⁵⁸ (・o・;) Máscara (・o・;)

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Un hombre con cabello blanco y barba a apenas crecida caminaba con rapidez al cuarto de sus hijos, ellos ya eran adultos pero aún así seguían viviendo con él, su esposa había fallecido y fue esa la primera razón por la que ellos estaban con el, pero ella ya llevaba varios años fallecida.
Abrió la puerta y los encontró a ambos leyendo un libro cómodamente sentados en su sofá individual mientras bebían café.

- Severus, Lucius - ellos voltearon a verlo - Organizaré una fiesta y en ella quiero que ambos busquen una pareja para pasar el resto de su vida junto ella - les avisó

El primero en levantarse fue Lucius quien lo miro ligeramente enojado cruzándose de brazos.

- Pero padre, no hay mujer que se merezca aún hombre tan espectacular como yo - activo su modo diva.

Severus también se levantó y frunció el seño, se puso aún lado de su padre.

- Padre, eso es una locura, nosotros debemos estar contigo en esos días tristes -

- Pues al parecer no se han dado cuenta, en dado caso yo se los recordaré, no eh estado deprimido desde hace ya varios meses y mis recaídas las paso mejor solo - se cruzó de brazos.

Ambos pusieron caras ofendidas, luego caminaron de nuevo a donde estaban.

- Ya eh hablado, buscarán pareja y punto - salió .

- Hermano - Hablo Lucius leyendo su libro.

- ¿Que? - tomo un sorbo de su café

- Estamos muertos - Severus asintió suavemente.

Paso una semana desde aquella noticia y ambos hermanos ya habían comprado su traje, ya que su padre los había obligado, aquella fiesta era de mascaras y todas las doncellas tanto casadas como solteras fueron pues esta familia era la más reconocida por sus actos y en especial por los guapos y caballerosos que eran Lucius y Severus, el hermano de Albus también asistió pero no fue solo, fue acompañado de una joven misteriosa y al tener máscara nadie la reconoció.

El día solicitado llegó, todos los invitados ya estaban dentro y solo algunos estaban fuera, habían mujeres que se acercaban a los hombres, Severus las ignoraba y Lucius ponía una excusa para irse. Ambos hermanos estaban en la barra tomando algunos tragos, Albus los veía de lejos negando con la cabeza con cansancio.

Durante algún tiempo a ninguno le llamo la atención ninguna mujer, hasta que ella entró, la joven misteriosa que sonreía y reía con los jóvenes que estaban a su alrededor, Severus giro su cabeza intentando ver algo con que pasar el tiempo o al menos como escapar de aquel lugar, hasta que la vio, esa joven llamó la atención de Severus. Durante un buen tiempo no la dejo de mirar y Lucius lo noto, sonriendo se acercó a ella, le dijo una palabras y señaló a su hermano con la cabeza, él hizo cara de fastidio y se volteo para seguir bebiendo.
La desconocida se acercó a él y le sonrió, él hizo lo mismo.

- Hola - dijo ella con su suave voz.

- Hola - contesto con un poco de nerviosismo.

Comenzó a sonar una canción de tango, ella se veía emocionada y Severus por suerte sabía bailar.

- ¿Le gustaría bailar conmigo? - extendió su mano.

Ella asintió emocionada aún más, ambos salieron a bailar esa canción, para la suerte de ambos, congeniaban perfectamente y bailaban muy bien, eran una la pareja perfecta según a la vista de su padre, después de eso hablaron un poco de ellos y el tiempo que estaban en la escuela, más la conocía y más le parecía conocida a Severus, intentaba ver detrás de la máscara pero ella lo evitaba, fueron las doce y ella lo supo, la joven misteriosa tuvo que irse con prisa, antes de irse Severus la detuvo.

Severus SnashotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora