Meilin piensa que tiene una buena vida pero todo se vuelve extraño cuando comienza a sentirse rara alrededor de su mejor amiga.
Pero las cosas se podrían peor poco a poco gracias a su mamá.
• Mei x Miriam.
• Shipp lésbico.
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Lunes, Toronto - Canadá.
— En serio chicos, tienen que venir, nos vamos a divertir. — Pidió Priya a sus amigos, cruzada de brazos y recostada en la pared del pasillo de la escuela.
— ¿Ir a donde?
Preguntó Mei integrándose al cúmulo de sus amigos sin entender bien de lo que estaban hablando.
— Priya nos esta invitando a una pijamada, hoy en su casa. — Respondió Miriam con una sonrisa.
La cosa era que los papás de Priya habían salido, no volverían hasta el otro día y ella les había pedido permiso para hacer una pijamada con sus amigos, aceptaron y ahora los estaba invitando, las pijamada siempre solían ser en casa de Miriam, pero esta vez la de amarillo era quien tenía la oportunidad.
— ¿Hoy? Mmh. — Mei hizo una mueca ante las ganas de ir. — No se si mi mamá me deje, pero preguntaré.
— Chica tienes que venir, estaremos todos, Abby, Tyler y Miriam ya dijeron que si.
Miriam pareció pensar un poco mientras sus amigos intentaban convencerla, había estado esforzándose por olvidar el mal momento que había pasado el día anterior con la señora Lee pero sabía que las cosas iban a complicarse un poco mas ahora, tenía que aceptarlo.
— En realidad, yo no creo que pueda ir. — Confesó y todos sus amigos voltearon a verla rápido.
— ¿Eh? ¿No irás? — Soltó Mei con un tonó de voz más triste.
Era extraño que justo ella no fuera a alguno de sus planes, normalmente era a quién le daban permiso fácilmente, casi todo el tiempo.
— ¡Pero habías dicho que si! — Abby se exaltó, pero todos estuvieron de acuerdo en eso, ya había aceptado.
— Lo se y lo siento pero olvide que mmh... tengo que ayudar a mi mamá en algo, justo hoy.
Las miradas de confusión de sus amigos no tardaron en llegar, Miriam sabía que harían más preguntas y no quería que eso suceda y felizmente para ella, no sucedió.
— Ehh Mei... ¿Esa no es tu mamá?
— ¿Qu-qué?
Tyler señaló a quién era efectivamente su mamá, todos voltearon a ver algo asustados, solo estaba a unos metros de ellos.
Todos se tensaron y Lee no pudo evitar sonrojarse por el miedo de que su mamá pudiera hacer algo vergonzoso. Comenzó a empujar a sus amigos al salón de clases rápidamente para evitar que los vieran, decidieron sentarse juntos y cerca a la puerta comenzando a actuar de espías.
— No entiendo porque está aquí. — Suspiró fuertemente, algo nerviosa y con un tono molesto.
— Es extrañó. — Comentó Priya viendo por la puerta cada movimiento de la mamá de su amiga. — Entró a la oficina del director.
