —habló el director a través del micrófono— Nos veremos en la noche en el baile, es todo.

A todos los alumnos ya les habían entregado su certificado, por eso, cada quien se encontraba con su familia celebrando su logro de ese momento. El señor Lee había asistido aquel día, pues era algo muy importante en la vida de su hijo y debía estar ahí para apoyarlo, sin embargo también para otro motivo... si, había estado pensando mucho en su relación con Seungmin.

— Felicidades hijo, me llenas de orgullo —lo abrazó— Te quiero mucho, nunca lo olvides.

—Gracias por venir, papá.

—No iba a perderme la graduación de mi único y adorado hijo —sonrió— ¿Qué clase de padre me crees?

—Tienes razón —sonrió también.

Aún no se le olvidaba el hecho de que no había aceptado su relación, pero no iba a odiarle solamente por eso. Era su padre y lo amaba, no importaba lo que le había dicho ese día que le presentó a Seungminnie.

— Hijo, lamento haber actuado mal ese día —se disculpó— Sólo que fue algo muy repentino para mí, ¿sabes? Pero quiero que sepas que si, cuentas con todo mi apoyo.

Minho abrió los ojos de más por la sorpresa que se llevó y una gran sonrisa se dibujo en sus labios — ¿De verdad, papá?

—En serio, prometo hacer lo posible para adaptarme — entendió que si su hijo era feliz así, él debía apoyarlo— Y tu novio es bienvenido en mi casa.

— ¡Muchas gracias, papá! —volvió abrazarlo con todas sus fuerzas.

Ahora si, ¿qué más podía pedir? Al parecer ya lo tenía todo lo que necesitaba para ser feliz.

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Eran las siete de la noche y Seungmin ya estaba listo para ir al salón donde se realizaría el baile de graduación. Su madre le había llenado de mil halagos y de fotos, estaba tan orgullosa, contenta e ilusionada con el hecho de que su bebé pronto sería un universitario. Ella realmente había hecho un buen trabajo sola, era una mujer valiente y digna de respeto.