Severus Snashots

⁵² (●♡∀♡) Truenos (●♡∀♡)

- ¡SIEMPRE QUE TE VEO ESTAS SONRIENDOLE AL LINCANTROPO! - Grito lleno de furia y claros celos su novio.

- ¡NO ES VERDAD, SOLO LE AGRADECÍA POR HABERME EXPLICADO UN TEMA QUE NO HABÍA ENTENDIDO! - Intento defenderse con lágrimas en sus ojos.

- ¡Esta vez no funcionará, ya te había dicho que si hay cosas que no entendías fueras conmigo, pero no, tienes que ir siempre con ese maldito hombre lobo! - se cruzó de brazos y le dio la espalda.

- ¡Él no es un maldito! - también se cruzó de brazos y las lágrimas salían de sus ojos.

- ¡Vaya, ahora hasta lo defiendes! -

Ella no dijo nada más y solo bajo la mirada, sollozaba en silencio, no habían discutido de tal manera por los celos de Severus, de echo ni siquiera lo hacían esa era la primera vez y era muy dolorosa para ella.

- Lo mejor será que te vayas Severus - susurró pero fue suficiente para ser escuchada.

Él volteo a verla aun enojado y bajo sus brazos dejándolos a los lados.

- Bien si eso quieres - salió azotando la puerta.

TN se arrodilló aún soltando lágrimas y llorando en silencio, se cubrió el rostro se sentía impotente. Ella no había echo nada malo  solo pidió ayuda y dio una ligera sonrisa en agradecimiento, Severus fue el que se dejó segar por sus celos y sin importarle nada la tomo del brazo y la llevo hasta aquel baño.

Sus hermanos mayores, los gemelos Weasley, hicieron su aparición poco después, no fue a propósito solo querían hacer otra broma, pero al verla ahí tirada fueron a ayudarla dejando todo de lado.

Se hacía tarde y habían señales de lluvia, ellos sabían el mayor miedo de ella, los truenos, a penas si se escuchan y ella ya estaba oculta bajo una enorme manta bien abrigada o en los brazos de Severus.

A él le fascinaba abrazarla en aquellos días pues veía como ella se ocultaba en él, adoraba la manera en como lo abrazaba sintiéndose protegida, para luego de que ya aya terminado la tormenta, hiciera como si nada hubiera pasado, disfrutando de la demás tarde de un buen libro y café o chocolate caliente. De verdad amaba esos días.

Cuando empezó a llover, ella estaba ya en su sala común rodeada de muchos cojines y almohadas, junto a sus hermanos abrazándola.

Los trineos comenzaron a hacer de su presencia, asustandola cada vez que uno caía, se ocultaba tapándose la cabeza con una cobija, los gemelos la abrazaban con amor y protección, mostrando con orgullo que ella era su hermana favorita.

Severus caminaba como si nada pasará por los pasillos, tenía una lucha interna, entre ir corriendo por ella y abrazarla o seguir con su orgullo, era claro lo que escogería, por eso caminaba tranquilo por los pasillos escuchando los truenos.

En algún punto del colegio se tuvo que encontrar a Albus, este lo vio confundido por verlo en los pasillos.

- Muchacho, ¿Que haces aquí?, ¿No se supone que amas estar con la señorita TN en estos días lluviosos? - Severa lo vio con rostro enojado confundiendo lo más.

- Ella ya no me quiere, de seguro esta con Lupin - Albus lo vio dudoso

- ¿Porque dices eso? -

- pues ella le dijo a Lupin, "Gracias profesor es usted magnifico" y le sonrio, Albus, ella le sonrio - se cruzo de brazos bufando.

Albus no pudo evitar reírse, se cubrió su rostro con una mano mientras se sostenía de un hombro de severus, él lo vio raro, extrañado por la acción de Dumbledore.

- Severus, muchacho, no puedo creer que estés celoso por eso, ella te ama - intento calmarse pero siguió riendo suavemente.

- Si, lo se, pero no me agrado que le sonría a ese tipo vagabundo -

-  hay severus, ¿Porque no mejor vas y hablas con ella? - le dio su opinión

- Y ¿Porque yo tengo que ir con ella? - se cruzó de brazos en un claro berrinche.

- Pues, porque lo más probable es que en este momento ella esté debajo de una cama o - espero un momento y camino unos pasos de él - remus la este protegiendo de los truenos -

Severus volteo a verlo enojado bajando los brazos, estaba ahora más enojado.

- A mi pequeña solo la protejo yo - salió corriendo a la sala de Gryffindor.

Albus sonrió, aún tenía el toque de manipulación.

Severus al llegar a la sala y entrar después de que el retrato le reclamo, vio como los gemelos la abrazaban con amor e intentaban hacerla reír pues ella estaba debajo de una cobija cubriéndose, su furia seguía creciendo, se acercó para poder empujarlos y cargar a TN para llevársela a su habitación.

Ella reía aún más, no sabía lo que pasaba pues aún tenía la cobija en su cabeza. Al llegar a la habitación, la acostó en su cama, ella se descubrió la cabeza, al ver a Severus se enojo.

- Yo te cuido cariño, soy el único que puede cuidarte - Ella estaba enojada así que lo ignoro cubriéndose de nuevo la cabeza.

TN abrazo una almohada dándole espalda a Severus, él sonrio porque le gustaba verla enojada, se acostó detrás de ella y la jalo de la cintura para quedar su pecho con la espalda se TN.

- Amor - le susurró cerca del odio pero TN no respondió. - Cariño -  le dio un beso en la mejilla.

Ella lo siguió ignorando, Severus suspiro y pego su mejilla con la de ella.

- Pequeña, se que no debí enojarme contigo por una estupidez, pero te amo y me da miedo perderte, ¿Me perdonas? - Le sonrio mientras la miraba, TN siguió ignorandolo. - TN, por favor pequeña, no me ignores - le susurró aún más cerca de ella.

En aquel momento callo un trueno, que la ventana de la habitación de Severus mostró, ella volteo atemorizada, se ocultó con su cobija y la capa de Severus, abrazandolo, ocultando su rostro en el pecho de él. Severus sonrio y la abrazo protectoramenete, dándole un beso en la cabeza.

- ¿Me perdonas? - susurro cerca de sus labios, ella lo beso cortamente.

- si, pero la próxima no - se volvió a ocultar en el pecho de él.

Severus sonrio mientras la abrazaba aun más, ahora solo esperaba que acabará la tormenta.