Umbrella (Felinette Miraculous AU)

Día 5: Dulce

Mientras la noche caía, Felix había intentado mantener su mente alejada de esos pensamientos tan extraños sobre Marinette. Se dedicó en ayudar a organizar su fiesta sorpresa, había contratado una empresa de Catering que sirviera canapés y bebidas durante el inicio, antes del "descontrol" que sus amigos prometían. Incluso supo que Tom y Sabine estarían haciendo su pastel de cumpleaños, patrocinado por Chloe Bourgois.

Los primeros en llegar, además de Luka, Claude y Nino que ya se encontraban ahí desde temprano, fueron unos compañeros de la facultad de derecho, llevaban botellas de alcohol con moños de regalo. Qué novedad.

La música empezó con un ritmo tranquilo, Nino quería ambientar el lugar poco a poco, él insistía que no puedes poner la mejor música y la más bailable al inicio. Una cantante nueva sonaba por los altavoces, y aunque Felix no era fanático de ese tipo de música, disfrutó de su rasposa voz.

La gente seguía llegando, algunos lo felicitaban, otros iban como acompañantes y solamente le sonreían. A Felix le daba igual. Pero se encontró volteando hacia la puerta en más de una ocasión, esperando ver un cabello azulado asomarse, pero no sucedía.

El reloj de su Apple Watch marcaba 22:35 hrs cuando finalmente la vio llegar. Su corazón se detuvo de una forma tan extraña, como la vez que le dio un ligero beso en la mejilla y lo llamó "gatito". ¿Qué le pasaba con esa chica?

Marinette usaba un vestido holgado, unos centímetros por encima de las rodillas, era de un color rosa claro y tenía algunas catarinas bordadas, su cabello, como era normal desde hacía un tiempo, se encontraba suelto y largo, cayendo por la espalda y moviéndose con el aire como si danzara. Sus ojos se encontraron con los de Felix y una sonrisa enorme iluminó su cara.

Felix deseó con todas sus fuerzas poder mantener esa sonrisa para siempre.

Ella se acercó a él, acompañada de Alya, la novia de Nino. Y en sus manos traía el pastel de T&S, eso explicaba la hora a la que habían llegado.

Cuando estuvieron lo suficientemente cerca, Marinette acortó la distancia de un pequeño salto y se colgó de su cuello, dándole un abrazo que invadió sus fosas nasales de un delicioso olor a fresas.

-¡Feliz cumpleaños!- gritó para hacerse escuchar con la música, aún sin romper el abrazo.

Felix la apretó un poco más contra su cuerpo y respiró profundamente su aroma. De verdad era exquisito.

Finalmente Marinette se separó y le entregó una caja de regaló, sin dejar de sonreír y con la mirada expectante. Felix se percató que Alya ya iba rumbo a la cabina que habían montado para Nino.

-Te dije que sin regalos- arqueó una de sus cejas.

Marinette bufó sin perder su sonrisa: - Dijiste que no comprara un regalo, pero ese lo hice yo.

-¿Qué? ¿Cuándo tuviste tiempo de hacer un regalo?

-Eso no importa, ábrelo- le colocó la caja en las manos.

Con Dj Snake y Justin Bieber de fondo, Felix tomó la mano de Marinette y la condujo hacia un lugar menos abarrotado de gente.

La caja de regalo estaba perfectamente envuelta en un papel metálico negro con un gran moño color verde limón que Felix dudaba, fuera comprado, se veía hecho a mano. Con cuidado lo fue retirando, a la vez que despegaba las solapas de la envoltura para no romper el papel. Era muy meticuloso en algunos aspectos. Tal vez en todo.

Dentro de la caja, encontró confeti de colores y serpentinas que envolvían una pieza de ropa confeccionada a medida para él. Era un suéter de algodón en color negro, con cuello de tortuga y detalles en verde y dorado. Era una prenda que no necesitaba decir su nombre en letras gigantes para saber que había sido hecho para él y para nadie más.