Meilin piensa que tiene una buena vida pero todo se vuelve extraño cuando comienza a sentirse rara alrededor de su mejor amiga.
Pero las cosas se podrían peor poco a poco gracias a su mamá.
• Mei x Miriam.
• Shipp lésbico.
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La comida ya estaba lista, los platos favoritos de Mei en la mesa, ella se moría de ganas por comerlos pero sentía un hueco en su estomago.
Ming se sentó con Jin a su lado al igual que Mei con Miriam al lado. La invitada agradeció una vez mas y a pesar de que no habían dicho mucho, el ambiente se mantenía tenso e incluso incomodo. Miriam intentaba ignorarlo, no hubiera podido imaginar que tuviera algo que ver con ella.
Al lado, Mei sacudía su pierna debajo de la mesa nerviosa por la situación y mil escenarios desastrosos en su cabeza, moviendo la comida de su plato sin comerla.
Y obvio su mamá lo notaria. — Mei-mei ¿No vas comer?
Mei respiró profundamente, nada podía salir tan mal, se metió una cucharada a su boca y masticó pesadamente, la mayor parte de la cena fue silenciosa y así era mejor porque luego el tema de conversación llevo por otro lado la cena.
— Y bien niñas. — Ming comenzó a hablar. — ¿Cómo va la escuela?
Mei suspiro, tranquilizando su cuerpo antes de responder. — Bien mamá, nada nuevo.
— ¿Hoy tuvieron mucha tarea? ¿O que sucedió?
Mei no quería decirle que parte de las razones por las que Mir había venido era para pasarle una clase que se había perdido, ella enloquecería.
— No es eso señora Lee. — Explicó Miriam, salvandola como si se comunicaran telepáticamente. — Mei solo me estaba ayudando a entender una clase anterior de matemáticas.
Ming asintió entendiendo. — Supongo que no debes ir tan bien en la escuela ¿Verdad?
Miriam se sintió algo extrañada por ese comentario, sintiendo ligeramente una mala intención, aún así, decidió convencerse de que solo era una pregunta inofensiva y que realmente no era nada en su contra.
— Mis notas son buenas. — Respondió orgullosa de si misma. — No tan buenas como las de Mei porque los números me cuestan un poco mas, pero buenas.
Mei rogaba mentalmente a todos sus ancestros para que la conversación quedé ahí, pero claramente no la escucharon porque la conversación siguió su rumbo.
— Las matemáticas son importantes si quieres tener un buen futuro. — Ming agarro otra cuchara de la comida. — Siempre lo digo.
— Tiene razón, es solo que soy mejor en otras cosas como el arte, la escritura y ese tipo de cosas.
— Esas cosas no sirven, al final solo entorpecerán tu camino.
Miriam ya no supo que responder, no era la primera persona que se lo decía pero que mas daba, había aprendido a ignorar esos comento asi solo la miro con una sonrisa bastante forzada.
