⁷ π No lo hare π

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- Jamás te amare, eres muy estúpida si crees que yo llegaría siquiera a saber que existes - dijo viéndola con odio

- Pe... Pero yo... Yo solo - intentaba contener las lágrimas

- Lily es la única que amare no a una tonta como tú, maldita, solo por qué eres de sangre puro crees que puedes hacer lo que quieras - Ella lo veía con sus ojos cristalizados y un nudo en la garganta, le dolían todas las palabras que le decía Severus, él era su primer amor y solo le había confesado su amor con la intención de sanar la herida que ahora tenía.

Severus al ver qué ella ya no tenía más que decir la vio con enojo y paso a su lado aventando la con el hombro.

- Solo fue tiempo perdido venir aquí - con eso se fue sin darle tiempo a hablar

T/N no sé movió de su lugar, sus lágrimas comenzaron a salir, se las limpio pero no paraba de sollozar, por suerte no había nadie al alrededor, andie podía ver lo patética que era al pensar que alguien como Severus podría llegar a amarla, jamás sería de su agrado y el se lo confirmo. No lo culpaba después de todo solo era hija de papi, una niña mimada, una niña que había conseguido buenas notas engañando a algunos de sus compañeros, eso no lo podía evitar, sus amigos le habían dado tales ideas y con el aprendizaje que recibió de niña no se alejaba mucho de lo que hacía.

Sin en cambio Lily Evans era perfecta, amable, cariñosa y agradable ante cualquier persona sin importar como sea, lloro liberando el dolor, cayó de rodillas incapaz de sostenerse más.

Su hermano la buscaba desde que había visto a Severus con rostro de dolor, intento hablar con él recibiendo solo las palabras.

- Estará mejor sin mi, yo solo causo dolor - luego se fue

Lucius camino hasta encontrar a su hermana, la cual estaba al borde del lago negro, sin decir nada se acercó y la abrazo, ella correspondió llorando en su lecho, mojando su camisa con sus lágrimas.

Lucius intentaba consolarla, pero lo único que la ayudaría en ese momento era su amado peluche de figura de cancerbero, era un regalo que su madre le había dado en su último cumpleaños antes de morir, Lucius sabía eso por eso siempre estaba preparado, saco aquel peluche y se lo dio ella agradeció con la mirada y se dejó abrazar por su hermano mayor.

La familia Malfoy era la más conocida y por lo tanto sus descendientes, no era de esperarse a una Malfoy débil, por eso su padre los educaba de una manera muy estricta y cuando alguno no obedecía había castigo, T/N era una Malfoy rebelde y muy ambiciosa, pero a veces eso llegaba molestar a su padre terminando por golpearla con un látigo, diciéndole que nadie tenía mejores expectativas que él.

T/N se había calmado ya, pero eso no evito que se sintiera mal y muy adolorida por el rechazo de su único verdadero amor.

El tiempo paso, T/N aún seguía enamorada de Severus pero eso solo eran sentimientos que lograba ocultar, su padre había muerto por lo que se sintió libre, Lucius la apoyo en todo momento sin importar que tan loca se escucharán sus ideas, él estaba ahí para ella, T/N se convirtió en una mujer muy poderosa, millonaria y deseada por cualquier hombre, no era mortifaga pero eso no importo tanto, ella desde un principio no quería serlo.

Severus por otro lado se convirtió en profesor del colegio donde había estudiado además de haber conocido el verdadero amor, se convirtió en mortifago pero esto lo llevo a revelar el donde se ocultaban los Potter, error que se lamentaría por toda su vida pues su mejor amiga había muerto, al enterarse fue a verla no pudiendo evitar llorar, abrazando el cuerpo de ella con un intento de revivirla con solo ese acto, se alejo de todo y todos, su único compañero que estaba ahí era Lucius, quien le decía todo de su hermana, así como él se lo había pedido.

Severus SnashotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora