Querido Mimic:
Hoy en día no se puede uno fiar ni de sus mejores amigos. ¿Qué por qué? Todo empezó con una terrible discusión entre Denki y yo, debido al pequeño demonio al que nunca se le ocurría nada bueno.
-Venga, Izu, no te pongas así...
Denki, como siempre trataba de restarle importancia a los líos en los que solía meterme su hermano pequeño.
-¡¿Qué no me ponga cómo?! -grité.
-Pues así de alterado -dijo, con un tono calmado que avivó mi enfado.
-¡No os soporto, ni a ti ni al niño! ¿Te das cuenta de la gravedad del asunto? ¡Podrían haberme despedido!
-Bueno, pero no lo han hecho. Tú mismo has dicho que tu jefe no se lo ha tomado tan mal.
De hecho, su reacción me había sorprendido. Se había tomado aquel suceso con humor. A mí costa, eso sí.
-Pero ¿y si...?
-¿Y si...? ¡Venga, Izu, que no ha sido para tanto! -Cuando Shokko salió del cuarto en el que estaba castigado, Denki lo señaló con un dedo- ¡A tu cuarto! Luego hablaremos seriamente.
Shokko me dedicó una mirada resentida y cerró de un portazo.
-¿A ti te parece lógico que un crío de siete años se escape de la ludoteca y consiga llegar a mi trabajo?
-Siempre ha sido muy espabilado para su edad, lo habrá buscado en GxxgleMaps.
-¡Le podría haber pasado algo! Tú hermano necesita disciplina.
-Ahora que lo dices, debería poner una queja a la ludoteca. Se han disculpado, pero al pobre Shokko le podría haber sucedido algo terrible.
Me llevé las manos a la cara, sin dar crédito. Si existía alguien en el mundo capaz de darle vuelta a la tortilla, ese era mi amigo.
-No puedes echar la culpa a los demás de lo malcriado que está tu hermano.
Se hizo el tonto mientras comenzaba a marcar el número de la ludoteca.
-No se trata de un problema de obediencia, sino de responsabilidad. Al estar bajo su tutela ellos debían...
Le quité el teléfono de la mano.
-Empieza tú a asumir responsabilidades. Por mi parte, es la última vez que soporto otra de las salidas de tu hermano. Y no me digas que son cosas de críos. Los niños normales se pelan por el columpio en el parque. No meten animales a la nevera, ni te esconden la ropa interior, ni tiñen tu camiseta favorita de rosa porque les da la gana, ni...
Para enumerar todas las trastadas de Shokko habría necesitado varios días. Siempre se repetía la misma historia. Los padres de Denki le encasquetaban al pequeño, con lo cual me lo encasquetaban a mí también, y Shokko nos hacia la vida imposible.
Aquel niño estaba pidiendo atención a gritos.
-¿Sabes? Hoy deberíamos salir a divertirnos. Conozco a una buena canguro de confianza.
-Es lo último en lo que estaba pensando.
-Por eso mismo -insistió, arrastrándome hacia el baño.- ¡Vamos, Izu, se te está poniendo cara de seta! ¿Cuándo fue la última vez que echaste un polvo?
-¡Y a ti que te importa!
-¡No me digas que Hitoshi fie el último tío con el que te acostaste!
En realidad, había sido el único hombre con el que lo había hecho.

ESTÁS LEYENDO
My Boss? No!
FanfictionIzuku es un joven un poco desastre, recuperandose de un ruptura con su novio de siempre, su familia un poco inestable. Al menos tiene un gato y un nuevo trabajo, que sería perfecto si no fuera por su nuevo jefe: Mr. Smile". Pareja: Katsudeku Género:...